Ginger Bonnaire

Descripción de la personalidad:
Por lo que al mundo exterior concierne, Ginger regresó de Francia hace dos años completamente cambiada, tras pasar todo un verano en la mansión de su familia. De la chica con aspecto tomboy, arrogante, rebelde, malcriada, caprichosa, altanera, hiriente y perezosa en cuanto a estudios refería. No quedaba nada. Como si hubiesen enviado a una nueva bruja en intercambio.

Se ofrece fría a todos aquellos que van contra sus creencias puristas, las cuales siguen siendo tan o más estrictas que en el pasado. Altiva y elegante, se presenta como una excelente compañera de tertulias y se esfuerza lo mejor posible por sobresalir en sus estudios y aprender sobre diversos temas para ser fluente durante improvisadas conversaciones.

Se maneja con exquisito garbo y elegancia frente a las personas, y jamás se le verá coqueteando con nadie abiertamente. Es reservada y a pesar de su carácter purista, nunca se le podría acusar de haber devuelto un insulto o provocado una confrontación con algún liberal.

Es de hablar pausado y rara vez se le escuchará elevar la voz. Camina con calma, nunca se le verá llevar prisa. Es puntual y comúnmente se le puede hallar en la biblioteca profundizando temas que comúnmente saldrían en una conversación en algún tipo de reunión social.

Ahora bien, tras la fachada de damita de sociedad, aún queda la naturaleza dominante que jamás permitirá ser pisoteada. No sería raro que tras dedicarle una delicada sonrisa a un sangre sucia que la haya humillado de alguna forma, este mismo apareciese inconsciente en uno de los baños con la cabeza rota unas horas después, cuando todos parecen haber olvidado lo ocurrido. Siempre asegurándose no ser descubierta (algo más en lo que difiere de su antiguo yo, a quien no le importaba ser descubierta y solía hacer las cosas de hecho con la intención de meterse en problemas). Su ahora marcada elegancia y educación, no impide que siga poseyendo exquisitas inclinaciones sexuales que decantan por cualquier sexo, sin restricción en particular.

Le gusta el color violeta en todas sus tonalidades, el café expreso y los duraznos, así como las rosas blancas y el invierno. Le teme a los espacios reducidos y las doxyes. Es alérgica al mordisco de los gnomos de jardín.

Historia de tu personaje:
Ginger y su hermano, Oliver, nacieron durante una terrible noche de tormenta en Lyon, Francia. A pesar de ser la menor de ambos, Ginger demostró su carácter dominante desde el primer instante al salir aferrada al pie de Oliver.

Amaba la magia y la desarrolló desde muy temprana edad, haciendo uso de esta siempre que le era posible. Incluso su esto indicaba castigos de parte de sus padres y constantes llamados de atención por parte del ministerio. Incluso llegó al punto de atacar muggles con esta. Tras el segundo ataque sus poderes fueron neutralizados hasta el día en que ingresara a Beauxbaton. Durante aquellos años sin magia, logró desarrollar otras habilidades de tipo físico y mental, tales como prácticas de artes marciales, participación en torneos de ajedrez y gobbstones. Un amplio conocimiento básico en instrumentos como la flauta traversa, el piano y el saxofón. Y ganadora insaciable de competencias de comida y de salto en costales, entre muchos otros.

Mientras crecían, los gemelos mostraron comportarse como cualquier otro par de hermanos. Se amaban y se odian por igual, dependiendo del clima del día, por decirlo de alguna forma. Oliver era mucho más discreto que Ginger por lo que ella siempre estaba metida en problemas y a él le consideraban en niño ejemplo.

Aunque Ginger siempre fue dominante, por alguna razón Oliver siempre tenía las de ganar, y en lugar de ganarse el respeto de su hermana, siempre parecía que ella le odiaba. Así, hasta el día que fueron separados para ir a sus escuelas mágicas. A cientos de kilómetros de distancia, los gemelos se comunicaban vía lechuza constantemente. La pequeña creía que solo él podía entenderla, y comenzó a tomarle un aprecio que jamás pensó poder desarrollar por él. Durante los veranos pasaban horas y días juntos entre juegos y travesuras, y jamás le había costado tanto separarse de él.

A diferencia de su hermano, Ginger parecía no madurar y con el paso de los años se hacía más rebelde. Al ingresar a la escuela, con el retorno de su magia, sus ansias de poder incrementaron así como su desprecio hacia los sangre sucia. Arrasó en el club de duelos así como en el equipo de quidditch, y en cuanto club le era posible participar. Todo era válido con tal de salir siempre como ganadora. Durante las vacaciones siempre elegía asistir a los más osados campamentos. Como la ocasión en que pasó una semana en casa de los Lefebvre a causa de una quemadura causada en el torneo de domadores de Mini drakes en Inglaterra, donde su drake se salió de control y le escupió encima, allí conoció a las chicas Lefebvre y a Sandro Levine, este último se ganó su "respeto" por soportar y contraatacar su explosivo carácter.

Ginger fue expulsada en dos ocasiones de Beauxbaton, la primera en segundo grado por fracturarle el tabique a una sangre sucia contra el borde de un lavamanos en el baño de chicas, aparentemente sin ningún tipo de provocación. La segunda, en 5 grado, por escupirle a los pies a la profesora de Estudios Muggles, y llamarla lamebotas, y bruja de quinta. Su padre tuvo que mover cielo y tierra para que la chica pudiera culminar sus estudios satisfactoriamente. Con TIMOS y EXTASIS superados en DCAO, Encantamientos, Transformaciones, Pociones, Herbología y Cuidado de Criaturas mágicas, la joven bruja abandonó por fin lo que para ella había sido la peor prisión en el mundo.

Tras la graduación, Ginger decide viajar a Inglaterra. No solo por la infinita necesidad de encontrarse con su hermano, pero por el nuevo trabajo de su padre quien fuese trasladado de un ministerio al otro, entre Francia e Inglaterra. La idea de nuevos aires le llamaba la atención. En un principio se estableció en casa de Damien Holland por petición de su padre.

Amigos, enemigos, amantes y demás, vinieron y se fueron. La relación con su hermano se hacía cada vez más tensa. Ya por el libertinaje de ella, o por la posesividad de él, quien desde el punto de vista de la bruja, pensaba que Ginger era de su uso exclusivo para sus más bajos y perversos placeres. No que ella se negara por supuesto, pero por este motivo y tras que Oliver casi matara a su amante de momento "Selene Cullen" tras hacerla caer desde una de las torres de la universidad, Ginger abandona Brigantia y se va a Norte América con la licántropo donde termina convirtiendo su vida en un despojo de vicios y perversión.

Pero la "felicidad" y el desatino le duraron poco cuando recibe mensaje de Sandro informándole sobre los movimientos de su padre para derrocar al Señor Oscuro, Carlisle Mott. Sin más regresa a Londres abandonando a Selene en América y retomando sus estudios sin pérdida de tiempo. Apoya a Damien pero comienza a alejarse de él cuando crece su figura de héroe nacional. El encierro de Sandro termina de llenar la copa y abandona la mansión, consiguiendo un departamento donde se instala sola al perder no solo a su [/i]role model[/i], pero tras que los Lefebvre se trasladen a Francia tras la masacre y caída de los mortifagos.

Pasaría quizá medio año cuando durante las vacaciones de verano decide viajar a Paris en busca de su madre. Con su ayuda y sin dar mayores explicaciones de las razones por las que se impondría a tal cambio; Ginger comienza un entrenamiento intensivo en las maneras de la alta sociedad. Cosas que ya había aprendido en su niñez pero que JAMÁS antes había puesto en práctica.

Comienza un nuevo año en la universidad, el último en su carrera. Ahora realiza prácticas en San Mungo en la planta de Daños por Encantamientos. No ha visto a su hermano desde que comenzó el verano, y tras dos años de fuertes estudios, Ginger es simplemente imposible de reconocer. No solo porque sus cabellos ya no son cortos y desordenados, ni porque ya no se le vea con ropas como chico; pero porque ya no va por los pasillos insultando a las personas o golpeando chicas sangre sucia en los baños.