Biografía Julia McCreary

por **Julia McCreary** Miér Sep 12, 2012 4:46 pm

Julia Elinore McCreary nació un 26 de Noviembre en Edimburgo, Escocia. Hija de Arthur McCreary, médico cirujano, y de Beatrice Collins, una bruja experta en transformaciones que ha dedicado toda su vida a la enseñanza de dicha materia en Durmstrang. Creció bajo las normas de convivencia tanto muggles como mágicas debido a su condición de mestiza y, por lo tanto, se le crió con la enseñanza de que la sangre no tiene nada que ver con las personas, sino más bien las intenciones y diversos ideales que ellos mismos se creaban desde su juventud.

Demostrando sus dotes e inteligencia desde muy temprana edad, ella siempre quiso ser sanadora, igual que su padre y sabía que en algún futuro tendría la oportunidad de serlo. A los once años ingresó a Hogwarts y perteneció a la casa de Rowena Ravenclaw, y siempre le demostró a cualquier persona el por qué el sombrero había decidido ponerla donde la había puesto.

Nunca gustó del Quidditch. En realidad le parecía aburrido. Prefería tener un buen partido de ajedrez o mantenerse alejada de los problemas leyendo un buen libro de lo que fuera que tuviera a la mano o adelantando los deberes que tenía para las siguientes clases. Siempre fue muy responsable y su sed de conocimiento excesivo quizás fue el detonante para hacerla intentar hacer más de una sola cosa a la vez. Lamentablemente para ella no siempre podía hacer todo a la vez por lo que comenzó a ponerse límites y hacer poco a poco todo lo que tenía en una pequeña lista que aún conserva y que siempre lleva consigo, recordándole dónde ha estado y de donde ha venido.

Fue prefecta, lo que no fue ninguna sorpresa para nadie y desempeñaba bastante bien su puesto. Nunca fue una persona que se caracterizara por tener una horda interminable de amigos. Tenía pocos, pero esos pocos amigos, aún siguen frecuentándola y siempre eran quienes mejor la comprendían de todos los demás. Nunca fue muy noviera. Quizás tuvo un par de novios durante su estadía en Hogwarts y ya, pero tal vez ninguno de ellos acudió al Colegio y corrían los rumores que salía con un muggle por mucho tiempo.

En su tiempo libre y en vacaciones de invierno y verano, su madre comenzó a enseñarle más y más sobre las transformaciones compartiéndole su pasión por las mismas. Desde ahí, a Julia se le metió en la cabeza que quería ser animaga y quería convertirse en un un búho (enano): El símbolo de la sabiduría.

Siempre fue una niña prodigio en los estudios y sus padres no se preocupaban por todas las cosas que quería hacer antes de graduarse porque muchas veces les demostró que no era imposible lograrlo. Y de esa forma, se había convertido en Animaga antes de terminar Hogwarts. Se graduó con honores, primera de su generación. Inmediatamente después ingresó a Brigantia, estudiando simultáneamente Herbología y Medimagia, complementando una con la otra.

Por un tiempo, el estrés de combinar ambas carreras pudo más que ella y decidió posponer un poco Herbología para enfocarse de lleno a la Medicina hasta terminar su residencia. Se especializó en Heridas provocadas por hechizos y también tiene una pasión desmedida por la cirugíaa, así como su padre, quien le inculcó el amor por esa ciencia como por ninguna otra. Se graduó con honores y ahora era tiempo de empezar en San Mungo.

Cuando recién empezaba la residencia, su padre murió de un cáncer de esófago que se le había diagnosticado un par de años antes. Julia y Arthur sabían lo que sucedería, Beatrice quedó desolada. En una carta, su padre le pidió de forma explícita que terminara la carrera de Herbología y que se siguiera esforzando como siempre lo había hecho porque sabía que ella era capaz de mucho, mucho más. Y eso fue lo que hizo. Terminó Herbología, aunque esta vez no se graduó con honores pero terminó casi con excelencia su segunda carrera.

Le otorgaron el puesto de profesora en Brigantia bastantes años después de haberlo solicitado recién egresada de la carrera. Combinaba el profesorado con su trabajo en el Hospital y acudía a orfanatos a hacer diagnósticos y brindarles atención médica gratuita a gente de escasos recursos y niños que no tenían de donde sacar el dinero para pagar una consulta en un hospital.

Desde siempre inculcó una conducta disciplinaria a todos sus alumnos por igual. Una bastante estricta porque creía que era parte de una buena educación. Era aún más dura con sus alumnos de carrera y quienes acudían a su clase. Disciplina que a ella le ha ayudado en su estricto camino por la educación propia y de los demás.

Un par de años después de empezar con la docencia, el decano Catherwood fue internado en el ala de psiquiatría en San Mungo después de perder por completo la razón. Julia lo había llegado a considerar como un segundo padre después de enseñarle todo lo que aprendió en la carrera; iba a visitarlo periódicamente y le pesó mucho cuando falleció en su triste habitación con paredes acolchadas en San Mungo, completamente solo.

Sigfuió su docencia por unos cuantos años más. Su vida social se había convertido de muy escasa a completamente inexistente. Y ya no hablemos de su vida amorosa, pues en realidad no tiene el tiempo para llevar clases, llevar el hospital y además mantener una relación que la absorbe casi por completo. Sin embargo, no descarta la idea de algún día casarse y formar una familia y tener sus propios hijos.

Actualmente, acaba de ser ascendida y se ha convertido en la más nueva Decana de Brigantia. Le ofrecieron la tutoría de la facultad Cerridwen ya que Ogmios estaba tomada por Gerhard Immëndorff y prefirió quedarse con las humanidades que con el Quidditch. Al ser tan joven, existe cierto recelo entre los magos más experimentados y mayores que ella porque a fin de cuentas para ellos, Julia aún es una niña en cuestión experiencia. Sin embargo, su desempeño como profesora y como sanadora habla por si solo. Es por eso que recibió esa oportunidad, y como siempre, planea sacarle el mayor provecho académica y profesionalmente hablando.