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Una vez más
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Re: Una vez más
Angus no podía saber que estaba contribuyendo a la buena suerte y también a las malas manías de esa pareja en particular diciéndole a Aquila que se aguantara las ganas para ir al baño solo para ir a la licorería. Estuvo tentado a hacerle cosquillas y dejarla entrar a la casa para que fuera al baño cuando gritara que no podía más pero no quiso ser tan malvado y terminaba no siendo malvado ni con ella ni con Karim.
-Ya vamos sin que me hagas caras y te compro algo.-Le dijo empujándola por la espalda para que caminara y dejó las bolsas de la compra anterior en el piso con un encantamiento que las camuflaba y un hechizo de seguridad para que ningún muggle las viera. Se tomaba muchas molestias pero le gustaba hacer magia y además no quería volver a cargar las bolsas.
Se carcajeó muy de buenas cuando Aquila hacía esa referencia a los Simpson y la amó más en ese preciso instante descubriendo que era una mujer de referencias televisivas. Solo paró la risa porque casi se mata y se tuvo que agarrar de la pared para no romperse el cráneo y también rompérselo a ella cuando rodaran.
-“Pero nos vamos a matar en el trayecto y moriremos empapados en nuestra sangre” Qué mal…-En lugar de llevársela en la espalda, aprovechó un descanso para cargarla como a una novia durante lo que restaba de las escaleras siendo un ridículo como nunca antes se había visto, mientras en su apartamento mancillaban su suelo.
Al salir a la calle la bajó para que caminara porque ya no la podía cargar más.-Ya camina tú sola, tienes que hacerlo por mi, Pipo.-En un arranque de amor contrastante con su ridiculez, la tomó por la cintura y la pegó contra la pared para besarla acariciando su cintura y luego su cabello, ese que nada más él podía tocar. Después de incomodar a una señora anciana que iba pasando y que refunfuñó cosas, la tomó de la mano para ir a la licorería. -¿No era la anciana de nuestro departamento esa a la que siempre quieres escandalizar, no?.-Le preguntó mientras llegaban a la licorería y caminaba directamente hacía los refrigeradores donde estaban las cervezas.-Escoge tu gremlin.
-Ya vamos sin que me hagas caras y te compro algo.-Le dijo empujándola por la espalda para que caminara y dejó las bolsas de la compra anterior en el piso con un encantamiento que las camuflaba y un hechizo de seguridad para que ningún muggle las viera. Se tomaba muchas molestias pero le gustaba hacer magia y además no quería volver a cargar las bolsas.
Se carcajeó muy de buenas cuando Aquila hacía esa referencia a los Simpson y la amó más en ese preciso instante descubriendo que era una mujer de referencias televisivas. Solo paró la risa porque casi se mata y se tuvo que agarrar de la pared para no romperse el cráneo y también rompérselo a ella cuando rodaran.
-“Pero nos vamos a matar en el trayecto y moriremos empapados en nuestra sangre” Qué mal…-En lugar de llevársela en la espalda, aprovechó un descanso para cargarla como a una novia durante lo que restaba de las escaleras siendo un ridículo como nunca antes se había visto, mientras en su apartamento mancillaban su suelo.
Al salir a la calle la bajó para que caminara porque ya no la podía cargar más.-Ya camina tú sola, tienes que hacerlo por mi, Pipo.-En un arranque de amor contrastante con su ridiculez, la tomó por la cintura y la pegó contra la pared para besarla acariciando su cintura y luego su cabello, ese que nada más él podía tocar. Después de incomodar a una señora anciana que iba pasando y que refunfuñó cosas, la tomó de la mano para ir a la licorería. -¿No era la anciana de nuestro departamento esa a la que siempre quieres escandalizar, no?.-Le preguntó mientras llegaban a la licorería y caminaba directamente hacía los refrigeradores donde estaban las cervezas.-Escoge tu gremlin.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
No había nada como esa hambre compartida en la que sencillamente no podíamos dejar de buscar neustros labios, de revolvernos el cabello y seguir, seguir por que había una necesidad intensa en mi de buscarla, como si nos estuviéramos persiguiendo el uno al otro o algo así. Me encantaba mirarla a los ojos cuando me respondía, sobre todo cuando decía que me necesitaba dentro; lo hacía hasta el fondo, llegando hasta donde más lejos pudiera apoyando las manos la alfombra y cerrando los ojos en el justo momento en que sentía la calidez de su coño rodeándome. Le sonreí a medias al escucharla decir eso, al sentir que no había más verdad que esa, la miré con intensidad moviéndome lenta y profundamente.
-Pearl, no tienes idea...
Era raro no haber podido decir nada en ese momento, al menos para mi que podía hablar todo el tiempo, y sólo me había salido su nombre con una frase inconclusa un tanto extraña. ¿De qué no tenía idea? de lo absolutamente suyo que era también, y de la manera en que me había tomado el reconocerlo. Me acerqué a su rostro como para besarla pero no lo hice, mantuve los labios cerca de los suyos sin besarla y no podía dejar de mirarla.
Tenía un efecto distinto no sentirme ya tan culpable por hacer lo que hacíamos, me había cansado de sentir que lo que teníamos era inadecuado y aunque no había sido de la mejor manera, al fin librarse de ese estigma era un alivio, aunque no me hacía falsas ilusiones sobre las cosas que vendrían en adelante. La quería, eso nunca lo había ocultado, pero ahora menos que nunca. Empecé a moverme más rápido, con más energía y quizás lo estaba haciendo demasiado fuerte, incluso la tomé un poco por el cabello antes de besarla y seguir hundiéndome en su piel, con un ritmo cada vez más acelerado. Me incorporé y levanté su cadera como hubiera hecho antes, sintiendo un poderoso ardor en el brazo que me decía que follar tan duro me había ya dejado una legendaria quemadura de alfombra. Miré fugazmente la puerta y medio sonreí antes de echarme el cabello hacia atrás, que estaba incontrolable.
-Quiero ver cómo te corres, preciosa, anda... termina para mi La penetré con más fuerza, mirando su piel bajo la mía, llevando una de mis manos a la humedad de entre sus piernas, buscando tocarla en el punto exacto para que pudiera terminar, para sentir cómo su cuerpo temblaba bajo el mío. Con suerte, ocurriría antes de una potencial interrupción, aunque gracias a dios yo no tenía nada de eso en mente, por que me hubiera desconcentrado de la peor manera.
-Pearl, no tienes idea...
Era raro no haber podido decir nada en ese momento, al menos para mi que podía hablar todo el tiempo, y sólo me había salido su nombre con una frase inconclusa un tanto extraña. ¿De qué no tenía idea? de lo absolutamente suyo que era también, y de la manera en que me había tomado el reconocerlo. Me acerqué a su rostro como para besarla pero no lo hice, mantuve los labios cerca de los suyos sin besarla y no podía dejar de mirarla.
Tenía un efecto distinto no sentirme ya tan culpable por hacer lo que hacíamos, me había cansado de sentir que lo que teníamos era inadecuado y aunque no había sido de la mejor manera, al fin librarse de ese estigma era un alivio, aunque no me hacía falsas ilusiones sobre las cosas que vendrían en adelante. La quería, eso nunca lo había ocultado, pero ahora menos que nunca. Empecé a moverme más rápido, con más energía y quizás lo estaba haciendo demasiado fuerte, incluso la tomé un poco por el cabello antes de besarla y seguir hundiéndome en su piel, con un ritmo cada vez más acelerado. Me incorporé y levanté su cadera como hubiera hecho antes, sintiendo un poderoso ardor en el brazo que me decía que follar tan duro me había ya dejado una legendaria quemadura de alfombra. Miré fugazmente la puerta y medio sonreí antes de echarme el cabello hacia atrás, que estaba incontrolable.
-Quiero ver cómo te corres, preciosa, anda... termina para mi La penetré con más fuerza, mirando su piel bajo la mía, llevando una de mis manos a la humedad de entre sus piernas, buscando tocarla en el punto exacto para que pudiera terminar, para sentir cómo su cuerpo temblaba bajo el mío. Con suerte, ocurriría antes de una potencial interrupción, aunque gracias a dios yo no tenía nada de eso en mente, por que me hubiera desconcentrado de la peor manera.
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Soltó una carcajada cuando le seguía el chiste del qué bien, qué mal que había visto en un capítulo de los Simpson, por cierto quedándose también con cara de idiota cuando mencionaban el benzoato de potasio por que no tenía la menor idea de lo que eso era. Lo besó cuando la cargaba de esa manera tan cursi, por que a ella le encantaba la cursilería y también se había sorprendido cuando Angus respondía bien a eso, a todos sus cariños ridículos y sus atenciones excesivas. No podía estar más segura de que lo amaba como en momentos así de cotidianos y tontos. Y dentro del apartamento, lo impensable.
Bueno, si era honesta, no tan impensable. Esas tardes que Pearl y Malik pasaban ahí hablando de sus películas extrañas y sus cosas de gente intelectual le parecían demasiado íntimas, y ella, por ejemplo, nunca había sido capaz de tener un amigo así de cercano del que no terminara enamorándose o más bien al contrario, las relaciones que tenía con hombres siempre eran de atracción, se le daba mal tener amigos masculinos y sólo encontraba esas confianzas en otras chicas. Por cierto, su incipiente círculo de amistades brigantes se vería necesariamente afectado, y no sabía aún cómo reaccionaría a todo eso.
-Está bien, lo haré por ti Magginer
Se volvió a reír y no pudo evitar mirar de reojo a la señora que farfullaba con sus muestras de cariño, así como hubiera pasado si estuvieran en Hogsmeade o algo así. Se encogió de hombros, había ancianas agrias en todos lados, se le olvidaban los rostros, aunque se tenía bien aprendido el de la del primer piso, y llevaba unas gafas que esa no. Ir a la tienda era un trayecto muy corto, aunque quizás era tan corto sólo por ser rutinario. Miró las latas en el refrigerador y sacó un par de kopparberg de elder berry, la edición que todavía les quedaba del verano. Angus nunca le llevaba la sidra adecuada.
-Mira, esta es la que me gusta. Esta, KO-PPAR-BERG, siempre me llevas Strongbow y esa sabe a orina de gato.
Le dio un beso en los labios antes de poner las cosas sobre el mostrador, curioseando en las chucherías que había cerca de la caja, y la cajera por cierto apenas si levantaba la vista embobada como estaba en su celular. Agarró un chocolate de cookies and cream y se lo mostró a Angus como diciendo que al menos le comprara eso ya que la había hecho bajar a la licorería estando en la puerta de casa. No sabía que, de hecho, estaría agradeciendo no haber abierto la puerta.
Bueno, si era honesta, no tan impensable. Esas tardes que Pearl y Malik pasaban ahí hablando de sus películas extrañas y sus cosas de gente intelectual le parecían demasiado íntimas, y ella, por ejemplo, nunca había sido capaz de tener un amigo así de cercano del que no terminara enamorándose o más bien al contrario, las relaciones que tenía con hombres siempre eran de atracción, se le daba mal tener amigos masculinos y sólo encontraba esas confianzas en otras chicas. Por cierto, su incipiente círculo de amistades brigantes se vería necesariamente afectado, y no sabía aún cómo reaccionaría a todo eso.
-Está bien, lo haré por ti Magginer
Se volvió a reír y no pudo evitar mirar de reojo a la señora que farfullaba con sus muestras de cariño, así como hubiera pasado si estuvieran en Hogsmeade o algo así. Se encogió de hombros, había ancianas agrias en todos lados, se le olvidaban los rostros, aunque se tenía bien aprendido el de la del primer piso, y llevaba unas gafas que esa no. Ir a la tienda era un trayecto muy corto, aunque quizás era tan corto sólo por ser rutinario. Miró las latas en el refrigerador y sacó un par de kopparberg de elder berry, la edición que todavía les quedaba del verano. Angus nunca le llevaba la sidra adecuada.
-Mira, esta es la que me gusta. Esta, KO-PPAR-BERG, siempre me llevas Strongbow y esa sabe a orina de gato.
Le dio un beso en los labios antes de poner las cosas sobre el mostrador, curioseando en las chucherías que había cerca de la caja, y la cajera por cierto apenas si levantaba la vista embobada como estaba en su celular. Agarró un chocolate de cookies and cream y se lo mostró a Angus como diciendo que al menos le comprara eso ya que la había hecho bajar a la licorería estando en la puerta de casa. No sabía que, de hecho, estaría agradeciendo no haber abierto la puerta.
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
No había terminado su frase pero de todos modos le sonrió al escuchar la idea incompleta, como si fuera capaz de terminarla en algún punto. Le gustaba tener su rostro tan cerca, poder acariciar la línea de su nariz que para ella era perfecta mientras su cadera lo buscaba, intentando sentirlo más profundo aunque en realidad ya era imposible llegar más lejos. No podía cansarse de su rostro, de la forma en que miraba, de su sonrisa extraña, que a veces parecía mostrar solo a medias. Tampoco podía cansarse de sus movimientos, primero lentos, solamente dándole un poco de lo que seguiría después.
No quería pensar en cómo serían las cosas entre ellos ni con el resto de la gente en ese momento, ni en las reacciones o incluso la manera en que ellos mismos se manejarían. No podía darle vueltas a ese preciso asunto mientras estaba bajo él, con el peso de su cuerpo sobre ella, lo profundo que se sentía y como cada movimiento la hacía arquear la espalda, gemir más. Ella misma aumentaba el ritmo de sus caderas olvidando la fricción de la alfombra bajo ella, que raspaba su espalda, parte de sus piernas.
Lo sentía tan fuerte dentro de ella que por momentos fruncía el ceño, le provocaba enterrar las uñas en su piel, apretar los dientes. Pero no quería detenerlo, no lo necesitaba más suave, ni más delicado. Lo quería tal y como era, deseándola con las mismas ansias con las que ella lo deseaba a él, porque eso era justo lo que la hacía sentir cuando la follaba de ese modo.
Su respiración se agitó más cuando la tocaba, sus movimientos también se hicieron más exigentes casi por instinto. No había dejado de mirarlo ni un segundo, porque no quería perderse nada. Claro que la sensación de hacerlo sabiéndose suya era distinta, y todos los incentivos se transformaban, todo lo que había entre ellos parecía tomar nuevos significados. Y eso estaba más que bien, porque lo seguía descubriendo, y no le gustaba menos, parecía ser al contrario, como si ahora casi diera por hecho que fuera a ser todavía más difícil saciarse y por ende, dejar de buscarlo.
Se aferró a sus brazos y buscó besarlo cuando sentía que se acercaba, separándose de su boca solamente al momento de sentir que estaba ahí, que le cumplía el capricho de correrse para él y por él, aunque en realidad ese instante fuera algo muy suyo.
No quería pensar en cómo serían las cosas entre ellos ni con el resto de la gente en ese momento, ni en las reacciones o incluso la manera en que ellos mismos se manejarían. No podía darle vueltas a ese preciso asunto mientras estaba bajo él, con el peso de su cuerpo sobre ella, lo profundo que se sentía y como cada movimiento la hacía arquear la espalda, gemir más. Ella misma aumentaba el ritmo de sus caderas olvidando la fricción de la alfombra bajo ella, que raspaba su espalda, parte de sus piernas.
Lo sentía tan fuerte dentro de ella que por momentos fruncía el ceño, le provocaba enterrar las uñas en su piel, apretar los dientes. Pero no quería detenerlo, no lo necesitaba más suave, ni más delicado. Lo quería tal y como era, deseándola con las mismas ansias con las que ella lo deseaba a él, porque eso era justo lo que la hacía sentir cuando la follaba de ese modo.
Su respiración se agitó más cuando la tocaba, sus movimientos también se hicieron más exigentes casi por instinto. No había dejado de mirarlo ni un segundo, porque no quería perderse nada. Claro que la sensación de hacerlo sabiéndose suya era distinta, y todos los incentivos se transformaban, todo lo que había entre ellos parecía tomar nuevos significados. Y eso estaba más que bien, porque lo seguía descubriendo, y no le gustaba menos, parecía ser al contrario, como si ahora casi diera por hecho que fuera a ser todavía más difícil saciarse y por ende, dejar de buscarlo.
Se aferró a sus brazos y buscó besarlo cuando sentía que se acercaba, separándose de su boca solamente al momento de sentir que estaba ahí, que le cumplía el capricho de correrse para él y por él, aunque en realidad ese instante fuera algo muy suyo.
Pearlie F. Burroughs- Mensajes : 638
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Re: Una vez más
Aquila se anotó otro tanto en la escala de afectos de Angus al darle a la referencia de Pipo. Y con eso se ganó otro beso. Él no había sido así antes con sus otras novias. Si había sido atento, protector y todo eso, pero nunca había hecho tantas ridiculeces seguidas por una sola mujer, como lo hacía con Aquila. Es solo era porque ella lo inspiraba a hacerlo, y no se sentía incómodo cargándola en las escaleras, ni dejando que le diera de comer en la boca, aunque todo mundo se incomodara de tanto derramamiento de miel a propósito. No le importaba, lo que al licántropo le importaba era hacerla feliz a ella y ya, por más que Peaches insistiera en que era encantamiento de semiveela y que ya se le pasaría. Él sabía que lo que tenían no tenía nada que ver con un encantamiento de semiveela, había visto ya muchas por la universidad y desde los 22 habían dejado de afectarle.
Del tema de Pearlie y Malik, tampoco sabía como iría a reaccionar, pero era mucho más sano no haberlos encontrado como los hubiera encontrado de haber abierto la puerta en el preciso instante en el que iba a hacerlo. Y todo para qué, porque en el maldito refrigerador no había más que kronenbourg y esa no le gustaba, pero era lo que había así que fue de lo que tomó, también solo un par, tenía todavía whisky en casa.
-Perdóneme su majestad, no le vuelvo a comprar Strongbow.-Se abstuvo de hacerle la típica pregunta de que cómo sabía que la orina de gato tenía sabor similar a esa sidra pero aunque no la hizo en voz alta, si hizo un gestito con las cejas como para burlarse por eso.-Sí el chocolate también va, princesa-Le hubiera comprado cualquier cosa que pidiera, no solo por el sacrificio de hacerla bajar de nuevo aunque le anduviera del baño, sino porque así era de débil. Tuvo que carraspear para que la cajera levantara la vista hacia ellos y les cobrara por fin, poniendo todo en bolsas dobles para que no se fueran a romper.
-Pero te lo comes inmediatamente, no quiero que llegue Karim y de plano crea que ya ni me esfuerzo en esconder mis más preciados tesoros, y te lo va a quitar. Es más ya cómetelo y dame.-Hizo como que le gruñía como perro restregándole la barba en el cuello. No estaba seguro de si Karim iría esa tarde o no, si quiera. No se acordaba si le había dicho que se pasaría. Menos mal estar todavía ignorante de todas esas cuestiones que sí lo iban a descolocar. Ya estaban de nuevo en las escaleras del edificio.-¡No! Se me olvidaron mis pringles.-No se le había olvidado nada, pero quería que Aquila hiciera un berrinche.
Del tema de Pearlie y Malik, tampoco sabía como iría a reaccionar, pero era mucho más sano no haberlos encontrado como los hubiera encontrado de haber abierto la puerta en el preciso instante en el que iba a hacerlo. Y todo para qué, porque en el maldito refrigerador no había más que kronenbourg y esa no le gustaba, pero era lo que había así que fue de lo que tomó, también solo un par, tenía todavía whisky en casa.
-Perdóneme su majestad, no le vuelvo a comprar Strongbow.-Se abstuvo de hacerle la típica pregunta de que cómo sabía que la orina de gato tenía sabor similar a esa sidra pero aunque no la hizo en voz alta, si hizo un gestito con las cejas como para burlarse por eso.-Sí el chocolate también va, princesa-Le hubiera comprado cualquier cosa que pidiera, no solo por el sacrificio de hacerla bajar de nuevo aunque le anduviera del baño, sino porque así era de débil. Tuvo que carraspear para que la cajera levantara la vista hacia ellos y les cobrara por fin, poniendo todo en bolsas dobles para que no se fueran a romper.
-Pero te lo comes inmediatamente, no quiero que llegue Karim y de plano crea que ya ni me esfuerzo en esconder mis más preciados tesoros, y te lo va a quitar. Es más ya cómetelo y dame.-Hizo como que le gruñía como perro restregándole la barba en el cuello. No estaba seguro de si Karim iría esa tarde o no, si quiera. No se acordaba si le había dicho que se pasaría. Menos mal estar todavía ignorante de todas esas cuestiones que sí lo iban a descolocar. Ya estaban de nuevo en las escaleras del edificio.-¡No! Se me olvidaron mis pringles.-No se le había olvidado nada, pero quería que Aquila hiciera un berrinche.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
Seguía a detalle sus expresiones sin cansarme de ver todo lo que le provocaba, de buscar sus labios y confundir mis gemidos con los suyos, sentir la piel de su vientre y su humedad en mis dedos, el movimiento constante de su cuerpo con cada incursión dentro de ella, que me llevaba más y más cerca de correrme así como ella lo hacía después de besarme, sujetando mis brazos con fuerza. Sabía cómo se corría, empezaba a conocerlo, y eso no hacía que fuera algo a lo que me acostumbraría, o dejaría de cautivarme de esa manera. Sonreí, sintiéndome cerca también, cerrando los ojos con fuerza antes de volver a abrirlos y querer mirarla cuando yo lo hacía, aunque no me resultara del todo fácil y todo se quedara en un intento.
Hice un par de movimientos finales llegando hasta el fondo de su cuerpo, abrazándola contra y apoyándome de nuevo en el piso sin distraerme por el leve ardor de la quemadura de alfombra que me acababa de hacer. Me rendí encima suyo por un par de segundos antes de quitarme de encima para que no sintiera un peso muerto sobre su cuerpo y me quedé de costado a su lado, recargándome en su hombro. Me hubiera gustado estar al menos una hora acostado a su lado dormitando como felino, pero sabía que no podíamos estar ahí semidesnudos en medio de la estancia justo después de follar, con la amenaza de Finnerty pudiendo entrar en cualquier momento.
Después de algunos minutos acaricié su vientre casi de manera mecánica, rodeando su ombligo con el dedo índice, de verdad deseando bloquear la puerta para que nadie pudiera entrar y seguir horas así, desnudarla completa y volver a follar cuando nos diera la gana, cuantas veces quisiéramos. Le di un agotado beso en la mejilla y empecé a acomodar toda su ropa como si ella no pudiera hacerlo sola, acomodando su sostén no sin antes besar una vez más esas tetas que, lamentablemente, iban a quedar fuera de mi alcance. Abotoné su blusa con calma y hasta me incorporé para buscar sus bragas y ponérselas, aunque las dejé a la mitad de sus muslos para recomponerme yo, rápido y sin pizca de la atención que había puesto en vestirla.
-Mira esto, me quemé el brazo con la maldita alfombra... pero eso estuvo muy bien, me encanta follarte, preciosa.
Después de procurar que las evidencias de que habíamos follado desaparecieran, me desperecé sintiendo una pesada somnolencia que me hizo dejarme caer en el sillón y hacerle una seña para que viniera a mi lado. Para Finnerty quizás sería igual de raro (pero menos escandaloso, claro) encontrarnos ahí medio abrazados en el sillón cambiándole al televisor, pero podía arriesgarme a sus miradas a cambio de sentirla a mi lado, aunque fuera así, haciendo nada.
Hice un par de movimientos finales llegando hasta el fondo de su cuerpo, abrazándola contra y apoyándome de nuevo en el piso sin distraerme por el leve ardor de la quemadura de alfombra que me acababa de hacer. Me rendí encima suyo por un par de segundos antes de quitarme de encima para que no sintiera un peso muerto sobre su cuerpo y me quedé de costado a su lado, recargándome en su hombro. Me hubiera gustado estar al menos una hora acostado a su lado dormitando como felino, pero sabía que no podíamos estar ahí semidesnudos en medio de la estancia justo después de follar, con la amenaza de Finnerty pudiendo entrar en cualquier momento.
Después de algunos minutos acaricié su vientre casi de manera mecánica, rodeando su ombligo con el dedo índice, de verdad deseando bloquear la puerta para que nadie pudiera entrar y seguir horas así, desnudarla completa y volver a follar cuando nos diera la gana, cuantas veces quisiéramos. Le di un agotado beso en la mejilla y empecé a acomodar toda su ropa como si ella no pudiera hacerlo sola, acomodando su sostén no sin antes besar una vez más esas tetas que, lamentablemente, iban a quedar fuera de mi alcance. Abotoné su blusa con calma y hasta me incorporé para buscar sus bragas y ponérselas, aunque las dejé a la mitad de sus muslos para recomponerme yo, rápido y sin pizca de la atención que había puesto en vestirla.
-Mira esto, me quemé el brazo con la maldita alfombra... pero eso estuvo muy bien, me encanta follarte, preciosa.
Después de procurar que las evidencias de que habíamos follado desaparecieran, me desperecé sintiendo una pesada somnolencia que me hizo dejarme caer en el sillón y hacerle una seña para que viniera a mi lado. Para Finnerty quizás sería igual de raro (pero menos escandaloso, claro) encontrarnos ahí medio abrazados en el sillón cambiándole al televisor, pero podía arriesgarme a sus miradas a cambio de sentirla a mi lado, aunque fuera así, haciendo nada.
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Lo remedó como niña chiquita diciendo algo como ñañaña cuando decía que no volvería a comprarle Strongbow y que el chocolate también iba. Miró como pagaba, dio las gracias a la chica que apenas levantó la vista después de volver a su celular y Aquila tomó la bolsa, sumada a las que ya traían. Negó con la cabeza sonriendo cuando Angus puntualizaba eso de esconder las chucherías, juego que nunca tenía fin, pues entre la ropa sucia había encontrado una lata de almendras saladas que por cierto, se había comido, y después se había enterado que eran de Karim, cosa que le dio absolutamente igual. Según sabía, ahí sólo aplicaba la ley de la jungla.
-Mejor me lo guardo en el escote, Karim jamás se atrevería a ir ahí en tu presencia. Bueno, ni en tu ausencia
Se le lanzó cuando iban caminando por la calle, besándolo contra una pared antes de que siguieran con su travesía de regreso, y esta vez no era chiste que quería ir al baño. Bueno, antes no había sido pero ahora no se sentía capaz de aguantar a ver qué otra ocurrencia tenía Angus cuando estuviera a punto de meter la llave en el cerrojo. Le hubiera puesto una mala cara como la que había puesto cuando decía que se le habían olvidado sus pringles luego de decirle que ni se atreviera a querer regresar.
Iba subiendo las bolsas de manera tradicional, no poniéndolas a levitar tras ellos como antes, sólo para apresurar a Angus por que además quería entrar a casa, cambiarse de ropa y ponerse a mirar televisión o alguna cosa de esas que hacían ahí, tan cotidianas y comunes para cualquiera, pero eran sus momentos favoritos de la semana, estuviera ahí Karim o no. Era extraño pero cuando estaban en casa el tipo hasta le agradaba y podía decir que le tenía cierta confianza, aunque ya hubieran empezado a sonar algunos rumorcillos por Brigantia de los que claro que estaba enterada, los de Periodismo eran bastante chismosos. Le sacó a Angus las llaves de bolsillo del pantalón y empezó a abrir la puerta.
-¿Qué vamos a ver hoy? Me prometiste una que de verdad me asuste ¿Sabes que creo? Que las películas de terror van perdiendo efecto, no me he vuelto a asustar como las primeras veces...
Hablaba, lo miraba, abría la puerta ruidosamente en un aire casual, el de no esperar encontrarse ahí con nadie, de hecho, en su campo visual todavía no entraban ni Pearlie ni Karim.
-Mejor me lo guardo en el escote, Karim jamás se atrevería a ir ahí en tu presencia. Bueno, ni en tu ausencia
Se le lanzó cuando iban caminando por la calle, besándolo contra una pared antes de que siguieran con su travesía de regreso, y esta vez no era chiste que quería ir al baño. Bueno, antes no había sido pero ahora no se sentía capaz de aguantar a ver qué otra ocurrencia tenía Angus cuando estuviera a punto de meter la llave en el cerrojo. Le hubiera puesto una mala cara como la que había puesto cuando decía que se le habían olvidado sus pringles luego de decirle que ni se atreviera a querer regresar.
Iba subiendo las bolsas de manera tradicional, no poniéndolas a levitar tras ellos como antes, sólo para apresurar a Angus por que además quería entrar a casa, cambiarse de ropa y ponerse a mirar televisión o alguna cosa de esas que hacían ahí, tan cotidianas y comunes para cualquiera, pero eran sus momentos favoritos de la semana, estuviera ahí Karim o no. Era extraño pero cuando estaban en casa el tipo hasta le agradaba y podía decir que le tenía cierta confianza, aunque ya hubieran empezado a sonar algunos rumorcillos por Brigantia de los que claro que estaba enterada, los de Periodismo eran bastante chismosos. Le sacó a Angus las llaves de bolsillo del pantalón y empezó a abrir la puerta.
-¿Qué vamos a ver hoy? Me prometiste una que de verdad me asuste ¿Sabes que creo? Que las películas de terror van perdiendo efecto, no me he vuelto a asustar como las primeras veces...
Hablaba, lo miraba, abría la puerta ruidosamente en un aire casual, el de no esperar encontrarse ahí con nadie, de hecho, en su campo visual todavía no entraban ni Pearlie ni Karim.
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Le gustaba sentirlo correrse, pero ya se había dado cuenta que lo que más le gustaba de ese momento en particular era ver su expresión al hacerlo, le daban ganas de besarlo casi inmediatamente después. Acarició su cuello los escasos momentos en que lo siguió teniendo encima y luego se apresuró a rodearlo con un brazo cuando se quedó a un costado suyo. También tenía ganas de quedarse así mucho rato, y en realidad hasta el momento no habían tenido momentos de paz y tranquilidad luego de follar, porque en ningún lado había sido cosa de ponerse a retozar perezosamente cuando se necesitaba velocidad, discreción y todo eso. Y ahora el tema era que en ese departamento todavía estaba el factor FinnertyAquila latente.
De todos modos cerró los ojos mientras la acariciaba y se dejó vestir con toda la calma del mundo con la confianza de que si Malik tuviera mucha prisa, la hubiera dejado vestirse sola. Lo miró mientras acomodaba su sostén y abotonaba su blusa, pero se dejó hacer como una muñeca, o como una princesa caprichosa del siglo XVIII a la que vestían, soltando suspiros entrecortados cuando la besaba antes de dejar la parte superior de su ropa en orden. Sonrió a medias y enredaba los dedos en su cabello de vez en cuando hasta que se levantó para acomodarse las bragas y antes de ir a su lado entró al diminuto baño para acomodarse el cabello sin la varita, para no quedar absurdamente despeinada, cosa que había sucedido en el frenesí.
-Pobrecito.
Le dijo sobre la quemadura de alfombra, dándole un beso cerca de la zona afectada, otro en el cuello y luego en los labios antes de acurrucársele como mascota buscando afecto. Sabía que lo amaba, muchísimo y que aunque hubiera sido un camino atropellado, lo importante era el resultado final. O medio final, todavía tenían cosas que arreglar y tal, pero en lo que a ella respectaba, las cosas que importaban, o sea entre ellos dos, ya estaban claras. Le pasó un brazo por encima y recogió los pies ahora descalzos sobre el sillón, sabiendo que aunque había pasado bastante tiempo ahí, no había tenido nunca una sensación tan íntima como en ese momento, en el que solo tenía ganas de abrazarlo y ver cualquier cosa en la tele.
-Aaaah, programa de cocina, déjale ahí.
El primer recuerdo que se le vino a la cabeza que tenía que ver con cocina muggle fue cuando Aquila, Milena y ella habían intentado cocinar en ese departamento. Solo de pensarlo se sintió ligeramente incómoda y lo abrazó más, escondiendo un poco el rostro en su cuello un rato como si quisiera convencerse con eso de que estaba bien, o que lo estaría eventualmente y sino, que lo que tenían valía la pena como para mandar al diablo todo eso que habían estado cultivando con el exterior antes. Volvió el rostro a la tele incorporándose solo un poco pero recargándose en él y acariciándole el vientre debajo de la camiseta, hasta que escuchó la puerta abrirse. Apenas se giró un poco cuando escuchó la voz de Aquila, sacó la mano de debajo de la ropa de Malik y se incorporó un poco más aunque no había dejado completamente la posición de comodidad extrema recién adquirida. Buscó rápido la mirada de él, como si esperara que en cualquier momento la hiciera a un lado o algo así. Sabía que tanta cercanía no era precisamente normal para un par de amigos que solo sostenían ese título ante el mundo.
-Hola.
Fue el escueto saludo con una sonrisilla y un movimiento de la mano casi tímido, se sentía muy tonta y también, por cierto, sentía que era capaz de bostezar en cualquier momento por estar soñolienta y exhausta. Y bueno, algo de simpático tenía pensar que acababa de follarse a Malik en la alfombra y que el timing había sido preciso.
De todos modos cerró los ojos mientras la acariciaba y se dejó vestir con toda la calma del mundo con la confianza de que si Malik tuviera mucha prisa, la hubiera dejado vestirse sola. Lo miró mientras acomodaba su sostén y abotonaba su blusa, pero se dejó hacer como una muñeca, o como una princesa caprichosa del siglo XVIII a la que vestían, soltando suspiros entrecortados cuando la besaba antes de dejar la parte superior de su ropa en orden. Sonrió a medias y enredaba los dedos en su cabello de vez en cuando hasta que se levantó para acomodarse las bragas y antes de ir a su lado entró al diminuto baño para acomodarse el cabello sin la varita, para no quedar absurdamente despeinada, cosa que había sucedido en el frenesí.
-Pobrecito.
Le dijo sobre la quemadura de alfombra, dándole un beso cerca de la zona afectada, otro en el cuello y luego en los labios antes de acurrucársele como mascota buscando afecto. Sabía que lo amaba, muchísimo y que aunque hubiera sido un camino atropellado, lo importante era el resultado final. O medio final, todavía tenían cosas que arreglar y tal, pero en lo que a ella respectaba, las cosas que importaban, o sea entre ellos dos, ya estaban claras. Le pasó un brazo por encima y recogió los pies ahora descalzos sobre el sillón, sabiendo que aunque había pasado bastante tiempo ahí, no había tenido nunca una sensación tan íntima como en ese momento, en el que solo tenía ganas de abrazarlo y ver cualquier cosa en la tele.
-Aaaah, programa de cocina, déjale ahí.
El primer recuerdo que se le vino a la cabeza que tenía que ver con cocina muggle fue cuando Aquila, Milena y ella habían intentado cocinar en ese departamento. Solo de pensarlo se sintió ligeramente incómoda y lo abrazó más, escondiendo un poco el rostro en su cuello un rato como si quisiera convencerse con eso de que estaba bien, o que lo estaría eventualmente y sino, que lo que tenían valía la pena como para mandar al diablo todo eso que habían estado cultivando con el exterior antes. Volvió el rostro a la tele incorporándose solo un poco pero recargándose en él y acariciándole el vientre debajo de la camiseta, hasta que escuchó la puerta abrirse. Apenas se giró un poco cuando escuchó la voz de Aquila, sacó la mano de debajo de la ropa de Malik y se incorporó un poco más aunque no había dejado completamente la posición de comodidad extrema recién adquirida. Buscó rápido la mirada de él, como si esperara que en cualquier momento la hiciera a un lado o algo así. Sabía que tanta cercanía no era precisamente normal para un par de amigos que solo sostenían ese título ante el mundo.
-Hola.
Fue el escueto saludo con una sonrisilla y un movimiento de la mano casi tímido, se sentía muy tonta y también, por cierto, sentía que era capaz de bostezar en cualquier momento por estar soñolienta y exhausta. Y bueno, algo de simpático tenía pensar que acababa de follarse a Malik en la alfombra y que el timing había sido preciso.
Pearlie F. Burroughs- Mensajes : 638
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Re: Una vez más
Seguí su camino con los ojos cuando iba al baño a recomponerse y salía con el cabello acomodado y tan linda como cuando había llegado ahí, aunque prefería verla medio desnuda y con el cabello revuelto sabiendo que yo estaba involucrado en eso. Sonreí con su cariño a la quemadura del brazo y también la besé, acomodándola a mi lado y pensando que también para mi era una certeza quererla demasiado y a final de cuentas nuestra idea de no hacer más lío e intentar disimular había terminado siendo más lío, aunque en momentos como ese me daba igual y sólo me sentía tranquilo y confiado a su lado ¿Qué podía ir mal si estábamos así?
La acariciaba mientras pasaba los canales y me pedía que le dejara a uno de cocina, donde Nigella Lawson enseñaba a hacer mince pies, el clásico inglés para navidad. Por cierto, yo jamás la había celebrado a toda regla, por que ser tan liberal de comuna neo-hippie me excentaba de esas tradiciones. De niño me había sentido terriblemente mal de no decorar un árbol, intercambiar regalos y hacer cosas así, pero al final me había acostumbrado a tener no-navidades, como si un judío viniera a hablarme del Hanukkah o algo así, me era neutralmente ajeno. Eso sí, estaba seguro de que Pearl festejaba una navidad a todo lo grande con regalos, árboles, escarchas, galletas de gengibre y mince pies.
-¿Tus navidades son como programa de Nigella Lawson en el mundo mágico? Seguro que sí...
Besé su cabello y me acomodé un poco para seguir cerca de ella antes de que sintiera la evidente tensión que sólo provocaba el hecho de escuchar abrirse la puerta y también la voz de Aquila hablando de quién sabe qué cosas con el lobo. Por supuesto que no iba a aventarla a un lado y a ponerme a silbar para disimular o algo así, lo único es que mis ojos fueron a la bolsa donde seguían unas cervezas y preservativos sin abrir, lo que sería demasiado evidente para cualquiera y le diría al mundo "Mis planes para hoy son beber y follar".
Aunque me parecía un poco ridículo mantener la distancia o lo que fuera, así que después del Hola de Pearl, era yo quien me recostaba sobre ella importándome un carajo ya la impresión que diéramos, por que fuera la que fuera, iba a ser la impresión acertada, y eran Aquila y el lobo, de todos modos tendrían que ser los primeros en enterarse.
-¿Trajiste comida, lobo? Alguien se comió mis almendras saladas. Exijo una satisfacción
La acariciaba mientras pasaba los canales y me pedía que le dejara a uno de cocina, donde Nigella Lawson enseñaba a hacer mince pies, el clásico inglés para navidad. Por cierto, yo jamás la había celebrado a toda regla, por que ser tan liberal de comuna neo-hippie me excentaba de esas tradiciones. De niño me había sentido terriblemente mal de no decorar un árbol, intercambiar regalos y hacer cosas así, pero al final me había acostumbrado a tener no-navidades, como si un judío viniera a hablarme del Hanukkah o algo así, me era neutralmente ajeno. Eso sí, estaba seguro de que Pearl festejaba una navidad a todo lo grande con regalos, árboles, escarchas, galletas de gengibre y mince pies.
-¿Tus navidades son como programa de Nigella Lawson en el mundo mágico? Seguro que sí...
Besé su cabello y me acomodé un poco para seguir cerca de ella antes de que sintiera la evidente tensión que sólo provocaba el hecho de escuchar abrirse la puerta y también la voz de Aquila hablando de quién sabe qué cosas con el lobo. Por supuesto que no iba a aventarla a un lado y a ponerme a silbar para disimular o algo así, lo único es que mis ojos fueron a la bolsa donde seguían unas cervezas y preservativos sin abrir, lo que sería demasiado evidente para cualquiera y le diría al mundo "Mis planes para hoy son beber y follar".
Aunque me parecía un poco ridículo mantener la distancia o lo que fuera, así que después del Hola de Pearl, era yo quien me recostaba sobre ella importándome un carajo ya la impresión que diéramos, por que fuera la que fuera, iba a ser la impresión acertada, y eran Aquila y el lobo, de todos modos tendrían que ser los primeros en enterarse.
-¿Trajiste comida, lobo? Alguien se comió mis almendras saladas. Exijo una satisfacción
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Angus recogió las bolsas que había dejado junto a la puerta del apartamento luego de quitarle los hechizos protectores. Antes de abrir volvió a besar a Aquila y curiosamente los planes del licántropo para esa tarde también eran beber y follar (y comer) y no se esperaba visitas y si las esperaba, sería solo hasta entrada la noche cuando Karim llegara a dormir.
-Ya te me estás poniendo difícil, pero sé de lo que hablas, a mi también me pasa. Hoy le daré una buena repasada a la selección y pondré una espantosa que te haga llorar.-El licántropo confiaba en que sí tendría algún tesoro por ahí que se estuviera pasando por alto. Al entrar él si vio rápido a Karim y a Pearl pero se preocupó primero que nada por pasar a la cocina y dejar las bolsas con las compras ahí adentro solo saludando a Pearl de paso sin voltear a ver su sonrisa de tengo nervios pero acabo de follar que acompañaba su saludo.
Salió de la cocina solo para ver que ese par no estaba normal, que eso no era normal, que estaban más juntos que nunca. Siempre que los había visto en el departamento estaban correctamente sentados, con sus distancias. Ahora parecían lo que eran. Miró a Aquila buscando auxilio y lo disimuló señalándola como directa culpable de la pérdida de las almendras saladas.
-Ella fue. -No podía ni hacer bromas al respecto porque estaba medio contrariado. Sabía que Pearl acababa de terminar con Joe pero su imagen le dejaba mucho qué pensar y también la comodidad descarada con la que se manejaba su amigo. De nuevo pidió socorro a Aquila con la mirada, si la veía a ella normal entonces él estaba ya alucinando.
-Traje comida pero para cocinarla. No creo que lo vayas a hacer y no alcanza, ¿se quedarán? Podemos pedir algo.-No los estaba mirando, ya no los estaba mirando. Carraspeó y creyó que era buena idea husmear en las bolsas de Karim. Mala idea porque, ¿qué podía pensar de cervezas y preservativos? Pues que habían tenido el mismo plan, nada más. Se alejó de las bolsas como si le fuera a saltar una acromántula del interior.
-A…eh….mmmm…-sonidos sin sentido y un gruñido de incomodad fueron los presentadores estrella de su siguiente pregunta.-¿Qué entonces, ordenamos algo?-Y solo podía hablar de comida porque no iba a hablar de preservativos. Ya estaba teniendo muchas ganas de jalar a Karim al vestidor/estudio y pedirle explicaciones antes de volverse loco.
-Ya te me estás poniendo difícil, pero sé de lo que hablas, a mi también me pasa. Hoy le daré una buena repasada a la selección y pondré una espantosa que te haga llorar.-El licántropo confiaba en que sí tendría algún tesoro por ahí que se estuviera pasando por alto. Al entrar él si vio rápido a Karim y a Pearl pero se preocupó primero que nada por pasar a la cocina y dejar las bolsas con las compras ahí adentro solo saludando a Pearl de paso sin voltear a ver su sonrisa de tengo nervios pero acabo de follar que acompañaba su saludo.
Salió de la cocina solo para ver que ese par no estaba normal, que eso no era normal, que estaban más juntos que nunca. Siempre que los había visto en el departamento estaban correctamente sentados, con sus distancias. Ahora parecían lo que eran. Miró a Aquila buscando auxilio y lo disimuló señalándola como directa culpable de la pérdida de las almendras saladas.
-Ella fue. -No podía ni hacer bromas al respecto porque estaba medio contrariado. Sabía que Pearl acababa de terminar con Joe pero su imagen le dejaba mucho qué pensar y también la comodidad descarada con la que se manejaba su amigo. De nuevo pidió socorro a Aquila con la mirada, si la veía a ella normal entonces él estaba ya alucinando.
-Traje comida pero para cocinarla. No creo que lo vayas a hacer y no alcanza, ¿se quedarán? Podemos pedir algo.-No los estaba mirando, ya no los estaba mirando. Carraspeó y creyó que era buena idea husmear en las bolsas de Karim. Mala idea porque, ¿qué podía pensar de cervezas y preservativos? Pues que habían tenido el mismo plan, nada más. Se alejó de las bolsas como si le fuera a saltar una acromántula del interior.
-A…eh….mmmm…-sonidos sin sentido y un gruñido de incomodad fueron los presentadores estrella de su siguiente pregunta.-¿Qué entonces, ordenamos algo?-Y solo podía hablar de comida porque no iba a hablar de preservativos. Ya estaba teniendo muchas ganas de jalar a Karim al vestidor/estudio y pedirle explicaciones antes de volverse loco.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
-Bueno, pero no vayas a hacer tus chistes después de asustarme y tenerme paranoica toda la noche...
Y no, gracias a toda la magia no habían entrado en el peor momento para hacerlo pero al final se habían encontrado sólo con una versión ligera de lo que estaba ahí. No le sorprendía ver a Pearlie con Malik pero... pero eso era ya demasiado evidente y al parecer, él no tenía ya la menor intención de disimular. Por supuesto que lo primero que pensó fue en Milena, y en si acaso la pobrecita ya estaría al tanto de esa situación o se había enterado más o menos como ella, lo cuál hubiera sido una putada de proporciones mayores.
Contrario a Angus no se había puesto nerviosa, años de desentrañar chismecillos de colegio le habían dado cierto temple para esas situaciones. Entornó un poco los ojos y tuvo suficientes ganas de tener claro qué pasaba como para tapar la televisión y ponerse frente a ellos.
-Ok, ok, esperen un segundo. Quiero suponer que Milena ya sabe de esto y que tienen todo resuelto. Si es así, bien, por que si no ni piensen que voy a ser la tapadera de nadie.
Se los decía con el ceño levemente fruncido y las manos en la cintura como había visto hacer a su madre un montón de veces cuando exigía explicaciones. Por que si Angus sólo se ponía a hablar de comida sin saber qué decir, ella les ponía las cartas sobre la mensa. No iba, como bien había dicho, a soltar una sola palabra de consideración hacia Crawford, por ella que lo devorara una jauría de perros salvajes, pero le incomodaría pensar que tendría que estar entre Milena y Pearlie, y en definitiva no iba a ponerse del lado de ninguna por el simple hecho de que tampoco iba a ponerse en plan de crucifacarlos por, bueno, por lo que parecía haber terminado juntos sin pretenderlo o algo así. Apuntó con el dedo índice a Malik como si siguiera hablando, tampoco iba a hacer de esa tarde un drama donde no lo había.
-Me comí tus almendras y no pienso restituírte nada, tú te comiste mi snickers.
Caminó hasta Angus jalándolo del brazo para llevarlo a la habitación, ella quería cambiarse de ropa y de paso sacarlo de su estado de shock. Se sentó en la cama quitándose los zapatos y esperando a que él hablara o algo así. Lo miró con una especie de sonrisa incrédula.
-No me digas que no lo veías venir, tonto
Y no, gracias a toda la magia no habían entrado en el peor momento para hacerlo pero al final se habían encontrado sólo con una versión ligera de lo que estaba ahí. No le sorprendía ver a Pearlie con Malik pero... pero eso era ya demasiado evidente y al parecer, él no tenía ya la menor intención de disimular. Por supuesto que lo primero que pensó fue en Milena, y en si acaso la pobrecita ya estaría al tanto de esa situación o se había enterado más o menos como ella, lo cuál hubiera sido una putada de proporciones mayores.
Contrario a Angus no se había puesto nerviosa, años de desentrañar chismecillos de colegio le habían dado cierto temple para esas situaciones. Entornó un poco los ojos y tuvo suficientes ganas de tener claro qué pasaba como para tapar la televisión y ponerse frente a ellos.
-Ok, ok, esperen un segundo. Quiero suponer que Milena ya sabe de esto y que tienen todo resuelto. Si es así, bien, por que si no ni piensen que voy a ser la tapadera de nadie.
Se los decía con el ceño levemente fruncido y las manos en la cintura como había visto hacer a su madre un montón de veces cuando exigía explicaciones. Por que si Angus sólo se ponía a hablar de comida sin saber qué decir, ella les ponía las cartas sobre la mensa. No iba, como bien había dicho, a soltar una sola palabra de consideración hacia Crawford, por ella que lo devorara una jauría de perros salvajes, pero le incomodaría pensar que tendría que estar entre Milena y Pearlie, y en definitiva no iba a ponerse del lado de ninguna por el simple hecho de que tampoco iba a ponerse en plan de crucifacarlos por, bueno, por lo que parecía haber terminado juntos sin pretenderlo o algo así. Apuntó con el dedo índice a Malik como si siguiera hablando, tampoco iba a hacer de esa tarde un drama donde no lo había.
-Me comí tus almendras y no pienso restituírte nada, tú te comiste mi snickers.
Caminó hasta Angus jalándolo del brazo para llevarlo a la habitación, ella quería cambiarse de ropa y de paso sacarlo de su estado de shock. Se sentó en la cama quitándose los zapatos y esperando a que él hablara o algo así. Lo miró con una especie de sonrisa incrédula.
-No me digas que no lo veías venir, tonto
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Ya no tuvo tiempo de decirle que sí, que sus navidades eran como programa de Nigella Lawson en el mundo mágico, ni de contarle que la única vez que se había reunido la familia completa- Alechinskys y todo, sin Tobias porque estaba en periodo Azkaban- había terminado todo en el peor de los desastres y que desde entonces no habían vuelto a intentar una proeza parecida. Aunque igual eso había sido ya hacía bastante rato, antes de que ella fuera a Beauxbatons. Esas pláticas rememorativas tendrían que esperar porque Angus y Aquila ya estaban ahí y bueno, el ambiente no era precisamente el más óptimo para ponerse a decir nada.
Se sintió mucho más segura porque Malik pareciera no tener intenciones de seguir disimulando, aunque se sentía muy raro sentir a Angus completamente en estado de shock y claro que se dio cuenta de que se había quedado peor luego de hurgar en la bolsa donde Malik seguramente todavía tenía preservativos. Sintió una onda de calor subir hasta sus mejillas y clavó la vista en la tele haciéndose la loca dejando que Malik contestara cualquier cosa sobre si se iban a quedar ahí, se iban a ir o si iban a ordenar comida.
Pero ya no pudo seguir haciéndose la loca cuando Aquila se ponía enfrente de la tele y tomaba una actitud que, curiosamente, también le recordaba un poco a su mamá. No bajó la vista como una niña regañada pero tampoco iba a hablar respecto al tema Milena. Es decir, la semiveela era su amiga y en dado caso de que Malik le dijera algo respecto al pasado –lo dudaba muchísimo- le debería explicaciones. Y también le debería explicaciones respecto a empezar a salir con él y tal pero eso era distinto. De todos modos no le tocaba a ella dejarla al tanto de la situación, la relación amorosa con ella, la tenía él. Tampoco iba a decir “me acaba de decir que hablará con ella” porque pues, sonaba tonto decirlo así, aunque fuera cierto y sí significara algo. Ella tenía todo resuelto con Crawford pero seguro eso a Aquila le importaba menos que un gusarajo, así que daba igual.
Lo que le estaba quedando claro, era que iba a ser un lío, pero también sentía que si podía confiar en alguien era en ellos dos. Siguió a Aquila con la mirada cuando jalaba a Angus a la habitación y cuando se quedó sola con Malik en la sala se llevó una mano a la frente como si algo le diera jaqueca pero terminó soltando una risa de nervios.
-Eres un descarado. Pero al menos no nos corrieron de su casa por tanto desacato. Estoy en blanco, no sé ni qué decir.
Lo besó en la mejilla rápido y buscó su mano para apretarla. Tenía que empezar a acostumbrarse, porque seguramente generarían reacciones mucho peores con el tiempo. Ya se imaginaba a Gianna, tal vez hasta a Sofie, desaprobando totalmente lo que estaba haciendo.
-¿Nos vamos a quedar?
Preguntó por logística, no porque estuviera incómoda, solo estaba nerviosa.
Se sintió mucho más segura porque Malik pareciera no tener intenciones de seguir disimulando, aunque se sentía muy raro sentir a Angus completamente en estado de shock y claro que se dio cuenta de que se había quedado peor luego de hurgar en la bolsa donde Malik seguramente todavía tenía preservativos. Sintió una onda de calor subir hasta sus mejillas y clavó la vista en la tele haciéndose la loca dejando que Malik contestara cualquier cosa sobre si se iban a quedar ahí, se iban a ir o si iban a ordenar comida.
Pero ya no pudo seguir haciéndose la loca cuando Aquila se ponía enfrente de la tele y tomaba una actitud que, curiosamente, también le recordaba un poco a su mamá. No bajó la vista como una niña regañada pero tampoco iba a hablar respecto al tema Milena. Es decir, la semiveela era su amiga y en dado caso de que Malik le dijera algo respecto al pasado –lo dudaba muchísimo- le debería explicaciones. Y también le debería explicaciones respecto a empezar a salir con él y tal pero eso era distinto. De todos modos no le tocaba a ella dejarla al tanto de la situación, la relación amorosa con ella, la tenía él. Tampoco iba a decir “me acaba de decir que hablará con ella” porque pues, sonaba tonto decirlo así, aunque fuera cierto y sí significara algo. Ella tenía todo resuelto con Crawford pero seguro eso a Aquila le importaba menos que un gusarajo, así que daba igual.
Lo que le estaba quedando claro, era que iba a ser un lío, pero también sentía que si podía confiar en alguien era en ellos dos. Siguió a Aquila con la mirada cuando jalaba a Angus a la habitación y cuando se quedó sola con Malik en la sala se llevó una mano a la frente como si algo le diera jaqueca pero terminó soltando una risa de nervios.
-Eres un descarado. Pero al menos no nos corrieron de su casa por tanto desacato. Estoy en blanco, no sé ni qué decir.
Lo besó en la mejilla rápido y buscó su mano para apretarla. Tenía que empezar a acostumbrarse, porque seguramente generarían reacciones mucho peores con el tiempo. Ya se imaginaba a Gianna, tal vez hasta a Sofie, desaprobando totalmente lo que estaba haciendo.
-¿Nos vamos a quedar?
Preguntó por logística, no porque estuviera incómoda, solo estaba nerviosa.
Pearlie F. Burroughs- Mensajes : 638
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Re: Una vez más
Cuando Finnerty se concentraba demasiado en un tema significaba que no podía poner su cabeza en orden como para hablar de lo que le sorprendía... o algo así. Después de veinte años podía saber cuándo le estaba costando digerir algo y me sentí un tanto desconsiderado por no intentar ser más sutil pero ser sutil me parecía una ridiculez ¿Qué se suponía que hiciéramos? ¿Hablar con los amigos de lo delicado del asunto como si estuviera pidiendo la mano de Pearl? Al carajo, con él podía saltarme esas tonterías y si podía hacerlo con él, el resto del mundo me daba absolutamente igual.
Parecía un descaro pero a mi manera de ver las cosas era más como una muestra de consideración a Pearl, de que no iba a andar escondiendo lo que teníamos como si fuera una vergüenza, y sí, eso iba a lastimar a un par y a joder a otros tantos, pero ambos habíamos acordado que a final de cuentas valía la pena.
Le sostuve la mirada a Aquila y sonreí a medias, no le tomé a mal sus palabras y de hecho me gustaba que pidiera la explicación, por que yo estaba más que dispuesto a darla, y lo único que me jodía era haber creado líos entre los amigos de siempre, eso era un hecho. No iba a intentar racionalizar el hecho de que me había quedado con la novia de uno de mis colegas, una novia por la que estaba loco, además; y yo había dejado a la mía, que como cereza del pastel, eran las mejores amigas. En tiempo pasado. Con razón Angus estaba en shock.
-Está resuelto, Lillyvick. No vas a ser la tapadera de nadie.
Por que estaba resuelto, no imaginaba qué clase de catástrofe podría impedir que hablara con Milena en cuanto pisara el campus y así fuera. Habíamos tenido suficiente de La Letra Escarlata Pearl y yo, aunque técnicamente no lo sabía nadie sin contar las sospechas (o hechos confirmados) de Adair y de Sofie. No es que fuera un secreto a voces lo que habíamos hecho, y en definitiva era algo que me iba a guardar para mi mismo por los siglos de los siglos, antes salvar lo poco que quedaba que terminar de joder a Milena diciéndole que me había estado follando a su mejor amiga, en favor de la honestidad. La honestidad podía irse mucho a la mierda.
Besé la mano de Pearl que estaba agarrando la mía y después le di un beso en la comisura de los labios. -No sé, Pearl, podemos ir a Hounslow si estás incómoda, o si Angus monta en cólera. Mira, eso no va a pasar, pero de todos modos tenían que ser los primeros en saber ¿No?
Parecía un descaro pero a mi manera de ver las cosas era más como una muestra de consideración a Pearl, de que no iba a andar escondiendo lo que teníamos como si fuera una vergüenza, y sí, eso iba a lastimar a un par y a joder a otros tantos, pero ambos habíamos acordado que a final de cuentas valía la pena.
Le sostuve la mirada a Aquila y sonreí a medias, no le tomé a mal sus palabras y de hecho me gustaba que pidiera la explicación, por que yo estaba más que dispuesto a darla, y lo único que me jodía era haber creado líos entre los amigos de siempre, eso era un hecho. No iba a intentar racionalizar el hecho de que me había quedado con la novia de uno de mis colegas, una novia por la que estaba loco, además; y yo había dejado a la mía, que como cereza del pastel, eran las mejores amigas. En tiempo pasado. Con razón Angus estaba en shock.
-Está resuelto, Lillyvick. No vas a ser la tapadera de nadie.
Por que estaba resuelto, no imaginaba qué clase de catástrofe podría impedir que hablara con Milena en cuanto pisara el campus y así fuera. Habíamos tenido suficiente de La Letra Escarlata Pearl y yo, aunque técnicamente no lo sabía nadie sin contar las sospechas (o hechos confirmados) de Adair y de Sofie. No es que fuera un secreto a voces lo que habíamos hecho, y en definitiva era algo que me iba a guardar para mi mismo por los siglos de los siglos, antes salvar lo poco que quedaba que terminar de joder a Milena diciéndole que me había estado follando a su mejor amiga, en favor de la honestidad. La honestidad podía irse mucho a la mierda.
Besé la mano de Pearl que estaba agarrando la mía y después le di un beso en la comisura de los labios. -No sé, Pearl, podemos ir a Hounslow si estás incómoda, o si Angus monta en cólera. Mira, eso no va a pasar, pero de todos modos tenían que ser los primeros en saber ¿No?
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Entre más se le pasaba el estado de shock a Angus, más comenzaba a pensar en todos los pormenores y problemas de lo que sucedía en el sillón de su apartamento. No podía ni empezar a ponerles orden sin volver a entrar en ese estado de shock que lo molestaba tanto, por eso no podía dejar de hablar de comida y seguía teniendo la imagen de los preservativos en la bolsa de la compra de Karim. No porque fuera el padre que recién descubría que su hija follaba, sino por las personas involucradas.
Angus ya sabía que Pearl ya no era novia de Joe, pero también que ese noviazgo no había sido una cosa cualquiera para su amigo más joven. A Milena no la conocía mucho y tampoco eran particularmente unidos a excepción de unos cuantos vodkas compartidos, pero Aquila también tenía su parte en eso y Angus no dejaba de pensar en lo raro que se iba a poner todo y que a menos que Joe solo hubiera exagerado, la pequeña familia que tenían iba a sufrir una perforación. No iba a culpar a Pearl como a una Yoko Ono en potencia, pero estaba preocupado por lo que iba a pasar en su círculo y siempre se había sentido como el hermano mayor de Joe y un hermano mayor no dejaba pasar las cosas así como así.
Se dejó jalar por Aquila a la habitación y cerró la puerta tras él todavía con la boca medio abierta, pero su mujer parecía estarlo manejando mejor que él, con temple y todo. No iba a montar en cólera pre luna llena, ni estaban cerca de fecha, pero seguía sin saber qué pensar de todo eso.
-En la fiesta entré en pánico cuando no los vi por ningún lado, sentía algo en los huesos. Pero no, no me lo esperaba. A ver, Joe es nuestro amigo, ¿se van a pasar la chica así como así?. Y…-Volvió a abrir la boca y a cerrarla. Todavía no sabía qué decir y parecía estar haciendo como pez fuera del agua.
-¿Qué se supone que tengo que hacer? No sé, aconséjame. ¿Lo dejó estar? ¿Tengo que decirle a Karim que no sea cabrón? ¿Te gusta esta idea? ¡Dime! ¿Crees que hayan estado…?mientras nosotros no…no ahorita, antes…tú sabes…-Follando a escondidas, en ese mismo apartamento. Y él sin enterarse de nada.
Angus ya sabía que Pearl ya no era novia de Joe, pero también que ese noviazgo no había sido una cosa cualquiera para su amigo más joven. A Milena no la conocía mucho y tampoco eran particularmente unidos a excepción de unos cuantos vodkas compartidos, pero Aquila también tenía su parte en eso y Angus no dejaba de pensar en lo raro que se iba a poner todo y que a menos que Joe solo hubiera exagerado, la pequeña familia que tenían iba a sufrir una perforación. No iba a culpar a Pearl como a una Yoko Ono en potencia, pero estaba preocupado por lo que iba a pasar en su círculo y siempre se había sentido como el hermano mayor de Joe y un hermano mayor no dejaba pasar las cosas así como así.
Se dejó jalar por Aquila a la habitación y cerró la puerta tras él todavía con la boca medio abierta, pero su mujer parecía estarlo manejando mejor que él, con temple y todo. No iba a montar en cólera pre luna llena, ni estaban cerca de fecha, pero seguía sin saber qué pensar de todo eso.
-En la fiesta entré en pánico cuando no los vi por ningún lado, sentía algo en los huesos. Pero no, no me lo esperaba. A ver, Joe es nuestro amigo, ¿se van a pasar la chica así como así?. Y…-Volvió a abrir la boca y a cerrarla. Todavía no sabía qué decir y parecía estar haciendo como pez fuera del agua.
-¿Qué se supone que tengo que hacer? No sé, aconséjame. ¿Lo dejó estar? ¿Tengo que decirle a Karim que no sea cabrón? ¿Te gusta esta idea? ¡Dime! ¿Crees que hayan estado…?mientras nosotros no…no ahorita, antes…tú sabes…-Follando a escondidas, en ese mismo apartamento. Y él sin enterarse de nada.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
¿Qué iba a decir? Lo único que le preocupaba de ese asunto era la posición que a ella le tocaría pensando en Milena y en Pearlie; en definitiva no iba a perder su amistad con la segunda, y la verdad es que había aprendido a querer mucho a Milena y a valorar su compañía. Por lo demás, le daba lo mismo. Aún así sabía que aunque a Joe le deseaba una muerte por sífilis, Angus se sentía tan en medio de la situación como ella, aunque del lado de sus amigos, y más, por que sabía que Joe y Malik eran como sus hermanos de toda la vida, ella podía no ser considerada con todos los involucrados, pero sí con lo que conflictuaba a su lobo. Se levantó para abrazar su cintura por detrás y recargar la cabeza en su espalda, cerrando los ojos un momento.
-Bueno, podemos pensar que es algo más que un pasarse a la chica ¿No? Lo haces sonar horrible. Mira, Pearlie no es de tomar decisiones a la ligera, debe tener algo con él más que... no sé, un capricho. Y bueno, Angus ¿Quieres dejar de darle tanto crédito al crush de un adolescente? ¿Cuánto amor podía haber en tres meses de encaprichamiento? Mira, no es nuestra posición pensarlo de todos modos, es lío suyo y tú no tienes por qué complicarte la cabeza con esas cosas.
Frunció el ceño cuando se ponía a pensar en las posibilidades. Ella era muy de decir lo que pensaba pero también de no meterse en los asuntos de la gente a la que de verdad quería, así como se había jurado no decir nada sobre Joe cuando Pearlie estaba con él por que eran sus decisiones y su criterio, e insistir sólo traería problemas entre ellas. Soltó su abrazo para ponérsele enfrente y mirarlo.
-¡Nada! No tienes qué hacer nada, por que no es tu problema ni el mío ¿Decirle a Karim qué? Es como si a ti te hubiera dicho algo cuando me trajiste a vivir aquí, no te hubiera parecido ¿Verdad? y seguro que había mucha gente con un montón de argumentos para dar sobre lo mal que esto estaba. Ya, déjalo, sé amigo de tus amigos y basta.
Soltó una carcajada cuando escuchó sus sospechas sobre lo que Pearlie y Malik pudieron haber hecho en su ausencia, digo, si ya tenían las ganas de andarse ahí abrazoneando frente a ellos ya suponía que esa intimidad física no se debía a estar viendo películas recostados uno en el regazo del otro ni esas inocentadas. Aquila podía no saber lo que significaba tener una amistad platónica con un hombre, pero por esa razón sabía perfectamente lo que significaba tener exactamente lo contrario, y el lenguaje corporal no mentía. Le daba risa que Angus se pusiera como papá pensando si sus hijitos ya habrían tenido sexo con alguien. Se quitó la blusa y tomó una de las camisetas que casi siempre dejaban sobre la silla para ponérsela. Se quitó sus pantalones para ponerse unos de andar por casa y después se le volvió a acercar.
-Ya o sea, como si Malik no hubiera tenido sexo mil veces en ese sillón, con quien carambas fuera. Podemos hacer lo propio y hacer mucho ruido para incomodarlos, así te vengas de ellos y vuelves a la vida normal.
-Bueno, podemos pensar que es algo más que un pasarse a la chica ¿No? Lo haces sonar horrible. Mira, Pearlie no es de tomar decisiones a la ligera, debe tener algo con él más que... no sé, un capricho. Y bueno, Angus ¿Quieres dejar de darle tanto crédito al crush de un adolescente? ¿Cuánto amor podía haber en tres meses de encaprichamiento? Mira, no es nuestra posición pensarlo de todos modos, es lío suyo y tú no tienes por qué complicarte la cabeza con esas cosas.
Frunció el ceño cuando se ponía a pensar en las posibilidades. Ella era muy de decir lo que pensaba pero también de no meterse en los asuntos de la gente a la que de verdad quería, así como se había jurado no decir nada sobre Joe cuando Pearlie estaba con él por que eran sus decisiones y su criterio, e insistir sólo traería problemas entre ellas. Soltó su abrazo para ponérsele enfrente y mirarlo.
-¡Nada! No tienes qué hacer nada, por que no es tu problema ni el mío ¿Decirle a Karim qué? Es como si a ti te hubiera dicho algo cuando me trajiste a vivir aquí, no te hubiera parecido ¿Verdad? y seguro que había mucha gente con un montón de argumentos para dar sobre lo mal que esto estaba. Ya, déjalo, sé amigo de tus amigos y basta.
Soltó una carcajada cuando escuchó sus sospechas sobre lo que Pearlie y Malik pudieron haber hecho en su ausencia, digo, si ya tenían las ganas de andarse ahí abrazoneando frente a ellos ya suponía que esa intimidad física no se debía a estar viendo películas recostados uno en el regazo del otro ni esas inocentadas. Aquila podía no saber lo que significaba tener una amistad platónica con un hombre, pero por esa razón sabía perfectamente lo que significaba tener exactamente lo contrario, y el lenguaje corporal no mentía. Le daba risa que Angus se pusiera como papá pensando si sus hijitos ya habrían tenido sexo con alguien. Se quitó la blusa y tomó una de las camisetas que casi siempre dejaban sobre la silla para ponérsela. Se quitó sus pantalones para ponerse unos de andar por casa y después se le volvió a acercar.
-Ya o sea, como si Malik no hubiera tenido sexo mil veces en ese sillón, con quien carambas fuera. Podemos hacer lo propio y hacer mucho ruido para incomodarlos, así te vengas de ellos y vuelves a la vida normal.
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
No le había ni contado a Malik la insistencia de Gianna de contarle a Joe, y en ese punto todavía no sabía que los involucrados, excepto quizá Sofie, le deseaban la muerte esperando que Joe se enterara. Ella también prefería mil veces dejar las cosas como estaban. Habría especulaciones, pero también le había dicho a Joe al terminar que sentía algo por Malik, por más que él se lo hubiera pasado por alto. A su modo de ver no había porque hacer dramas gratuitos si todos podían guardarse lo peor de lo peor, no toda Brigantia sabía lo que estaba pasando, ni mucho menos.
Le sonrió a Malik con el beso en su mano y luego miró hacia la puerta. Ella tampoco creía que Angus fuera a montar en cólera, hacerles un juicio y que todo fuera a peor, y si Malik decía que el asunto con Milena estaba resuelto, entonces lo estaba. Y huir a Hounslow porque se sentía incómoda, pensaba, sería una pésima decisión porque quería pensar que la manera en que llevara las cosas desde ese mismo instante sería una constante en eso que tenían.
-No, está bien. Se supone que no vamos a escondernos de nadie, no voy a huir ahora, menos de ellos.
Porque si no tenía confianza con ellos, ¿entonces con quién?. Claro que lo pensaba más sobre Aquila que sobre Angus, pero de todos modos seguía siendo sorprendente la facilidad con la que se había adaptado al hombre de su amiga. Y había pasado ahí mucho tiempo con Malik, tiempo de calidad y tal, como para tirar eso por la cañería, huyendo a la primera de cambio.
-Mira, si Angus no decide que me odia, estamos bien ¿Sí?.
Tampoco se iba a quedar en un lugar donde no era bienvenida, eso ya sería un abuso. Volvió a mirar la televisión aunque ya no estaba poniendo nada de atención a la receta y por eso prefirió besarlo lentamente antes de acariciar su incipiente barba con la nariz.
-Y sino, siempre tendremos la temporada navideña de las sinfónicas mágicas a las que quería llevarte, ¿Te acuerdas?. O tus clubs de travestidos. O el metro, ¡uy qué emocionante!.
Le pellizcó un poco las costillas antes de acurrucarse más a su lado, como antes de que llegaran Angus y Aquila. Seguía un poco nerviosa por el momento en que se abriera la puerta de la habitación de nuevo, pero eran cosas a las que tendría que irse acostumbrando.
Le sonrió a Malik con el beso en su mano y luego miró hacia la puerta. Ella tampoco creía que Angus fuera a montar en cólera, hacerles un juicio y que todo fuera a peor, y si Malik decía que el asunto con Milena estaba resuelto, entonces lo estaba. Y huir a Hounslow porque se sentía incómoda, pensaba, sería una pésima decisión porque quería pensar que la manera en que llevara las cosas desde ese mismo instante sería una constante en eso que tenían.
-No, está bien. Se supone que no vamos a escondernos de nadie, no voy a huir ahora, menos de ellos.
Porque si no tenía confianza con ellos, ¿entonces con quién?. Claro que lo pensaba más sobre Aquila que sobre Angus, pero de todos modos seguía siendo sorprendente la facilidad con la que se había adaptado al hombre de su amiga. Y había pasado ahí mucho tiempo con Malik, tiempo de calidad y tal, como para tirar eso por la cañería, huyendo a la primera de cambio.
-Mira, si Angus no decide que me odia, estamos bien ¿Sí?.
Tampoco se iba a quedar en un lugar donde no era bienvenida, eso ya sería un abuso. Volvió a mirar la televisión aunque ya no estaba poniendo nada de atención a la receta y por eso prefirió besarlo lentamente antes de acariciar su incipiente barba con la nariz.
-Y sino, siempre tendremos la temporada navideña de las sinfónicas mágicas a las que quería llevarte, ¿Te acuerdas?. O tus clubs de travestidos. O el metro, ¡uy qué emocionante!.
Le pellizcó un poco las costillas antes de acurrucarse más a su lado, como antes de que llegaran Angus y Aquila. Seguía un poco nerviosa por el momento en que se abriera la puerta de la habitación de nuevo, pero eran cosas a las que tendría que irse acostumbrando.
Pearlie F. Burroughs- Mensajes : 638
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Re: Una vez más
Yo también pensaba eso, que no había dos personas con las que pudiéramos estar en confianza más que con ellos, ella con la mujer de Angus y yo con él, era un terreno seguro. No iba a justificarme de ninguna manera, lo que le había hecho a Milena estaba mal, lo que le habiá hecho a Joe estaba mal y las consecuencias estarían ahí, bien presentes. No iba a andar por la vida con aires de superioriddad ni nada, y si estaba tan confiado en estar abrazándome con Pearl en el sofá era por que estábamos en casa y no en la sala común de Cerridwen como si quisiera probarle algo al mundo.
La besé con calma y después acaricié su cabello. Estaba casi seguro que Angus no iba a dedicarse a odiarla, quizás ya se le hubiera pasado por la cabeza hacerlo pero quería pensar que Pearl le agradaba hasta cierto punto así como yo pensaba que Lillyvick no eran tan insoportable después de todo y que verla siendo felíz con él y esas cursiladas me eran más que suficientes para pensar que era una buena mujer para él. Ese factor, o sea el factor semiveela controversial, le daría una visión más tolerante de todo aunque entendía que no encontrara manera de justificar lo que de mi parte le había hecho a Joe, y tampoco pensaba hacerlo. Tan era así que no necesitaba lecciones morales al respecto, suficiente iba a tener habiendo perdido toda su confianza, y al menos de momento, su amistad. Era suficiente castigo ¿No?
-¿Sabías que nunca he festejado la navidad? Eso sí que es emocionante
La abracé cerca de mi cuando se volvía a sentir con la confianza suficiente para acercarse a mi lado y aspiré el olor suave de su cabello, cerrando los ojos un momento y dejando la barbilla apoyada en su cabeza, un tanto reflexivo. Parecer que me tomaba las cosas con calma no significaba precisamente que todo dentro de mi fuera tranquilidad absoluta. Tahira me había ya advertido que no hiciera tonterías con Milena como si tuviera un sexto sentido para cuando ya la había cagado, y de ella sí me esperaba una charla de la que no podía escapar. Siempre decía que no había criado a un patán y esas cosas que de verdad me hacían sentir una basura de persona, por que venían de ella y de nadie más. No esperaba que todo eso estuviera excento de consecuencias, pero estaba seguro de poder aceptarlas por estar con Pearl.
-Podré con esto, y con lo que sea.
No era muy dado a repetir hasta el infinito que la amaba por que a final de cuentas no era muy expresivo con las cosas que sentía y eso no iba a cambiar mágicamente (a menos que hubiera un hechizo para tales efectos), pero tampoco tenía qué repetirlo hasta el cansancio para que lo supiera.
-Prepárame mince pies
La besé con calma y después acaricié su cabello. Estaba casi seguro que Angus no iba a dedicarse a odiarla, quizás ya se le hubiera pasado por la cabeza hacerlo pero quería pensar que Pearl le agradaba hasta cierto punto así como yo pensaba que Lillyvick no eran tan insoportable después de todo y que verla siendo felíz con él y esas cursiladas me eran más que suficientes para pensar que era una buena mujer para él. Ese factor, o sea el factor semiveela controversial, le daría una visión más tolerante de todo aunque entendía que no encontrara manera de justificar lo que de mi parte le había hecho a Joe, y tampoco pensaba hacerlo. Tan era así que no necesitaba lecciones morales al respecto, suficiente iba a tener habiendo perdido toda su confianza, y al menos de momento, su amistad. Era suficiente castigo ¿No?
-¿Sabías que nunca he festejado la navidad? Eso sí que es emocionante
La abracé cerca de mi cuando se volvía a sentir con la confianza suficiente para acercarse a mi lado y aspiré el olor suave de su cabello, cerrando los ojos un momento y dejando la barbilla apoyada en su cabeza, un tanto reflexivo. Parecer que me tomaba las cosas con calma no significaba precisamente que todo dentro de mi fuera tranquilidad absoluta. Tahira me había ya advertido que no hiciera tonterías con Milena como si tuviera un sexto sentido para cuando ya la había cagado, y de ella sí me esperaba una charla de la que no podía escapar. Siempre decía que no había criado a un patán y esas cosas que de verdad me hacían sentir una basura de persona, por que venían de ella y de nadie más. No esperaba que todo eso estuviera excento de consecuencias, pero estaba seguro de poder aceptarlas por estar con Pearl.
-Podré con esto, y con lo que sea.
No era muy dado a repetir hasta el infinito que la amaba por que a final de cuentas no era muy expresivo con las cosas que sentía y eso no iba a cambiar mágicamente (a menos que hubiera un hechizo para tales efectos), pero tampoco tenía qué repetirlo hasta el cansancio para que lo supiera.
-Prepárame mince pies
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
El licántropo seguía muy preocupado y sin saber qué hacer. Ya sabía que no tenía que ir a darle lecciones morales a Karim y lo que más le preocupaba era que en su pequeña familia iba a haber esa ruptura. Ya no iban a ser lo mismo las cosas y esperaba que de verdad no fuera solo pasarse a la chica y que si Karim estaba haciendo esas cosas, fuera por algo importante y no por un capricho de ambos como decía Aquila. Angus también sabía que no tenía porque complicarse con lo que le pasaría a Joe por la cabeza, pero era su amigo y se preocupaba, no le quiso recordar que su amor también había sido rápido, y fuera un adolescente o no, no le iba a quitar crédito a sus cambios, porque él no sabía que esos cambios habían tenido también repercusiones negativas en Joe. En realidad Angus no sabía nada de nada y eso era la peor parte de todo.
-¿Pero al menos habló con él? ¡Algo, no sé!. ¿En qué momento decidió esto?.-Ya, con las palabras de Aquila se convencía cada vez más de que no era de su incumbencia y que si nadie lo había juzgado a él, él tampoco tenía derecho de hacer algo así. Ser amigo de sus amigos sonaba fácil y la mejor solución pero no podía evitar creer que tenía ciertas responsabilidades.
-Sí, pero es diferente…-Que Karim hubiera tenido sexo cien mil veces en ese sillón con cien mil chicas distintas, ninguna había sido novia de Joseph. La miraba mientras se estaba cambiando, no podía evitar hacerlo aunque se sintiera en estado de shock todavía. Era muy raro, muy muy raro, pero el cuerpo de Aquila le llamaba de todos modos, el color de su piel, la manera en que lucía su cabello y todas esas cosas que también le provocaban estado de shock por más afectado que estuviera.
-Tengo que hablar con Joe, saber cómo está y todo eso, si no le importa entonces estaré bien con mi alma, pero estoy preocupado. Entiéndeme, es como mi hermanito. No le voy a decir a Karim lo que tiene o no tiene que hacer, tampoco voy a salir a lapidar a Pearl, no es ese el papel que quiero ni puedo ni debo tomar, solo asegurarme de que todo esté en su lugar y que la sociedad no se desintegre.-Se acercó a Aquila y la rodeó con los dos brazos. -Bueno, déjame empezar quitándote los pantalones. Pero sé ruidosa, solo eso me va a calmar. Metió las manos dentro de su ropa interior y la acarició un poco. Bálsamo, sin duda, pero el licántropo seguía consternado. La besó mientras la acariciaba, también mientras seguía haciéndose a la idea de que el par de allá afuera estaba cambiando cosas.
-¿Pero al menos habló con él? ¡Algo, no sé!. ¿En qué momento decidió esto?.-Ya, con las palabras de Aquila se convencía cada vez más de que no era de su incumbencia y que si nadie lo había juzgado a él, él tampoco tenía derecho de hacer algo así. Ser amigo de sus amigos sonaba fácil y la mejor solución pero no podía evitar creer que tenía ciertas responsabilidades.
-Sí, pero es diferente…-Que Karim hubiera tenido sexo cien mil veces en ese sillón con cien mil chicas distintas, ninguna había sido novia de Joseph. La miraba mientras se estaba cambiando, no podía evitar hacerlo aunque se sintiera en estado de shock todavía. Era muy raro, muy muy raro, pero el cuerpo de Aquila le llamaba de todos modos, el color de su piel, la manera en que lucía su cabello y todas esas cosas que también le provocaban estado de shock por más afectado que estuviera.
-Tengo que hablar con Joe, saber cómo está y todo eso, si no le importa entonces estaré bien con mi alma, pero estoy preocupado. Entiéndeme, es como mi hermanito. No le voy a decir a Karim lo que tiene o no tiene que hacer, tampoco voy a salir a lapidar a Pearl, no es ese el papel que quiero ni puedo ni debo tomar, solo asegurarme de que todo esté en su lugar y que la sociedad no se desintegre.-Se acercó a Aquila y la rodeó con los dos brazos. -Bueno, déjame empezar quitándote los pantalones. Pero sé ruidosa, solo eso me va a calmar. Metió las manos dentro de su ropa interior y la acarició un poco. Bálsamo, sin duda, pero el licántropo seguía consternado. La besó mientras la acariciaba, también mientras seguía haciéndose a la idea de que el par de allá afuera estaba cambiando cosas.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
-No sé, Angus, yo tampoco sabía nada de todo esto. Bueno... bueno, salvo el chisme de Cerridwen, ya sé que adoras a Crawford, pero le montó una escena a Pearlie con botellas rotas incluídas y no era la primera vez que se ponía como un loco posesivo. No es justificación, sólo te digo lo que sé, y las razones por las que Pearlie lo dejó, hasta donde sé
Estaba procurando no ser una chismosa de primera pero pensó que era mejor decírselo para que no se sintiera después como el único tonto que no sabía nada de nada. Le dio un poco de risa con eso de que era diferente y lo tomó por el rostro antes de negar con la cabeza y sonreír. No le estaba quitando importancia al asunto, sólo quería que él no se sintiera responsable por cosas que finalmente no estaría en ellos resolver.
-Por supuesto que no te va a decir que no le importa, Angus ¿En qué mundo vives? Va a estar dolido y todo eso como cualquiera, y seguro que va a estar odiando a Karim si pretenden... ya sabes, andar juntos y todo. Milena va a odiarlos a ambos también, y no, nada está en su lugar, así que hazte a la idea, cariño. Esto va a tener muchos episodios incómodos...
Pues qué más si no, por supuesto que nada iba a estar bien así como así, si Crawford no tenía la mínima madurez para tener una relación más o menos sana con alguien iba a ser el peor con una ruptura, y con una ruptura de ese estilo además, hasta puso los ojos en blanco al no poder ocultar su desprecio por el tipo y más por que Angus parecía no conocerlo o conocer sólo lo que había sido él a los once años o algo así. Qué sabía ella, sería muy difícil cambiar su opinión sobre él pero tenía claro que habría de contenerse si no quería tener problemas con él a causa de eso. No pretendía separarlo de sus amigos, ni siquiera de Joe.
Le sonrió un poco, cerrando los ojos cuando sentía que la acariciaba y lo besó con más ganas, dejándose hacer por un momento aunque de verdad no pretendía llevar a cargo esa clase de venganza con ellos. Le sacó la mano de sus bragas y lo miró con falso pudor, antes de besarlo de nuevo y pegar mucho su cuerpo al de él.
-¡Estás loco! anda, vamos afuera, no quiero que piensen que andamos todos raros. Necesitamos un trago
Estaba procurando no ser una chismosa de primera pero pensó que era mejor decírselo para que no se sintiera después como el único tonto que no sabía nada de nada. Le dio un poco de risa con eso de que era diferente y lo tomó por el rostro antes de negar con la cabeza y sonreír. No le estaba quitando importancia al asunto, sólo quería que él no se sintiera responsable por cosas que finalmente no estaría en ellos resolver.
-Por supuesto que no te va a decir que no le importa, Angus ¿En qué mundo vives? Va a estar dolido y todo eso como cualquiera, y seguro que va a estar odiando a Karim si pretenden... ya sabes, andar juntos y todo. Milena va a odiarlos a ambos también, y no, nada está en su lugar, así que hazte a la idea, cariño. Esto va a tener muchos episodios incómodos...
Pues qué más si no, por supuesto que nada iba a estar bien así como así, si Crawford no tenía la mínima madurez para tener una relación más o menos sana con alguien iba a ser el peor con una ruptura, y con una ruptura de ese estilo además, hasta puso los ojos en blanco al no poder ocultar su desprecio por el tipo y más por que Angus parecía no conocerlo o conocer sólo lo que había sido él a los once años o algo así. Qué sabía ella, sería muy difícil cambiar su opinión sobre él pero tenía claro que habría de contenerse si no quería tener problemas con él a causa de eso. No pretendía separarlo de sus amigos, ni siquiera de Joe.
Le sonrió un poco, cerrando los ojos cuando sentía que la acariciaba y lo besó con más ganas, dejándose hacer por un momento aunque de verdad no pretendía llevar a cargo esa clase de venganza con ellos. Le sacó la mano de sus bragas y lo miró con falso pudor, antes de besarlo de nuevo y pegar mucho su cuerpo al de él.
-¡Estás loco! anda, vamos afuera, no quiero que piensen que andamos todos raros. Necesitamos un trago
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Angus también ya sabía lo del escándalo de Cerridwen porque los de esa facultad eran muy chismosos y habían llegado a decirlo hasta el bar, solo que ninguno de los dos, ni Pearl ni Joseph, le habían confirmado nada. Que Aquila lo dijera siendo amiga de Pearl era diferente, porque ya sabía que su mujer no iba a andar por ahí contándole chismes sin sentido sobre quien era su amiga.
Pensar en los momentos incómodos que se podían venir si Pearl y Karim decidían estar juntos lo ponía más incómodo todavía, aunque todavía no estuviera sucediendo, Aquila podía intentar restarle responsabilidad pero él la sentía, siempre había sido así, eran las desventajas de ser el mayor de un grupo que había estado unido desde hacía muchos años, a veces resultaba ser muy aprehensivo con muchas cosas. Y Aquila tenía razón en que seguramente estaba poniendo a Joe en un lugar en el que el chico ya no estaba desde los once años.
Le acarició la cara a Aquila al ver su expresión de desprecio hacia Crawford, pero no le dijo nada porque ella había sido ya muy paciente en soportar a todas sus amistades que también, aunque dijeran que no, eran bastante prejuiciosas. Iba con él a todos lados con la mejor disposición y había cambiado muchas cosas de su vida por él como para exigirle que encima, amara incondicionalmente a todos sus amigos. Ya se daba por bien servido que soportara a Karim.
Con gusto hubiera seguido con eso, aunque no gritara y no lo hicieran por venganza, pero ella lo detuvo haciéndolo reír por el pudor falso. La besó tratando de no pensar en incomodidades y desintegraciones de amistades largas, pero encerrarse durante mucho rato en su habitación empezaría con el circulo de incomodidades y él no quería eso. Asintió antes de besarla otra vez y salir con ella de la mano aunque no fuera necesario traerla como novia con la que paseaba por ese pequeño departamento. Le era muy raro ver a Pearl y a Karim abrazados y con esas caras, trató de disimular que no estaba todavía en estado de shock y fue directo a la cocina.
-¿Ya decidieron qué vamos a comer?-No creía que estuvieran viendo ese programa de comida para ir a cocinar así que le aventó a Karim desde la cocina ayudado por la varita para que llegaran a su regazo unas propagandas de comida a domicilio mientras rebuscaba en los armarios una botella de vodka de las que se había quedado luego de las compras para la fiesta. También sacó vasos, todos de plástico, para dejarlos sobre la mesa junto con la botella. Él fue el primero en servirse y acabarse el trago de golpe. Necesitaba más que eso para asimilar la situación, no importaba que Aquila dijera que era un exagerado.
-Y quítenle a eso que no me gusta.-Ver comida que no se iba a comer, o ver cómo preparaban comida que no iba a aparecer mágicamente en su mesa le parecía una pérdida de tiempo. Se acercó al sillón donde estaban sentados y medio los empujó para meter la mano en los resquicios buscando comida escondida, pero no encontró nada.
Pensar en los momentos incómodos que se podían venir si Pearl y Karim decidían estar juntos lo ponía más incómodo todavía, aunque todavía no estuviera sucediendo, Aquila podía intentar restarle responsabilidad pero él la sentía, siempre había sido así, eran las desventajas de ser el mayor de un grupo que había estado unido desde hacía muchos años, a veces resultaba ser muy aprehensivo con muchas cosas. Y Aquila tenía razón en que seguramente estaba poniendo a Joe en un lugar en el que el chico ya no estaba desde los once años.
Le acarició la cara a Aquila al ver su expresión de desprecio hacia Crawford, pero no le dijo nada porque ella había sido ya muy paciente en soportar a todas sus amistades que también, aunque dijeran que no, eran bastante prejuiciosas. Iba con él a todos lados con la mejor disposición y había cambiado muchas cosas de su vida por él como para exigirle que encima, amara incondicionalmente a todos sus amigos. Ya se daba por bien servido que soportara a Karim.
Con gusto hubiera seguido con eso, aunque no gritara y no lo hicieran por venganza, pero ella lo detuvo haciéndolo reír por el pudor falso. La besó tratando de no pensar en incomodidades y desintegraciones de amistades largas, pero encerrarse durante mucho rato en su habitación empezaría con el circulo de incomodidades y él no quería eso. Asintió antes de besarla otra vez y salir con ella de la mano aunque no fuera necesario traerla como novia con la que paseaba por ese pequeño departamento. Le era muy raro ver a Pearl y a Karim abrazados y con esas caras, trató de disimular que no estaba todavía en estado de shock y fue directo a la cocina.
-¿Ya decidieron qué vamos a comer?-No creía que estuvieran viendo ese programa de comida para ir a cocinar así que le aventó a Karim desde la cocina ayudado por la varita para que llegaran a su regazo unas propagandas de comida a domicilio mientras rebuscaba en los armarios una botella de vodka de las que se había quedado luego de las compras para la fiesta. También sacó vasos, todos de plástico, para dejarlos sobre la mesa junto con la botella. Él fue el primero en servirse y acabarse el trago de golpe. Necesitaba más que eso para asimilar la situación, no importaba que Aquila dijera que era un exagerado.
-Y quítenle a eso que no me gusta.-Ver comida que no se iba a comer, o ver cómo preparaban comida que no iba a aparecer mágicamente en su mesa le parecía una pérdida de tiempo. Se acercó al sillón donde estaban sentados y medio los empujó para meter la mano en los resquicios buscando comida escondida, pero no encontró nada.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
A riesgo de dejar a Pearl con la palabra en la boca respecto a los mince pies, me levanté del sillón poco después de que Angus y Aquila salieran de la habitación tomados de la mano como novios por la calle. Me sonreí y me desperecé un poco, sintiendo que quizás eso evidenciaba que habíamos estado follando y quemando energías de la manera más placentera que existía. Por supuesto que sospeché que se habían encerrado a hablar de la situación pero aparentemente querían llevar las cosas tranquilas. Le di a Pearl un rápido beso en el cabello antes de ir hacia la cocina y llevar los papeles que Angus me había aventado y luego de que hurgara buscando tesoros escondidos.
-Ni lo intentes, guardar algo en ese lugar sería como si intentara esconderlo bajo tu almohada
Ya no guardaba nada ahí después de tres robos seguidos, así como Angus ya no ponía nada en la repisa de los detergentes y las cosas no comestibles bajo el fregadero. No le quité al programa en caso de que Pearl estuviera anotando la receta para cumplir el capricho de las micro tartas con una estrella encima. Repasé los papeles.
-¿Bundu Khan o comida turca de Super Ocakbasi? Esas son mis opciones.
Abrí una cerveza de las que había comprado antes, no por ignorar lo que Angus había servido, sino para repartirlo, no pensaba beberme ese vodka solo así nada más. Le di un buen trago antes de ir hasta la mesa y tomar uno de los vasos que había servido, vaciándolo de dos tragos y no de uno como el lobo. Tenía la sensación de que en algún momento tendría qué hablar con él y no sólo pasar la vida actuando con naturalidad, aunque esa frase fuera una contradicción por sí misma. Actuar implicaba no ser natural, pero se hacía lo que se podía.
Volví a mi lugar en el sillón, a un lado de Pearl, y tomé el control antes de que Angus lo hiciera por que de todos modos Nigella Lawson con su especial navideño se había terminado. Sospechaba que estaban a nada de poner algo de horror, y si por mi hubiera sido le shubiera puesto a ver Naked Lunch, pero estábamos por comer y esa no era la mejor de las ideas. Era curioso, pero no me sentía distinto a las veces en que Pearl iba y hacíamos exactamente lo mismo, tal vez la mejor parte de estar con ella, que a pesar de todo, era demasiado natural estar con ella, simple. Aunque tuviéramos que resolver un montón de cosas que nada tenían que ver con algo simple.
-Ni lo intentes, guardar algo en ese lugar sería como si intentara esconderlo bajo tu almohada
Ya no guardaba nada ahí después de tres robos seguidos, así como Angus ya no ponía nada en la repisa de los detergentes y las cosas no comestibles bajo el fregadero. No le quité al programa en caso de que Pearl estuviera anotando la receta para cumplir el capricho de las micro tartas con una estrella encima. Repasé los papeles.
-¿Bundu Khan o comida turca de Super Ocakbasi? Esas son mis opciones.
Abrí una cerveza de las que había comprado antes, no por ignorar lo que Angus había servido, sino para repartirlo, no pensaba beberme ese vodka solo así nada más. Le di un buen trago antes de ir hasta la mesa y tomar uno de los vasos que había servido, vaciándolo de dos tragos y no de uno como el lobo. Tenía la sensación de que en algún momento tendría qué hablar con él y no sólo pasar la vida actuando con naturalidad, aunque esa frase fuera una contradicción por sí misma. Actuar implicaba no ser natural, pero se hacía lo que se podía.
Volví a mi lugar en el sillón, a un lado de Pearl, y tomé el control antes de que Angus lo hiciera por que de todos modos Nigella Lawson con su especial navideño se había terminado. Sospechaba que estaban a nada de poner algo de horror, y si por mi hubiera sido le shubiera puesto a ver Naked Lunch, pero estábamos por comer y esa no era la mejor de las ideas. Era curioso, pero no me sentía distinto a las veces en que Pearl iba y hacíamos exactamente lo mismo, tal vez la mejor parte de estar con ella, que a pesar de todo, era demasiado natural estar con ella, simple. Aunque tuviéramos que resolver un montón de cosas que nada tenían que ver con algo simple.
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Pues a decir verdad, sí la estaba poniendo de nervios que Angus y Aquila estuvieran encerrados en la habitación aunque sabía que era obvio que hablaran de la situación y que no hicieran una escena enfrente de ellos y tal. Le dio risa que Malik se desperezara como gato y también que Angus pretendiera estar normal hurgando en los sillones en busca de comida por ese juego rarísimo que tenía con Malik del rally de los alimentos chatarra. No estaba anotando la receta de las tartas –no tenía donde- pero sí tenía intenciones de cumplirle el capricho porque le gustaba hacer esa clase de cosas ridículas. Igual podría conseguirse un libro o algo así.
También las cosas parecían de pronto normales, y no se sentía diferente a las veces que había estado ahí antes. Lo único que cambió fue la mirada que le lanzó a Aquila entre el “ooops” y el “al final parece que sí era algo” luego de que con un helado de koalas furiosos hubiera jurado que no era nada. Lo que más le importaba encontrar en su mirada era que no estuviera pensando que era la peor de las amigas, destructora de hogares y esas cosas. Sabía que Joe no era nada de su agrado pero Milena era caso aparte, incluso para la propia Pearlie.
Y mientras Malik estaba de pie, ella no hizo más que sonreírle a la semiveela y llamarla a su lado con un gesto como para cerciorarse de que no le iba a voltear la cara, aunque suponía que si hubiera tenido ganas de eso, Angus no hubiera salido hablando de comida otra vez en primer lugar, ni ofreciendo cuatro vasos para tomar vodka solo.
Se tuvo que reír de sus tragos de macho, ella no se sentía para nada lista para tomar vodka solo así nada más, así que para llevársela con calma, también se hizo por fin de una de las cervezas primero.
-Pero…¿no tienes con qué acompañar esto? Porque si hago lo que ustedes voy a acabar mal rapidísimo. Una cerveza primero, por lo menos.
Y de la comida tuvo que votar por la turca, en primer lugar porque nunca la había probado y en segundo porque le gustaba como sonaba Ocaskbasi, más que Bundu Khan, y así se dejaba llevar por cuestiones fonéticas idiotas para saber qué comer. Sonrió a Malik cuando lo tuvo de vuelta en el sillón y lo besó en la mejilla con la botella de cerveza en ambas manos, ya no estaban completamente frías así que no les caería mal un glacius…o que las metieran al refrigerador, que era lo mismo. Le puso la botella en el dorso de la mano como para que se diera cuenta de que necesitaban tratamiento.
-¿Hoy también vamos a ver terror?
La pregunta era para Aquila, y no sonaba emocionada, pero ya había aprendido a tragarse esas cosas horribles que al lobo y a ella les gustaba ver.
También las cosas parecían de pronto normales, y no se sentía diferente a las veces que había estado ahí antes. Lo único que cambió fue la mirada que le lanzó a Aquila entre el “ooops” y el “al final parece que sí era algo” luego de que con un helado de koalas furiosos hubiera jurado que no era nada. Lo que más le importaba encontrar en su mirada era que no estuviera pensando que era la peor de las amigas, destructora de hogares y esas cosas. Sabía que Joe no era nada de su agrado pero Milena era caso aparte, incluso para la propia Pearlie.
Y mientras Malik estaba de pie, ella no hizo más que sonreírle a la semiveela y llamarla a su lado con un gesto como para cerciorarse de que no le iba a voltear la cara, aunque suponía que si hubiera tenido ganas de eso, Angus no hubiera salido hablando de comida otra vez en primer lugar, ni ofreciendo cuatro vasos para tomar vodka solo.
Se tuvo que reír de sus tragos de macho, ella no se sentía para nada lista para tomar vodka solo así nada más, así que para llevársela con calma, también se hizo por fin de una de las cervezas primero.
-Pero…¿no tienes con qué acompañar esto? Porque si hago lo que ustedes voy a acabar mal rapidísimo. Una cerveza primero, por lo menos.
Y de la comida tuvo que votar por la turca, en primer lugar porque nunca la había probado y en segundo porque le gustaba como sonaba Ocaskbasi, más que Bundu Khan, y así se dejaba llevar por cuestiones fonéticas idiotas para saber qué comer. Sonrió a Malik cuando lo tuvo de vuelta en el sillón y lo besó en la mejilla con la botella de cerveza en ambas manos, ya no estaban completamente frías así que no les caería mal un glacius…o que las metieran al refrigerador, que era lo mismo. Le puso la botella en el dorso de la mano como para que se diera cuenta de que necesitaban tratamiento.
-¿Hoy también vamos a ver terror?
La pregunta era para Aquila, y no sonaba emocionada, pero ya había aprendido a tragarse esas cosas horribles que al lobo y a ella les gustaba ver.
Pearlie F. Burroughs- Mensajes : 638
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Re: Una vez más
Por su parte, pensaba seguido que no era ni por asomo la persona más tolerante con sus amigos, por que tampoco se había convertido en una persona abierta y amable de un día para otro y sus esfuerzos eran casi pura hipocresía, y eso no le gustaba mucho. Había momentos en los que no sabía si era peor tolerar siendo una buena actriz o no fingir demasiado que se volvía loca de gusto al verlos y ser más honesta. En ninguno de los casos iba a quedar bien ante ellos, así que optaba por lo segundo. Le gustó que sintiera la necesidad de salir de ahí de su mano, hasta que se puso a hacer lo suyo sirviendo el vodka.
Le daba bastante lo mismo qué elegirían para comer por que se había dado cuenta que ninguna cosa le parecía incomible, aunque picara como algunas cosas tailandesas o mexicanas. Algunos dulces de Honeydukes también picaban, pero no los comía desde los doce años. Y además tenía muchas cosas en qué pensar más que en caramelos picantes que no había vuelto a probar ni nada así, siendo que Pearlie estaba ahí con esa expresión demasiado sutil de estar esperando a que la juzgara. No participó en la discusión sobre la comida y vació su vaso igual que Angus aunque hizo ruido de sentir el ardor en la garganta después del alcohol fuerte y hasta manoteó un poco, antes de ir hasta donde Pearlie y empujarla para sentarse al otro lado suyo, dándole un abrazo fraternal y apretando la cabeza contra la suya en un gesto cariñoso de esos exagerados que hacía con la gente a la que de verdad quería.
Por supuesto que no iba a elegir entre ella y Milena, pero en definitiva no iba a ponerse del lado de ninguna ni mucho menos dejar a Pearlie sólo por pensar si estaba bien o mal lo que hacía. Ella pudo haber dicho todo sobre lo que había ella misma hecho con Angus estando comprometida pero sólo la había apoyado, así que sería lo mismo que ella le daría. Hasta le dio un beso en la mejilla antes de agarrar el papel de la comida turca sin saber mucho de los nombres.
-Elige por mi, lobo, anda, como los maridos de antes. Y sí, vamos a ver terror, Angus me prometió una buenísima llamada Suspiria. Es de una chica que llega a una academia de brujas, pero no como Beauxbatons ¿Verdad lobo? Cuéntale
Sacó el chocolate blanco de la bolsa donde se había quedado con la varita y lo partió por la mitad, dándole el otro trozo a Pearl, dejando en claro que ese iba a ser el capricho de las niñas exclusivamente.
Le daba bastante lo mismo qué elegirían para comer por que se había dado cuenta que ninguna cosa le parecía incomible, aunque picara como algunas cosas tailandesas o mexicanas. Algunos dulces de Honeydukes también picaban, pero no los comía desde los doce años. Y además tenía muchas cosas en qué pensar más que en caramelos picantes que no había vuelto a probar ni nada así, siendo que Pearlie estaba ahí con esa expresión demasiado sutil de estar esperando a que la juzgara. No participó en la discusión sobre la comida y vació su vaso igual que Angus aunque hizo ruido de sentir el ardor en la garganta después del alcohol fuerte y hasta manoteó un poco, antes de ir hasta donde Pearlie y empujarla para sentarse al otro lado suyo, dándole un abrazo fraternal y apretando la cabeza contra la suya en un gesto cariñoso de esos exagerados que hacía con la gente a la que de verdad quería.
Por supuesto que no iba a elegir entre ella y Milena, pero en definitiva no iba a ponerse del lado de ninguna ni mucho menos dejar a Pearlie sólo por pensar si estaba bien o mal lo que hacía. Ella pudo haber dicho todo sobre lo que había ella misma hecho con Angus estando comprometida pero sólo la había apoyado, así que sería lo mismo que ella le daría. Hasta le dio un beso en la mejilla antes de agarrar el papel de la comida turca sin saber mucho de los nombres.
-Elige por mi, lobo, anda, como los maridos de antes. Y sí, vamos a ver terror, Angus me prometió una buenísima llamada Suspiria. Es de una chica que llega a una academia de brujas, pero no como Beauxbatons ¿Verdad lobo? Cuéntale
Sacó el chocolate blanco de la bolsa donde se había quedado con la varita y lo partió por la mitad, dándole el otro trozo a Pearl, dejando en claro que ese iba a ser el capricho de las niñas exclusivamente.
Aquila Lillyvick- Mensajes : 250
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: Una vez más
Angus tenía que empezar a pensar en nuevos escondites para la comida que pudieran pasársele por la cabeza a Karim, últimamente Aquila encontraba más premios que él y ni siquiera jugaba oficialmente porque ella no escondía nada, solo se aprovechaba de ellos. Se sirvió más vodka y se sentó en una esquina del sillón, al lado de Aquila que a su vez estaba al lado de Pearl, que estaba al lado de Karim, como esa vez que habían visto el Exorcista. Le tranquilizaba ver las muestras de afecto de Aquila para con su amiga, porque le daba más valor para que ese asunto no se convirtiera para Angus en la desgracia del siglo, aunque siguiera pensando que tendría que hablar con Joseph para asegurarse y cumplir su papel de buen amigo con las dos partes.
-Hey! ¿cerveza? No no no, tienes que tomar vodka, no me hagas proponerte un juego de ajedrez con shots para que lo hagas.-Eso se lo dijo a Pearl, sirviéndole en el vaso restante y pasándoselo para que lo combinara con el chocolate si quería. No era su intención emborrachar a nadie esa tarde, además él tenía que ir a recoger a los perretes porque seguro Peach no querría hacerle el favor de cuidarlos ese día, pero sabía que el alcohol servía bien para alivianar las tensiones sociales que pudieran existir, y aunque al parecer él era ahí el más tenso, porque Karim parecía impedido para ese tipo de incomodidades, necesitaba poner a todos a tono con esa ligereza.
-Que se lo tome, dile.-Le dijo a Karim precisamente señalando el vaso de Pearl y haciéndose hacia atrás en el sillón para besar a Aquila desordenadamente en cualquier parte de su cabeza. Para ellos podía ser igual estar ahí que en cualquier otra ocasión, hablando de películas y ordenando comida, pero para Angus las diferencias eran marcadas. Más alcohol, más vodka, para irse acostumbrando. Lo que hizo fue tomar otro trago y servirle más a todos, aunque así dejara ver que parecía estar mucho más nervioso y confundido que la recién formada pareja o lo que fueran.
-Suspiria, seguramente esta sí te gusta, ¿no, Karim?. Ah y turca está bien la comida. Escucha, brujería en una academia de danza, es lo mejor que te puedo ofrecer, y sangre, que es lo mío, en grandes cantidades. Te juro que te va a gustar, si no te gusta me como mi puño.-Tenía muchas preguntas personales que hacerles, pero todas le podrían ganar un codazo de parte de Aquila y no quería hacerle enojar para que le repitiera que no era su asunto.
-Hey! ¿cerveza? No no no, tienes que tomar vodka, no me hagas proponerte un juego de ajedrez con shots para que lo hagas.-Eso se lo dijo a Pearl, sirviéndole en el vaso restante y pasándoselo para que lo combinara con el chocolate si quería. No era su intención emborrachar a nadie esa tarde, además él tenía que ir a recoger a los perretes porque seguro Peach no querría hacerle el favor de cuidarlos ese día, pero sabía que el alcohol servía bien para alivianar las tensiones sociales que pudieran existir, y aunque al parecer él era ahí el más tenso, porque Karim parecía impedido para ese tipo de incomodidades, necesitaba poner a todos a tono con esa ligereza.
-Que se lo tome, dile.-Le dijo a Karim precisamente señalando el vaso de Pearl y haciéndose hacia atrás en el sillón para besar a Aquila desordenadamente en cualquier parte de su cabeza. Para ellos podía ser igual estar ahí que en cualquier otra ocasión, hablando de películas y ordenando comida, pero para Angus las diferencias eran marcadas. Más alcohol, más vodka, para irse acostumbrando. Lo que hizo fue tomar otro trago y servirle más a todos, aunque así dejara ver que parecía estar mucho más nervioso y confundido que la recién formada pareja o lo que fueran.
-Suspiria, seguramente esta sí te gusta, ¿no, Karim?. Ah y turca está bien la comida. Escucha, brujería en una academia de danza, es lo mejor que te puedo ofrecer, y sangre, que es lo mío, en grandes cantidades. Te juro que te va a gustar, si no te gusta me como mi puño.-Tenía muchas preguntas personales que hacerles, pero todas le podrían ganar un codazo de parte de Aquila y no quería hacerle enojar para que le repitiera que no era su asunto.
Angus Finnerty- Mensajes : 258
Fecha de inscripción : 08/09/2012
Re: Una vez más
Estaba siendo algo ridículo, al menos en mi mente, por que encontraba adorable todo lo que Pearl hacía y decía y ese no puedo quitarte las manos de encima empezaba a trascender la idea de desnudarla y comérmela entera, se iba también a la de estar tonteando, tomándole la mano, besando su cabello y mirándola como un idiota enamorado, por que eso era aunque finalmente mi personalidad no fuera de andar demostrando cosas con mucha claridad. Así que en mi caso todo era sonreír a medias y mirarla como disimulando, como si no lo tuviera permitido, se me había quedado la costumbre.
Elegí varias cosas de la lista, le recomendé algunas cosas a Pearl señalando en el menú mis favoritos. Sólo negué con la cabeza cuando Angus y Aquila se ponían a hablar de sus películas de horror, las que yo jamás había aprendido a valorar por que me parecían repletas de lugares comunes y otra infinidad de detalles que siempre me parecían predecibles, quizás a excepción del Exorcista, así que me abstuve de decir si me iba a gustar o no la película por que lo más seguro es que no, pero tampoco iba a decirlo por que mi política era nunca opinar sobre algo que no había visto. Aún así, me daba la impresión de que Angus lo que quería preguntar era algo que no tenía que ver con el horror, y no iba a torturarlo aunque se hubiera echado tres vodkas al hilo. Después de hacer el pedido por teléfono de comida turca, volví, serví otros vasos y los miré directamente, más al lobo que a su mujer.
-Bien, esto es raro, todos aquí lo sabemos. No fue la mejor manera en que pudimos darnos cuenta, pero no quiero estar con nadie más que con Pearl, y esconderlo sería lo peor que podría hacer si ya... bueno, si ya hicimos tanto desastre alrededor. No quiero que piensen que me atrevo a demostrarlo pero no a decírselo a la cara
Me tomé mi vaso de golpe. Ya sabía que era una cosa difícil de tratar pero tenía los huevos para hacerlo así como los había tenido para saber, y saber muy bien, que había estado follándome a la chica de Joe, y la verdad, la peor parte no era lo que habíamos hecho en mi habitación de Hounslow ni en casa de sus abuelos, por que la cosa iba desde antes. Desde las películas y desde todo, ese follar intelectualmente que a nadie le preocupaba había sido, desde siempre, la principal complicación.
Por supuesto que serví otro vaso y me lo tomé, yo también necesitaba alcohol para sobrellevarlo por más seguro que estuviera de quererla y querer estar con ella, sin importar lo políticamente incorrecto que fuera. Le di un rápido beso en la mejilla queriendo jurar que quería decir que me dolía en el alma haber fastidiado a Milena, o fastidiarla cuando hablara con ella, y a Joe y esa confianza que nos teníamos desde hacía años. Pocas veces había tomado riesgos así, quería pensar que era por algo más intenso que un capricho o un estar enchochado. De verdad quería creerlo, y lo creía, me bastaba con sentir la cercanía de Pearl a mi lado.
-Perdón por todo esto, será jodido... pero qué puedo decir ¿Que te amo?
Con esa pregunta por supuesto que la miré, me reí un poco y bajé la vista.
Elegí varias cosas de la lista, le recomendé algunas cosas a Pearl señalando en el menú mis favoritos. Sólo negué con la cabeza cuando Angus y Aquila se ponían a hablar de sus películas de horror, las que yo jamás había aprendido a valorar por que me parecían repletas de lugares comunes y otra infinidad de detalles que siempre me parecían predecibles, quizás a excepción del Exorcista, así que me abstuve de decir si me iba a gustar o no la película por que lo más seguro es que no, pero tampoco iba a decirlo por que mi política era nunca opinar sobre algo que no había visto. Aún así, me daba la impresión de que Angus lo que quería preguntar era algo que no tenía que ver con el horror, y no iba a torturarlo aunque se hubiera echado tres vodkas al hilo. Después de hacer el pedido por teléfono de comida turca, volví, serví otros vasos y los miré directamente, más al lobo que a su mujer.
-Bien, esto es raro, todos aquí lo sabemos. No fue la mejor manera en que pudimos darnos cuenta, pero no quiero estar con nadie más que con Pearl, y esconderlo sería lo peor que podría hacer si ya... bueno, si ya hicimos tanto desastre alrededor. No quiero que piensen que me atrevo a demostrarlo pero no a decírselo a la cara
Me tomé mi vaso de golpe. Ya sabía que era una cosa difícil de tratar pero tenía los huevos para hacerlo así como los había tenido para saber, y saber muy bien, que había estado follándome a la chica de Joe, y la verdad, la peor parte no era lo que habíamos hecho en mi habitación de Hounslow ni en casa de sus abuelos, por que la cosa iba desde antes. Desde las películas y desde todo, ese follar intelectualmente que a nadie le preocupaba había sido, desde siempre, la principal complicación.
Por supuesto que serví otro vaso y me lo tomé, yo también necesitaba alcohol para sobrellevarlo por más seguro que estuviera de quererla y querer estar con ella, sin importar lo políticamente incorrecto que fuera. Le di un rápido beso en la mejilla queriendo jurar que quería decir que me dolía en el alma haber fastidiado a Milena, o fastidiarla cuando hablara con ella, y a Joe y esa confianza que nos teníamos desde hacía años. Pocas veces había tomado riesgos así, quería pensar que era por algo más intenso que un capricho o un estar enchochado. De verdad quería creerlo, y lo creía, me bastaba con sentir la cercanía de Pearl a mi lado.
-Perdón por todo esto, será jodido... pero qué puedo decir ¿Que te amo?
Con esa pregunta por supuesto que la miré, me reí un poco y bajé la vista.
Karim Malik- Mensajes : 257
Fecha de inscripción : 10/09/2012
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