Plan de sonidero

Angus estaba entusiasmado con la idea que Aquila había tenido con eso de la fiesta en el descampado. Él no era fanático del tipo de música con el que Josh Zapata se manejaba pero sabía que mucha gente sí y que eso jalaría. Siempre que frecuentaba el bar, le decía que hicieran negocios pero nunca se concretaba nada. No sabía cuánto ganaba en sus empleos ni si la idea le iba a parecer atractiva, pero no perdía nada intentando, además iba a llevarse ganancias.

Estaba esperando a que Zap se pasara voluntariamente por el bar para interceptarlo. Pero ya era casi hora de cerrar y él no se había aparecido. Tampoco Aquila, Sofie o Gianna, lo que ya era raro. Eso solo significaba que seguramente habían tenido un día muy pesado en periodismo, pero que en cualquier momento al menos Aquila se iba a aparecer.

Antes de que eso pasara, salió un momento para enviar un par de patronus, los dos con el mismo mensaje pero con diferente destinatario, que los esperaba en la cafetería de Brigantia alrededor de las 11:30. El primer destinatario fue Aquila, el segundo el mismo Zap.

Terminó de atender a la última clientela que quedaba y luego los tuvo que correr porque ya era hora de cerrar y no se iban. Ya eran las 11:20 cuando llegó a la cafetería, que Elisa también ya estaba cerrando aunque Angus le pidió que la mantuviera abierta solo en lo que ellos llegaban. Al menos para que pudieran ver la luz. Elisa se fue a la cocina o a algún lugar y él se quedó sentado en una de las mesas.

Tamborileaba con los dedos sobre la mesa. Esperando con una taza de café en las manos aunque seguro que Elisa le había puesto un poco de brandy porque le sabía a eso. A la distancia logró ver que alguien se acercaba a la cafetería. No sabía si eran los citados o si era alguien que por la luz prendida pensaba que todavía estaba abierto.

No estaba ni durmiendo ni en pijama (o la ropa interior a la que llamaba pijama) cuando había recibido un patronus de parte de Angus Finnerty. Recibirlo a esa hora le pareció un poco alarmante y un poco extraño por ver de quién venía el mensaje; aunque no era nada que indicara tragedias pues sólo quería verlo en la cafetería ¿Seguía abierta a esas horas? Tal vez él conocía a alguien o tenía llaves o cualquier cosa. Como bien decía no tuvo qué vestirse, por que estaba vestido, y cerró el libro del que sacaba apuntes para una tarea de último minuto para el profesor Loskey. Sólo subió a guardar sus cosas y ni siquiera se llevó sus sempiternos audífonos.

Llegó hasta el lugar completamente vacío salvo por Finnerty acompañado de una luz mucho más modeasta que la normal, seguramente por que nadie tenría por que ir a la cafetería al filo de la media noche. No iba a escandalizarse con eso de estar rompiendo alguna regla por que le daba tan igual como cuando salía de la sala común a deshoras, y saludó a Angus con la mano, de lejos. No parecía estar preocupado o nerviosoy eso le tranquilizó. La verdad esperaba que no lo hubiera citado ahí para pedirle dinero, pero sólo pensarlo era estúpido por que no se veía necesitado, ni le tenía confianza suficiente como para pedirle un favor así precisamente a él, más valía acercarse y ver de qué se trataba todo.

-¿La cafetería siempre está abierta a estas horas, o tienes trato especal?

Se lo preguntó mientras jalaba una silla y se sentaba, luego de saludarlo con un informal apretón de manos que parecía más un choque. Algo estaba claro, quería hablar más o menos en serio de algo, ya tenía bastante curiosidad al respecto, y no sabía si alguien más llegaría y ese era un potencial grupo de estudio, de levantamiento de armas, o de expedición al próximo partido de Quidditch de los Montrose Magpies como cuando los hinchas del fútbol se organizaban para ir a los partidos de visitante y pagar menos.

-No pasa algo malo ni nada ¿O si?. Sólo era por comprobarlo, y también por quitarse un poco la sensación inicial de recibir un patronus casi a media noche. A veces sus hermanas le enviaban alguno en momentos inoportunos, pero tampoco lo hacían tan seguido como para quitarle impacto a la imagen. Sonrió de pronto, como si hubiera tenido una iluminación divina... ¿De qué solía hablar con Angus Finnerty de manera habitual? -Ya sé. Negocios ¿Verdad?

Ya sabía por qué Angus le mandaba un patronus, pero dioses... ¡¿Tenía qué hacerlo a esas horas?! Pensó que había terminado tarde y que no se verían hasta el día siguiente, pero no, prefería hacerlo todo a la hora en que ya estaba en pijama y con el cabello atado. Bufó molesta por que no iba a estar perfectamente vestida para ir a encontrarse con su posible partner de negocios y no daría la mejor impresión. Se vistió con empeño pero de mala gana por que tenía qué hacerlo con prisas y no tuvo tiempo de arreglarse el cabello.

Se había retocado el maquillaje, se puso lo mismo que llevaba en la tarde, un look instantáneo para las emergencias, haciéndose una trenza rápida mientras caminaba hacia la cafetería. Ahí estaba Angus con el hombre que mezclaba música, que recordaba un poco de Hogwarts como alguien sin mucho interés, pero ya había tenido la delicadeza de no quedarse con esas impresiones de todo el mundo.
Saludó a Angus con un beso en la comisura de los labios y se sentó a la mesa, sólo diciéndole "Hola" a Josh en plan informal, sin tender manos ni nada de esas cosas. Iban a organizar una fiesta, no a invertir en las acciones de Gringotts.

-Hola, soy Aquila. ¿Ya hablaron algo? Veo que llegaste antes. Ya estaba en pijama, Finnerty

Le sacó un poco la lengua y sacó una libretita con pastas de piel de su bolso. Tenía muchas ganas de hablar de la fiesta aunque la hubieran sacado de la cama y se hubiera tenido que maquillar de nuevo, empezó por repasar las cosas que ya había anotado a solas con Angus antes de dirigirse a Josh.

-Bueno, tú mezclas música ¿Verdad? La verdad no entiendo exacamente qué es eso, pero Angus me dice que funciona perfectamente para una fiesta masiva. Verás, eso es lo que queremos hacer, una inversión para organizar una buena. Yo puedo encargarme de dineros, pero seguramente tú sabes mucho más de fiestas, y de música. De eso queríamos hablar contigo

A Angus no se le ocurrió pensar que era una pésima hora, que Aquila ya estaría en pijama por un lado y que Josh estaría pensando en desgracias por el otro. Su razonamiento no había dado para pedirles una cita mañana más temprano en vez de esperar a que cerrara el bar, o mejor, que fueran al bar antes de que se cerrara para platicar en la barra luego de que se acabaran las clases de ellos. Un aplauso para el lobo, que esta vez se había lucido. Malik tenía razón cuando lo llamaba lobo estúpido en ocasiones como esas.

-Tengo trato especial, es un trato hecho por el Estatuto de Trabajadores de Brigantia.-No sabía ni qué mierdas estaba diciendo pero Elisa le había dado oportunidad de tener ese meeting ahí en lo que ella terminaba de arreglar lo de la larga jornada laboral. Era más difícil mantener bien la cafetería que el bar.

-No, no pasa nada malo, ni pensé que era ya pésima hora. Ustedes los estudiantes.-Hasta para él era pésima hora ya que lo pensaba con la cabeza fría pero ya qué, ya estaba ahí y si Aquila no llegaba él de todos modos se lo podía decir.

-Adivinaste, negocios…-Pero Aquila sí llegó, antes de que pudiera decir nada. Se aguantó la risa de que ya hubiera estado en pijama. E iba maquillada así que ya se imaginaba a la loca odiándolo por dentro por que la había obligado a levantarse. Ni le pidió perdón. Aquila, como buena negociante, empezó a hablar de los planes que tenían. Cuando dejó de hablar, Angus retomó la palabra.

-Estábamos pensando en algo como un descampado, una zona como por Brighton, invertir un poco para cosas básicas y cobrar la entrada. 5 galeones por pasar y por la primera cerveza. O no sé, hay que redondear bien eso y planearlo pero…-Si empezaban a invertir en lonas, equipo de luces y esa cosa, más le valía encontrar un buen socio a largo plazo. No pensaba gastar todo lo del anillo en eso tampoco, pero era un buen comienzo.

-Pues eso es, a grandes rasgos, ¿te animas?-Y también había que invertir en la seguridad, en meterle a todo buenos hechizos de protección, eso no se le olvidaba y lo iba a tener muy presente todo el tiempo.

Que estuviera dentro del grupo de ustedes los estudiantes le hacía reír por que pensó que después de Hogwarts no habría más escuela ni más horarios, estudios y exámenes, y resultaba que volvía a voluntad a lo que se había jurado no repetir. No se la pasaba tan mal por que podía hacer todo lo que quería y estaba aprendiendo muchas cosas aunque estuviera extenuado y constantemente se sintiera un poco inútil haciendo esfuerzos de más como si necesitara Ritalin para su déficit de atención.

Eran negocios, claro estaba, y antes de preguntar llegaba otra chica que saludaba a Angus con una confianza que indicaba que estaban juntos, o medio juntos, cosa que le confirmó hablando con tanta autoridad del asunto que los había llevado hasta ahí. Si ella tenía la primera palabra era por que estaban juntos, más si le reclamaba que ya estaba en pijama cuando le había llegado el patronus. Ahora la recordaba, también estaba en periodismo, no era de las que pasaban desapercibidas en un salón de clases. Y decía no saber qué era mezclar música, por conclusión no tenía la menor idea de lo que él hacía pero aún así lo quería en sus planes. Había que tener muchas ganas de hacer dinero para arriesgarse así, o tal vez Angus ya le había dicho que no era un principiante experimentando y podía ofrecer un espectáculo decente.

Se sintió un poco abrumado con tantos planes e información y también le pareció curioso que fueran los primeros magos que, al menos con él, quisieran implementar el concepto de fiesta masiva. -Por lo que entiendo ¿Quieren organizar casi un rave? Bueno, una fiesta. Brighton suena bien, y cinco galeones... ¿Qué tal siete? no cobras sólo por el tiempo que la gente está ahí, también por organización. Este tiempo que invierten ahora también va al cobro, piensen en eso ¿Saben qué música toco yo? ¿Les interesa?

Había que estar seguros de lo que querían, y si querían trabajar con él, por que si Aquila no sabía qué era mezclar música y Angus lo escuchaba hacía ya varios años cuando su estilo no estaba ni un poco pulido, más valía preguntar en vez de que lo bajaran del escenario a abucheos o algo algo así de malo para la reputación de un DJ, aunque fuera entre magos.

-¿Esto será sólo entre magos?

Miró a Angus después de hablar, cuando decían que estaban pensando en un descampado, quizás la playa. No había pasado todo el tiempo pensando sin fundamentos y había investigado un poco en folletos turísticos mágicos sobre un montón de lugares que pudieran servir para tal menester, no se lo había dicho a Angus por que estaba esperando a que se reunieran con el "DJ", palabra, o abreviatura mejor dicho, que no significaba nada para ella. Recordaba al tipo de Hogwarts, jugaba quidditch y jamás en la vida le había hablado, pero las cosas habían cambiado, y querían hacer dinero.

-No tengo idea de qué es un rave, pero si hacer una fiesta a lo grande con música ininterrumpida en un descampado es un rave, pues eso queremos. También pensé en Dover, hay muchos parajes de playa alejados de la civilización y creo que hay algunas donde no hay mar abierto, así que corremos menos riesgos.

Sonrió a medias cuando se hablaba de subir el precio, o sea, música para sus oídos. De ser por ella cobraría diez pero los amigos pobrediablos de Angus iban a ladrar y bueno, era la primera fiesta que hacían, se trataba de mantenerse austeros pero con un espectáculo de interés. Tampoco sabía qué clase de música tocaba Josh y a decir verdad por lo que Angus le había dicho no es que agarrara instrumentos y tocara sus canciones, sino que revolvía la música de otros con aparatos que funcionaban con electricidad. Todo eso le sonaba muy de científico loco y le daba mucha curiosidad, era una pena que no pudiera darles una muestra ahí en ese momento. Decidió que sobre el género y tal hablara Angus por que con decir que no sabía qué eran los raves sentía que era más que suficiente para demostrar toda la ignorancia sobre fiestas muggles que tenía.

No había pensado si eso sería entre magos, pero empezaba a creer que sería lo más conveniente. Por que si alguien quería hacer magia y tal estar entre un montón de muggles iba a traerles problemas y todo iba a terminar en escándalo innecesario, lo que menos querían.

-Creo que sería lo mejor. Mira, muchos adolescentes dementes se escapan de Hogwarts, deberíamos repartir publicidad entre ellos también. Yo llegué a hacerlo ¿Ustedes no?... En fin, sí, nos interesa ¿Cuánto cobras, cuántas horas tocarías? ¿Conoces a más gente que pueda hacer lo mismo que tú?

Para Angus era obvio que tanto Josh Zap como Aquila tenían más nociones de cómo se hacían los negocios que él, por lo menos en ese temita en particular. Zap parecía tener experiencia, Aquila parecía tener un don nato. Así que las cosas estaban marchando bien y cuando su mujer hablaba le daban ganas de darle muchos besos por toda la cara por ser tan sexy cuando trataba negocios. Y por volverse a vestir para no ir en pijama.

Puso cara de disgusto moderado cuando Zap le subió al precio aunque sabía que era mucho mejor ese precio por el tiempo invertido que también se cobraba, y ya se imaginaba que seguro Aquila cobraría quince de ser por ella pero no iba a querer tener problemas con Joe o con Malik diciéndoles que no los iba a dejar pasar gratis y que encima los iba a desfalcar. Y por lo menos Malik tenía que pagar por dos. Y por lo menos Joe si no se había reconciliado con Pearl para entonces llevaría a alguna tipa. También por dos. No les iba a hacer eso.

-Siete está bien.-Dijo con firmeza confirmándolo y cerrándolo antes de que a la loca de su mujer se le ocurriera decir que mejor diez y Zap la consecuentara. Algo de cordura por la pobreza y la austeridad debía quedar en él. ¿Qué diría Per? Pues dijera lo que dijera, Angus le contestaría que de algo tenían que vivir y que ni modo.

-Sé qué música tocas tú, ¿o ya cambiaste mucho tu estilo?-No se iba a poner a preguntarle que si se acordaba de Fulana, porque no le gustaba hablar de sus ex novias enfrente de Aquila, pero si seguía con lo mismo o por esa línea, usarlo sería muy funcional. Todo mundo bailaba eso ya ebrio o en drogas, hasta él. Asintió a lo de los adolescentes dementes de Hogwarts, pero eso implicaría redoblar la seguridad porque si se les colaba algún menor de edad y también un auror que se chivara, también iba a haber problemas.

Y ya Aquila ponía sobre la mesa las demás preguntas que había para hacerle al DJ. Se estiró para pasarle una mano por los hombros a Aquila en gesto cariñoso pero nada que incomodara a su compañero.

Así como se lo había imaginado, Aquila Lillyvick no tenía idea de lo que era un rave. No dejaba de parecerle curioso que alguien que no sabía nada de eso estuviera tan metida en la organización de una fiesta de ese tipo, y aunque Angus parecía más enterado de las cosas muggles y esos manejos, lo que terminaba pensando era que ellos habían llegado a la conclusión de que no había manera mejor de hacer dinero entre universitarios que dando una fiesta. Lo de la playa seguía sonándole un poco arriesgado por que había visto a mucha gente drogada en las fiestas teniendo accidentes, y si involucraban agua los accidentes iban a duplicarse aunque tal vez entre magos la cosa no fuera tan drástica.

-¿A cuánta gente esperan? Yo puedo tocar hasta que la gente se harte de bailar Se rió un poco y recordó que tenía que hablar en términos más concretos -Pero hablando de un horario regular, puedo hacerlo por ocho horas. Por cuatro si quieren que llame a algún colega, y según la magnitud de la fiesta puedo darles un número.

No iba a abusar de sus posibilidades por que aunque la chica tuviera pinta de ser una de esas niñas ricas de Hogwarts parecía que quería ganar y no gastar. Les haría un descuento por tratarse de Angus y no del dueño de un club que siempre daba menos de lo que realmente podía pagar. Ahora sí era obvio que ellos estaban juntos, sobre todo por el gesto de pasarle la mano por los hombros a la chica, su chica.

-Pues ahora he hecho un poco más de trance, y la verdad es que soy mejor, cuando me viste todavía era un principiante... por lo que entiendo todo esto se mantendrá en términos ilegales ¿No? quiero decir, sin impuestos ni persmisos. Es mejor, yo ni siquiera entiendo qué requisitos tendrían en el Ministerio para hacer algo así, pero mejor no enterarnos. ¡Hey! Necesitan un nombre, y propaganda, háganlo correr como un rumor de fiesta secreta, eso siempre funciona, y la gente se siente invitada a algo especial y exclusivo, aunque no lo sea tanto Se acordó de cuando él mismo había ido a una secret party y esa era justo la sensación que había tenido, de ser el invitado más especial del mundo. A él le habia tocado hasta dar una contraseña para entrar al lugar, y era como entrar al cielo de los elegidos. Definitivamente la idea podía funcionar entre magos, más tomando en cuenta que había maneras más interesantes de poner contraseñas y secretillos que en el mundo muggle -Yo fui a una secret party hace algunos años, y en serio, era un éxito. Era una mansión abandonada, tenías que dar una contraseña para entrar y ya dentro todo el mundo consumía el doble y pasaba más tiempo ahí, por que se sentían afortunados de estar "invitados". Podría ser una buena idea

El "siete está bien" por parte de Angus era claramente su decisión final de no cobrar ni un galeón más aunque si por ella fuera y ahora sabía, también por Josh, el precio iría hasta diez. Se encogió de hombros sonriendo, aceptaba siete, era mejor que cinco. Su sonrisa se amplió cuando Angus pasaba el brazo por sus hombros y lo miró un segundo, recargándose un poco en él y después poniéndose seria de nuevo, no iban a empezar ahí de melosos en medio de los negocios.

Josh Zapata parecía conocer la materia y todo estaba resultando más sencillo de lo que había creído en un principio. Hablaba de cosas que ellos no habían considerado y también aportaba algunas ideas. Seguía curiosa por saber cómo es que mezclaba la música y sobre todo cómo podía estar tocando ocho horas seguidas ¿Ocho horas? ¿No se había confundido. Pues aparentemente no, por que hablaba muy seguro y también mencionaba a otro DJ, que sería quizás lo justo si el pobre tipo al menos quería dar una vuelta por la fiesta y beberse algo.

-No sé a cuanta gente esperamos ¿Angus? Se me ocurren unas cien personas, pero sólo estoy aventurando un número, quizás sean más. Que fueran menos me pondría triste, la verdad

Una fiesta masiva con menos de cien personas era casi ridículo. De las cosas que no entendía, no hablaba, como eso del trance, pero en vez de ponerse a hablar de su música, Zapata hablaba de estrategias de publicidad que sonaban interesantes aunque no sabía exactamente cómo llevarlas a cabo. Y eso de la mansión abandonada también le parecía rescatable, quizás hasta mejor que la intemperie. Empezó a recorrer mentalmente los lugares que podrían funcionar para tal menester.

-Oye, eso de la mansión abandonada me agrada ¿No conoces una finca solitaria, Angus? Yo estoy haciendo memoria, mi familia tenía una cerca de Cornualles que ya ni siquiera tiene techo, pero tengo que averiguar algunas otras cosas antes. Y eso de que piensen que sea exclusivo pero que no lo sea tanto es buen gancho, aunque no sé si esté muy afín a la idea de cobrar. O pagas o te invitan, no pueden ser ambas cosas ¿No?

Angus gana 11 puntos de experiencia
Aquila gana 9 puntos de experiencia
Josh gana 9 puntos de experiencia