Desde Brigantia con cariño....

por **Dadou Depaul** Jue Sep 20, 2012 4:51 am

Un suave silbido bastó para que entre todas las lechuzas una levantara las alas y las batiera, Dadou sonrío, avanzando un poco más y alzando el brazo derecho. Repitió esta vez pero el silbido fue más fuerte y la lechuza tras picotearse una pata, tomó vuelo y planeó hacia su dueña, colocándose con cuidado encima de su brazo y clavando las afiladas zarpas sin llegar a dañar – Buena chica – susurró acariciando con la mano libre la cabeza del animal, posando un beso que a penas llegó a rozar la cabeza del animal. Brigitte, sí, así se llamaba la lechuza, aleteó feliz por el consentimiento de su dueña y Dadou, cerró los ojos, riendo, evitando que la suciedad entrara dentro de sus orbes azules.

- Tengo un recadito para ti – caminó hasta uno de los enormes ventanales con al lechuza del brazo y tomó asiento en el alfeizar. El animal ululó como consintiendo el mandato de su dueña y picoteó un poco su mano buscando la típica recompensa que Dadou solía darle como anticipo a su buen trabajo – Ya, estás ansiosa hoy. ¿No fuiste a cazar ratones? – Los ojos grandes y amarillos del animal se fijaron en Dadou, esta dio un toquecito en su pico y negó con la cabeza buscando una golosina especial para lechuzas que compraron en una tienda mágica en Paris y entregándosela a su mascota quien tragó con ansias.

Alzó un poco la mano invitando a Brigitte a emprender el vuelo hacia uno de los palos, Dadou se levantó y buscó en el bolsillo trasero de su pantalón una carta escrita con su prolija letra(incluso con un suave aroma a su perfume preferido). Era solo una nota para una amiga squib que había conocido en la India, ahora la chica estaba trabajando en Londres como modelo y quería saber como estaba, solo por mantener la amistad y para explicarle como andaban las cosas con su hermana, había sido su paño de lágrimas durante su estancia en tierras orientales porque sí, echó mucho de menos su otra mitad como si una parte de ella hubiera sido arrancada. ¿Alguna vez escucharon la historia del nexo entre gemelos idénticos? Pues si, existía, no taaaan exagerado pero si, Dadou sentía demasiado apego por Daphne como si necesitara su reflejo para vivir.

- Brigitte, ven – la lechuza volvió a ir hasta donde su dueña, Dadou ató con cuidado la carta a su patita para que no se perdiera durante el trayecto y alzó el brazo para darle vuelo cuando Brigitte giró la cabeza hacia la entrada de la lechucearía. La francesa imitó el gesto de su mascota y frunció el ceño, borrando todo rastro de buen humor, en cuanto vió la figura de Parker plantado en la entrada - ¿Ahora te dedicas a espiar damas? No tienes educación.

por **Parker Luttrell** Jue Sep 20, 2012 6:01 am

Recargado en la entrada y a brazos cruzado Parker esperaba que fuera la chica quien lo notase. Tenía una razón para estar allí, debía responder a su madre que a él su ciclo menstrual atrasado le importaba poco y que si quería comprensión debía escribir Loreen y no Parker en el pergamino, pero no por ello tenía prisa en tomar una lechuza.

Tenía idea de quien era ella, pero no sabía exactamente cual de las dos, aunque siendo sinceros para el caso daba igual: mientras la vista fuera buena, aunque el aroma espantoso, no iba a quejarse... O eso pensó hasta que comprendió que la cursilería amorosa chica-bicho podía durar una eternidad y fue entonces que estrujó apenas el pergamino que llevaba en mano, a sabiendas que llamaría la atención del ave.

De solo escucharla esbozó una sonrisa sardónica, y levantó la mirada para clavarla en sus ojos. - No espío damas... si no Culos.. - Se sonrió más aun y volvió a bajar la vista dejando en claro que se contentaba de sus propias ocurrencias. Parker tenía sus ánimos alterados y la cabeza mal, pero en general era un tipo de modos lentos: hacía un gesto a la vez, pronunciaba una palabra por tiempo, respiraba, luego volvía a mirar y quizá a no decir nada. No era que no se lo ocurriera con que llenar el silencio, sino que sabía que eso incomodaba por demás a cierto tipo de personas.

Por ejemplo, en ese momento mientras no decía nada, se preguntaba por donde iría a huir la chica, pues fuera cualquiera de las dos mellizas la salida era una sola y él estaba apostado en ella. Se acomodó mejor en su sitio recargado contra el muro de piedra, pues quizá así sin decir nada la muchacha entendiera lo mismo que él, y con total indiferencia llevó la mano a los bolsillos para guardar el trozo de pergamino y sacar a la luz sus cigarros. Abrió el empaque nuevo, enrolló el plástico, lo guardo en el bolsillo derecho de su jean. Volvió a mirarla con gesto de nada y volvió al empaque para sacar un cigarrillo, prenderlo con mechero muggle, aspirar y espirar hacia arriba.

A manos limpias, se repasó la barbilla un par de veces y la intensivo a actuar - te vas a quedar mucho tiempo más aquí? - Vamos, no podía quejarse, toda una frase sin ningún insulto.

por **Dadou Depaul** Jue Sep 20, 2012 6:25 am

- Ah, entonces eso soluciona tu falta de educación

Empleó todo el sarcasmo retenido en su ser por la frase del ogmios y ni se preocupó en mirarle para decirle las palabras. Avanzó un poco hasta el gran ventanal, acarició con la mano libre bajo el pico de Briggitte y la lanzó ventana abajo. Quedó mirando como emprendía el majestuoso vuelo, batiendo con elegancia sus largas alas blancas con motitas negras y entonces giró el rostro mirando por encima del hombro a Parker. El condenado sacó un paquete de cigarros de un bolsillo, obstaculizando la única salida de la lechucería, Dadou ni se inmutó, apartó la mirada del joven y tiró su pelo hacia atrás en un gesto altanero. Ocupó su asiento en el alfeizar otra vez, cruzó las piernas bajo la falda que llevaba arrapada hasta medio muslo y aliso con las manos la blusa blanca.

¿Qué pasaba entre ellos? Pura hostilidad. Dadou no toleraba el carácter insoportable del muchacho. Era un maleducado y un osado bravucón que amenazó más de una vez con molestar a Daphne si ella no le seguía su jueguito. Por supuesto, Dadou jamás aceptó tal ofrecimiento y para bajarle dos tonitos el ego, plantó en muchas ocasiones un rodillazo en sus sagrados mandamientos. Silencio, ese día solo sucedía el silencio, por el rabillo del ojo se cercioró que Parker estaba relativamente tranquilo, más sosegado de lo habitual y no andaba jodiendo en demasía. Dadou pasó una mano por su cabello para acomodárselo a un lado y suspiró dejando sus labios entreabiertos ese día en un color natural.

- El tiempo que me de la gana – agregó en un tono agresivo pero a su vez tranquilo como si no estuviera hablando con él y prefiriera ver el color de las distintas lechuzas.

Tras otro largo período de silencio, Dadou se exasperó. Ya había enviado su lechuza a su amiga quería irse a hacer cosas mejores que coger el aroma de las lechuzas. Puso su cuerpo en pie, caminó hacia la puerta y miró directamente a los ojos de Parker con sus orbes en un intenso color azul - ¿Te quitas? – bufó algo exasperada, clavó los pies en el suelo, ladeó la cadera y cruzó los brazos – Ya, venga, muévete – Una pequeña patadita se escapó desde su pie hasta el del chico para instarlo a que hiciera algo más que parecer una gárgola de piedra ahí quieto con sus aires de grandeza - ¿O es que necesitas algo de mi? Qué sea rapidito, tengo mejores cosas que hacer que ver tu cara de troll.

por **Parker Luttrell** Vie Sep 21, 2012 5:51 am

¿Qué pasaba entre ellos? Nada fuera de lo común. Dadou era una estúpida, que andaba provocando peleas que solo podía resolver con la bajeza de patearle los huevos, y Parker detestaba en demasía a las pendejas que se creían tanto, que se pensaban que por mujer, por bonitas o por francesas merecían un trato especial de puro amor y simpatía… descontando por cierto, que el cliche de dos culos redondos y mellizos, no era decente dejarlo de pensar en ninguna circunstancia.

Para cuando la niña se decidió a acercársele, Parker estaba terminando su cigarro y no hizo falta que le contestara nada, más que mirarla de soslayo para que ella supiera que no se movería, y él que tarde o temprano se llevaría el doloroso regalo en la entre pierna…- esa pose de niñata a mi no me va a convencer… - se refería a toda aquella actuación de hacerse femme fatal o quien sabe que mierda, ladeando las caderas, el pelito para atrás, los brazos cruzados.

Tiró el cigarrillo y lo apagó con el pie que había sido atacado sin razón. Una carcajada llenó el recinto y la recorrió con mirada vulgar, de arriba hacia abajo para terminar en esos ojazos azules. – rapidito? Dime tu, cuanto tardas en dedicarme un orgasmo… ja – Sin ningún motivo la tomó con fuerza de la muñeca, sin acercarla a él ni nada – Hagamos una cosa, porque la verdad sea dicha, si puedes algo por mi, para compensar tus patas injustificadas a mis huevos… - mentira, estaba hablando estupideces solo por no darle el gusto de dejarla ir, miró su boca y luego su propia entrepierna. – chúpame la verga y te dejo ir… Aunque hubiera preferido que llevaras el labial rojo ese de puta.

por **Dadou Depaul** Vie Sep 21, 2012 10:57 am

No esperaba que fuera a convencerle de ningún modo que apartara su cuerpo asqueroso de sus ojos. Era un demente, estaba desquiciado y aún no entendía el motivo de tanta locura en chiquito cuerpo. Ladeó la sonrisa divertida cuando él, en ese papel de macho alfa de la manada, tiró el cigarro y apagó la colilla con el pie. Dadou no pudo evitar rodar los ojos y soltar una risita ácida, cada día el muchacho estaba peor. La mirada vulgar de Parker la devolvió a la realidad, enarcó una ceja e hizo una mueca de “¿Tu que miras?” – Tanto hablar y seguro que eres impotente – murmuró suave sin alterarse aún ni un ápice pero su respuesta no terminó de agradarle a su interlocutor que ni corto ni perezoso tomó su muñeca con fuerza, diablos, hasta dolía. Los ojos grandes y azules de Dadou destellaron en ira, los clavó en él sin hacer ninguna mueca de dolor pese a que probablemente tendría señales unas horas después - ¿La verga? – no pudo evitar reír otra vez con toda la ácidez retenida en su ser.

Inclinó su cuerpo hacia en frente para encararlo directamente – Te la va a chupar tu madre – se separó de él y tiró para liberarse del agarre pero no consiguió nada, gruñó algo exasperada y empleó la mano libre para pellizcarle el reverso, no quería aún recurrir a las cachetadas pues creía que eso solo alimentaba la maldita obsesión por castigarla con su estupidez – Ya, Parker, me estás haciendo daño. Suéltame – no suplicó no, ni exigió… ordenó con todo el tono imperante que había en el universo – No te pases conmigo o sabes como terminarán tus pelotas. ¿Te lo tengo que recordar?

por **Parker Luttrell** Vie Sep 21, 2012 6:15 pm

No pudo más que reírse a carcajada limpia con eso de la impotencia, pero no por eso olvidó que tan fuerte tenía que sostener a la chica por la muñeca, para que no se le olvidara ni por un instante con quien estaba hablando. Y a medida que avanzaba la situación confirmaba él cual de las dos mellizas era la que tenía en frente, pues aunque no supiera sus nombres, había una que le caía mucho peor que la otra, había una a la que tenía entre ceja y ceja, y era justamente la que tenía en frente.

Perfecto, pues hoy no veía con ánimo dejar pasar ninguna oportunidad, ya bastante con la noticia de tener un nuevo hermanito. – Mi madre está ocupada con otra pija, lamentablemente.- Se burlaba de Dadou, de el mismo, y de sus viejos que no parecían hacer otra cosa que garchar para contribuir a la población mundial. La miró con duda como si en verdad pudiera estar evaluando soltarla, pero solo terminó por apretar más fuerte, sintiendo como la poca carne de la muñeca parecía desmembrarse por clavarse al hueso.

- Lo se… - le estaba haciendo daño y a propósito, y no tenía porque ocultarlo- … no me da la gana soltarte…- sinceridad pura … La miró y se quedó un segundo callado antes de volver a tomar la palabra para que ella no dijera alguna idiotez que matara sus nervios - Ya no eres tan divertida, estás perdiendo el encanto, darling , o será el olor a cago de paloma que hay aquí… - puro palabrerío pues en realidad la cosa era que no quería ganarse una dolorosa pata en los huevos tan rápido, así que terminó por soltarla empujándola hacia atrás con ímpetu…

Dio un paso hacia ella, despegándose de la puerta y con sonrisa cómplice le confesó - creo que volveré a obsesionarme por tu hermana, se nota que está menos usada que tu... - Parker era un hijo de puta, pero con Dadou era mucho peor que hasta con el mismo Crawford, no sabía porque pero simplemente la odiaba con asco infinito.

por **Dadou Depaul** Sáb Sep 22, 2012 6:51 am

No pretendía ser el entretenimiento de Parker pues ni siquiera había buscado su fea cara por la universidad. Había ido hasta la lechucería para enviarle una carta a su amiga y comprobar el estado de Brigitte, no para encontrarse un individuo algo agresivo que no la dejara vivir en paz. Los labios de la joven francesa se apretaron mutuamente cuando el chico mencionó a Daphne en toda la conversación, sabía que su hermana no tenía tanta labia para defenderse como ella, tímida y huidiza, no podría hacer frente a tremendo desconsiderado como el que tenía en frente. El empujón la pilló por sorpresa, los tacones no ayudaron y terminó dándose un golpe algo fuerte contra una de las paredes de la lechucería, cerró los ojos y tardó un par de segundos en recuperar el aliento antes de mirar a Parker con ira.

- Solo inténtalo – espetó de repente llevando una mano hasta su espalda para frotarla con suavidad. Tomó unos segundos antes de moverse justo donde estaba el muchacho y lo encaró como la más altanera de todas las estudiantes de aquella universidad– Acércate a mi hermana a menos de un metro y no me va a temblar la mano para lanzarte un avada – y su mirada decía exactamente eso, bueno, quizás un avada era exagerar pero estaba bien dejarlo en claro… no era amenaza cualquiera que una estudiante de Artes Oscuras soltara eso.

Aguantó la mirada durante unos segundos y dolorida todo su cuerpo, intentó rodear a Parker sin mucho éxito pues el chico no ponía de su parte para dejarla ir. ¿Qué tenía ese día? Estaba más pesado de lo habitual y empezaba a temer que debería sacar la varita para librarse de él pero… mierda, no la llevaba encima, solo había salido de su habitación un segundo para ir a mandar una carta. Chasqueó la lengua y un cierto temor empezó a surgir en su interior aunque ella intentó disimularlo pegándose lo más cerca posible de la pared, lejos de Parker y su insistencia - ¿No tienes otras cosas que hacer?

por **Parker Luttrell** Sáb Sep 22, 2012 1:51 pm

No se rió al verla darse bastante feo contra el muro, pero tampoco hubo compasión en su rostro. A veces Parker tenía conciencia de que se le iba la pinza en ocasiones, y esta vez no fue diferente, solo que por dios sabe que cuestión, con Dadou no le interesaba tener misericordia alguna y se iba a aferrar a la idea del maltrato para no dejar espacio en su mente a pensar gilipolleces…

- Lo que pasa contigo es que estás celosa de tu hermana. – Parker dio un paso hacia ella, luego de escucharla pues no le intimidaba su actitud por más fiera que se pusiera. Ella podía patearlo hasta el cansancio y dejarlo estéril, pero él era un hombre y se creía capaz de romperle la cabeza sin mayor esfuerzo físico… En cuanto a las varitas…- Te tiemblas las patas de solo tenerme cerca… no creo que puedas con un avada, en tu puta vida. – Dio un paso más, sosteniéndole la mirada importándole mierda que estudiara artes oscuras….

Pues en realidad, siquiera sabía que era alumna de esas magias. Ni su nombre, ni su historia, a penas que era francesa y que tenía una melliza… De todos modos le había bastado lo que se veía a simple vista de ella, tanto en actitud como en presencia física, para aborrecerla de singular manera. Dejó de mirarla y negó con el rostro como toda respuesta, buscando a su vez esa muñeca maltratada.

La tomó con brusquedad de la mano, pero fue suavizando sus modos, no seductoramente, sino como si estuviera observando algún objeto extraño de gran valor, y no dijo más mientras se dedicaba a repasar con los dedos el ante brazo de la chica, girándolo de un lado a otro con parsimonia, a apenas alzando una ceja cuando detecto que la marca de sus impulsos ya se veía en la piel blanquísima de la chica.

- Confiesa… te molesta que ella levante más que tu, es eso, no?... es por eso que eres una pendeja puta que está metida siempre donde no la llaman...- ni afirmaba ni preguntaba, eran más bien teorías lanzadas al aire para picarla de apoco -… Asume que quieres toda la atención para ti y te hago el favor de follarte acá mismo… - Le alzó las cejas, acortando las distancias. No tenía especial intención de tirársela pero ese culo tampoco era para andar despreciándolo.

por **Dadou Depaul** Dom Sep 23, 2012 9:20 am

No, no estaba celosa de su hermana, no por él y menos por una estupidez inventada a raíz de la demencia de Parker. Maldita sea, no habían compartido más que alguna clase si llegaba y alguna palabra en alguna fiesta para que terminara tratándola peor que a trapo. Frunció el ceño cuando él volvió a tomar su mano y tiró hacia atrás para liberarse pero la diferencia de fuerza era notoria así que resignada, dejó que examinara su brazo como si fuera el de una nueva raza. Los ojos de Dadou seguían fijos en el rostro del chico, atentos a cualquier cambio extraño, no tenía todas claras y ni idea si en un acto loco iba a partirle el brazo.

- Te recuerdo que quien ha entrado aquí a espiarme, has sido tú – espetó casi sin abrir los labios y a regañadientes. Alzó la pierna para detener con la rodilla el avance del muchacho, dejándola justo donde sus nobles partes deberían ir y amenazando sin palabras que si daba un paso más podrían hacer tortilla con sus testículos. Una sonrisa cruzó los labios sonrosados de la smertios era ácida, pagada de si misma, altanera hasta las últimas consecuencias, agregó con ese tono amenazador que llevaba desde que se habían encontrado - ¿Favor? ¡Ja! No me hagas reír – empujó con su otra mano el torso de Parker - ¡Muévete! Necesito mi espacio vital para respirar – tiró la mano hacia atrás para liberarse, consiguió su cometido pero el impulso hizo que su codo se estrellara contra el muro. Ahogó un gemido de dolor, cerró los ojos y tomó una bocanada de aire, iba a salir peor que los supervivientes de la batalla de Hogwarts.

- Tienes la gracia en el trasero, deja que me vaya – ordenó otra vez e intentó apartarlo de delante de ella pero obviamente su altura no tenía nada que hacer con la suya y para más había dejado la dichosa varita en su habitación – Si tan desagradable te parezco, me dejarás ir. ¿Para qué me quieres retener? ¿No que me consideras una puta? Pues ya esta, me largo y te olvidas de mi presencia. Hazte a un lado – dio un manotazo a su brazo esta vez usando toda su fuerza, instando a que obedeciera sus ordenes.

por **Parker Luttrell** Miér Sep 26, 2012 1:58 pm

- que no he entrado a espiarte, descerebrada – le contestó sin miedo a interrumpirla, pues sus palabras no solo no eran ciertas sino que interrumpían su concentración. Que no veía Dadou que él estaba en otra cosa mirándole el brazo, regocijándose por dentro? Metiche, tonta y testaruda, de las peores combinaciones… No dio un paso más pues la rodilla de la chica era amenaza suficiente pero levantó la vista para mirarla con disgusto e intimidarla, solo recibiendo de ella una sonrisa infame que le nubló más aun el humor que traía…

Para colmo la muy idiota se golpeaba a si misma. Pero sería estúpida la desgraciada!! Negó con el rostro y por acto reflejo la tomó por la espalda alejándola del muro, atrayéndola a él como consecuencia pero no como objetivo.- tu eres torpe como polla de troll - Le sopló en la cara, metáfora para hacer volar los insultos y pedidos que salían de esa boquita carnosa que tenía frente y cuando por fin cerró la boca, tratando de bajar el nivel de violencia sin mucho éxito le dijo – Deja de golpearte, que para algo estoy yo acá, dame ese codo y cállate la puta boca.

Se alejó un paso, generando espacio para tomarla del brazo con brusquedad y girarlo o girarla hasta ver la humedad en la zona, presionó con el dedo y la mancha de sangre rosada sobre la prenda blanca no se tardó en aparecer sobre la articulación golpeada contra el muro de piedra. Cuando Parker decía que para golpearla ya estaba él, lo creía realmente, y por tal le había puesto de malas que la muy hueca estuviera tan torpe.

- a ver mierda… - sin soltarla sacó la varita del bolsillo trasero de su jean y blandiéndola en su cara le preguntó – Puedo? O vas a llorar?... – Vamos iba a curarla realmente, ni que ella fuera contorsionista para poder con su varita (que por cierto, donde estaría?) curarse un codo, eso era como pretender llegar con la propia lengua al culo de si mismo, imposible. – A ver si luego te ven salir de aquí y piensan que fui yo el que te hizo esta mierda… para eso mejor un ojo morado no crees?

por **Dadou Depaul** Miér Sep 26, 2012 2:39 pm

Tuvo que bajar la pierna cuando él la atrajo contra su cuerpo pero la ojiazul puso las manos sobre el torso del ogmios, separándose todo lo que permitía. Volvió a pegar los labios cuando Parker lanzó el insulto y cerró los ojos cuando sopló, teniendo verdaderas ganas de partirle esa boquita con sus propias manecitas pero se contuvo porque el osado tocó el codo maltrecho y la castaña no pudo reprimir el “auch”. Forcejó para quitar el brazo de entre sus manos, vamos, no esperaba amabilidad por su parte tras haberla tratado peor que un saco de boxeo – No me voy a callar una nada – espetó con más rabia a ser posible porque diablos, el maldito estaba tocando un punto débil que dolía como un crucio en pleno pecho (o eso suponía).

Miró con sana curiosidad cuando él empezó a escudriñar la sangre de su codo y levantó la ceja derecha no creyendo que fuera a hacer de curandero en medio de una lechucería tras todas las linduras lanzadas contra su persona. Reprimió la pregunta más tonta de todo el arsenal que tenía en mente: “¿Qué haces?”, solo se ganaría un bufido y alguna calumnia – Claro… no vaya a haber golpes que no son tuyos en mi cuerpo, por favor, ¡qué mala imagen! – rodó los ojos y dejó que curara su codo solo por… porque le dolía horrores. Una vez él usó el hechizo, ella retiró la mano y ni tuvo por mente ofrecerle un “gracias”, no, no, ni loca, ya había suficiente hecho él por su cuerpo para ahora encima darle gratitud por solo haber curado una raspadura hecha contra un muro.

Lanzó una mirada hacia su codo curado y lanzó un quejido lastimero cuando comprobó que la mancha de sangre no había desaparecido del blanco nuclear de la camisa, suspiró resignada y escondió las manos tras ella, otra vez, pegándose de nuevo hacia el muro – Ya, hiciste la buena obra del día y cumpliste con tus horas de caridad. ¿Contento? – si, volvió a atacarlo porque estaba enojada, todo lo que pasaba ahora era por su culpa, no hubiera terminado con el codo maltrecho y la camisa sucia si él, no se hubiera puesto tan acosador hasta el punto de darle algo de miedo – Parker, una pregunta, ¿tu no te diste contra una pared o algo de pequeño? ¿No ves que tus cambios de humor producen cierta confusión o qué? Ya, decídete de una vez…

por **Parker Luttrell** Miér Sep 26, 2012 3:28 pm

Exacto – afirmó con todo descaro para complacerla, mientras le arremangaba la blusa para poder ver aquello y finalmente ejecutar un hechizo que quitara toda lesión. Así era, como Dadou parecía decir en broma no creyéndoselo: si iba a tener una marca, sería hecha por su propia mano, accidente de ocasión por torpeza de miedos y tacones de mujer no contaban… Cumplido su cometido guardó la varita y se llevó la mano al mentón con mayor tranquilidad, como si el momento de horror fatal hubiera pasado y ya pudiera respirar tranquilo.

Bajó la vista y se hizo otro paso más para atrás, iniciando un giro que quedó a la mitad al escucharla. Negó con sonrisa de lado, apenas dirigiendo los ojos a verla contra la pared para volver al suelo mugroso. No, no estaba contento, nunca lo estaba, pero ese no era el puto problema de Dadou. Sacó la cajetilla de cigarrillos con una mano, se rascó la nuca con la otra, todo aquello estaba llegando demasiado lejos, lo sabía pero aun así no se arrepentía de nada…

- De acostarme con tanta zorra se me contagió la histeria bipolar… debe ser - le respondió ahogando una carcajada que se escuchó como ronquido nasal. Sacó un cigarro alejándose dos pasos más, andando más bien, ya Dadou podía irse a donde le viniera en gana. – Si. me he golpeado, feo… Y tu excusa? Para ser una hueca puta?... ser francesa? O hay algún trauma infantil donde el tío pervertido gustaba de jugar más con tu hermanita?...-

Evidentemente le interesaba saber quien era Dadou, no lo tenía muy claro, pero no estaba manteniendo esa conversación, aunque fuera puros insultos, si no le interesase la respuesta, o al menos escuchar su voz de parisina golosa en desgracia… No le ofreció un cigarro pues pensó que ya estaba hablando solo que Dadou se había largado o algo. En algún punto hubiera preferido que así sea, en otro no, evidentemente.

por **Dadou Depaul** Miér Sep 26, 2012 4:43 pm

Agradeció a los mil Magos la distancia con Parker ya que eso significaba una cosa, el asunto estaba mucho más calmado y hasta donde tenía ella entendido (después de tantos encontronazos) ahora podía respirar sin sufrir por su integridad física. Por fin, soltó el aire retenido y siguió con la mirada la dirección de Luttrell con recelo, desconfiada aún y manteniéndose bien pegada contra la pared – ¿Mi excusa para no andar derritiéndome con tu carisma innato? – soltó con sorna y enarcando una ceja, tomándose su tiempo para caminar de vuelta hacia el alfeizar de la ventana, respondió con toda la altanería – No te creas taaaan importante, no eres consecuencia de un trauma infantil ni nada así.

Una vez tuvo el trasero sobre la fría piedra volvió a girar su brazo para observar el alcance de la mancha roja y bufó otra vez, ni el mejor hechizo ayudaría a salvar la pobre tela de su terrible condena. Una suave brisa sacudió su cabello castaño, Dadou olfateo el aire y arrugó el ceño cuando detecto un suave aroma a nicotina, rodó los ojos, no sabía que tenían todos los hombres para sentirse con más testosterona con aquella mierda que solo producía a la larga problemas – No soporto tu actitud – alargó la mano donde en la muñeca ya se podían apreciar los claros signos del agarre y señaló con el dedo índice el cigarro que llevaba entre los labios.

Subió las dos piernas encima del alfeizar, giró con cuidado de no mostrar sus encantos a ese condenado y abrazó sus rodillas con las manos. Los ojos azules se perdieron por las vistas de los terrenos, parpadeó con cuidado y ladeó un poco la cabeza para mirar a Parker – Veamos, Parker, si soy una hueca puta como tu linda boca suelta a cada tanto, ¿por qué estás hablando conmigo? – peinó un mechón tras su oreja y tiró la cabeza hacia atrás, pegando la cabeza en la pared para volver a perderse en el verdor de Brigantia. ¿Cuál había sido su problema que hasta ese momento no había tenido un minuto donde apreciar el bonito paisaje por el cual la universidad la había enamorado? Muchos, demasiados…

por **Parker Luttrell** Lun Oct 01, 2012 2:40 pm

Una vez que ella se sentó, el escupió el humo para mirarla sin gracia alguna pensando en retomar la palabra, pero la creída niña le señalaba con el dedo y tuvo que morderse la boca de manera deforme para no saltar los pasos que los separaban, empujarla al vacío y complicar más su patética existencia. – Te lo diga o no, sigues siendo una hueca puta… Deberías agradecerme que te doy la oportunidad de que escuches la realidad… Si tanto asco te doy no es prudente que me muestres las bragas o te quedes aquí… -

No se le veía la ropa interior a la chica pero era cuestión de segundo que hiciera un mal moviendo sin quererlo o apropósito y terminara mostrando hasta la raya por andar vestida como chica de burdel. Dio un paso hacia ella y le puso una mano en la rodilla, en realidad sobre el brazo de ella que descansaba ahí. - … justo aquí, donde podría hacerte caer al precipicio…- Era ella la que se había sentado junto a la ventana, no él el que la había arrinconado a centímetros del vacío. Recorrió su brazo hasta los hombros, acercando su rostro a ella, tomándola finalmente del cuello, pero sin fuerzas excesivas y le sonrió en la cara para concluir – Pero no puedes evitarlo, no?... ni ser calienta pollas, ni no usar el cerebro de pajarito que te ha tocado en suerte…

Vamos, si hubiera sido un poco inteligente esa muchacha, daría la batalla como perdida, huyendo como su hermana hacía en vez de quedarse allí… Pero seguro se quedaba porque de tan guarra que era gustaba de poner a Parker duro como una piedra, dejando toda la extensión de sus piernas tersas a la vista, acomodándose el cabello con esa mirada que solo pocas sabían usar. Aunque el tipo le diera asco verdadero, cosa que Parker ni creía, lo lujuriosa de Dadou era más fuerte.

por **Dadou Depaul** Dom Oct 07, 2012 7:26 am

Si, el miedo era una reacción innata, más si estabas sentada en un alfeizar sin ventana propiamente dicha y con un loco sujetando su cuello. Dadou hubiera gustado siempre ser un poco más como Daphne, salir corriendo cuando olía el peligro pero había heredado alguna anomalía que obligaba a su trasero a permanecer cerca de las situaciones con riesgo.

- Igual que tu no puedes evitar ser imbécil

Murmuró acercando su rostro también a Parker con la voz un tanto baja y mirando directamente a los ojos de Parker sin importar si estaba amenazándola con lanzarla torre abajo. ¿Qué se pensaba ese tipo? ¡Era bipolar! Pasaba de ser alguien con quien podías hablar medianamente bien a ser un orangután. Más que usar las manos para apartar los rudos dedos de su fino cuello, Dadou las apoyó en el pecho del ogmios y empujó lejos de ella a Parker.

- Eres insoportable pero no me largo de aquí - añadió bajando las piernas y acomodando su ropa. Tras ponerse en pie caminó hacia otra de las esquinas, lejos de Parker - ¿Sabes por qué? Creerías que me has echado de aquí y no tengo ganas de alimentar un poco más tu ego. Si tanto te molesta mi presencia, ya sabes donde esta la salida – con el dedo índice señaló el umbral que conducía a las escaleras, apoyó su cuerpo en la pared y cruzó de brazos.

No iba a dar su brazo a torcer por mantener intacto su amor propio. Si daba el primer paso estaría aceptando que el muchacho era superior que ella en muchos aspectos y que su agresividad latente fue el motivo por el cual puso un pie fuera del correo lechucil. No iba a darle ese placer.

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Desde Brigantia con cariño....

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