HELADOSSSSSSSSS

Sofie estaba de vuelta en España, ya no volvería a la universidad aquel semestre, ni podía iniciar ninguna actividad seriamente a mitad de año en el país del sur. Así que, acopio de voluntad propuso a su madre ir a pasar unos días con sus abuelos en Castel Combe, Inglaterra. Y bueno... allí si que se viví la magia, en aquel castillo familiar que esta fantasmas tenía!!!. Y lo otro bueno de pasar una temporada con los abuelos, es que como nieta siempre lejana, le consentían en todos sus quereres.

Una escusa y otra, mientras cocinaba a punta de varita con su abuela, terminó convenciéndola de dejarla a ir sola al callejón Diagon al día siguiente para comprar tonterías y pasear un rato, prometiendo que volvería antes de la cena con el traslador que su misma abuela le había programado, y que le mandaría patronus a cada rato. En verdad lo único que Sofie quería era pasear un rato, pero también se había escrito con Sky y coordinado juntarse en la heladería para charlar y verse las caras, ahora que al no ir juntas a la uni no podía pasar todo el rato que hubieran querido juntas.

- Llegué muy tarde? hace mucho que me esperas??... - le saludó luego del correspondiente beso, ya jalándola para poenrse en la fila para pedir helados. - yo quiero ese - dijo al dependiente, señalando el más grande de unos vasitos que allí expuestos hacía de muestrario - de... mmm... pistacho acaramelado y.. a ver... choco-fresas.... Tu sky? yo invito!... ahh... peude ser bañado en chocolate púrpura?- preguntó al dependiente, ya buscando las mil monedas mágicas en sus bolsillos.

Se rió con ella, porque sucedía que con los amigos se le olvidaban los formalismos de saludar y su mente corría de inmediato a otras cosas, como pedir un buen helado para YA sentarse a cotillear. También, en el mismo gesto, apoyo su lateral en el de ella, dejando caer la cabeza un segundo en su hombro, mimoseando como gatito que ha roto un jarrón persa. - los dulces son la perdición... no digas nada, desde el semestre pasado, que me la he pasado comiendo las tonterías de la cafetería de la uni, engordé tres kilos...-

Sofie no era de las que se hacían mucho problema por tres kilitos de nada, pero ahí estaban armandole un insipiente rollito sobre la linea de finalización del pantalón. - de todos modos, ahora que no tengo nada que hacer en España, empezaré el gimnasio, o volveré a danzas... algo, moverme un poco.... Viste que con los horarios de la universidad, no da tiempo a hacer un deporte. - Sofie recibió su helado y espero unos segundos a que el de Sky estuviera terminado para ir con ella a una mesita que en la acera y con sombrilla permitía sentar hasta cuatro personas. Dejó su bolso en una silla y se sentó en otra.

- ya lo sabes, no?... no volveré a la uni. Ha sido una linda experiencia, pero... no es para mi. Estar tan lejos de casa, mamá sola allí... Tengo que conseguirle un novio decentes. Tienes algún otro tío para prestarnos?... - y volvió a reír antes de darle la primer lamida al helado.

- no seas egoista! seguro tienes un montón de tios!...- le siguió la broma, luego de no haber sabido que cara poner cuando le decía que la echaba de menos. Y no era la única, todo mundo parecía quererla tanto y Sofie teniendo que elegir entre sus amigos en la uni o su madre alcohólica. Nada. ya estaba decidido.

- bueno un primo tuyo! tienes alguno de 25 años para arriba?... - y se rió de nuevo, que todo el mundo sabía que a su madre tanto gustaban jovencísimos como viejísimos. Y apuró a lamer un trozo de helado que pretendía deslizarse mano abajo. Maldita gravedad y el calentamiento global!!

- como sea... Tu? que planes tienes para este semestre?.... Debes estudiar menos e ir a más fiestas... que pasó con aquel chico de hace mil años?... el que te regaló el colgante ese tan bonito?

- si... entiendo lo que dices - le acompañó en el relato mientras comía el helado, como si en verdad entendiera de que iba esa frase "si no saco mi furia no consigo nada, y si la saco, me paso de largo.." Pero no, no sabía a que se refería. Solo la interpretó conceptual, a ella también le sucedía que si se enfadaba mucho luego terminaba arrepintiéndose de sus hechos.

Se rió un poquito detrás del helado con lo d los chicos. Y procedió a contarle su propia experiencia. - Si, todos quieren eso... Luego te das cuenta que tu también quieres eso, luego te enamoras, luego lo tienes que dejar porque te mudas a millones de kilómetros... - medio bromeó falsa tristeza, medio era verdad que aun dolía estar tan lejos de Adair... - Que decir? Sobre Adair, todas decían que era un patán, hasta él lo decía! y luego me conoció a mi y es... fue... no sé en que tiempo verbal, pero si sé que fue el mejor novio del mundo. El mejor. -

((la historia era así, Adair conoció a Sofie el primer día de uni, idas y vueltas un mes, se ponen de novios, son la pareja feliz de Brigantia, y con ella dejando la uni el noviazgo está roto.))