Re: Hoy es un día especial

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 9:16 am

Después de haber guardado el vestido y el sostén, indicó a Adnan en donde podía dejar su ropa. Cuando eso ya estuvo listo, la coreana le sonrió un poquito y se quedó viendo como se metía en la cama.

Park se rió y se acercó despacito hacia él, asintiendo un poquito con la cabeza en el momento que vio como daba un par de toquecitos a su lado instándola, invitándola a que fuera con él, que aceleró un poquito el paso y no tardó nada en estar en la cama junto a Yesenes, achuchándole con fuerza, suspirando un poquito, sintiendo como su novio correspondía a aquél gesto y también la abrazaba a ella con fuerza.

Sentía el cálido cuerpo de Adnan contra el propio, y permaneció tal cual, dejándose pegar contra el cuerpo de él, con los ojos cerrados.
Se estremeció un poquito al sentir como susurraba a su oído, pero en el momento en el que escuchó lo que decía, se sonrojó un poco y se separó lo justo para poder mirarle a los ojos. Se mordió un poquito la boca y después asintió con la cabeza.

Se quitó del lado de Adnan, después de hacer que le soltase del amarre de la cintura, y le sonrió antes de ponerse sobre él de forma un tanto descuidada, prácticamente quedándose tumbada sobre el cuerpo de él. - Quiero los besos... quiero que estemos besándonos... - Susurró contra los labios del egipcio, mirando sus claros ojos antes de cerrarlos para ella misma unir los labios de ambos en un principio, iniciando un suave y tierno besito.

- Pero... si no quieres eso, podemos hacer lo que tú quieras, lo que sea estará bien. - Le dijo con una sonrisita cálida, acariciándole de paso la mejilla con mimo, terminando por llevar esa misma mano a su cuello, acariciándolo con la yema de los dedos.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 9:46 am

La dejaría a ella escoger si realmente quería hacer algo o no, como ya le había dicho. No la pensaba forzar, ni en ese ni en ningún otro momento. Pero ella había asentido y además se removió un poco, terminando sobre él, preciosa, pidiéndole besos, era como la mejor petición que podían hacerle. La beso por primera vez en cuanto notó sus labios susurrar contra los propios pero ni contó, fue un beso muy superficial, muy poco beso, pero ella le dio otro y ya si fue mejor.

-Este beso va de regalo, aún no cuenta – dijo aquello musitándolo, y a la vez replicando a las siguientes palabras de ella, claro que quería besarla, siempre quería, no haría otra cosa que no fuera darle todos los besos del mundo en un instante - boba, claro que quiero besarte, durante toda la noche, a poder ser.

La achuchó un poco, teniéndola sobre él, acariciaba su espalda sobre la camiseta, por él la habría levantado para sobarla directamente, pero no podía, ella pensaría que intentaba simplemente sobarla sin más.
Él en entonces se tomó la confianza de empezar a devolverle la deuda. Le dio un beso, cálido, suave.

-Uno… – musitó contra sus labios al finalizarlo, una de sus manos estaba entonces en la nuca de la chica para evitar que esta se fuera a ninguna parte - dos… – lo dijo justo antes de volver a pegar sus labios a los de ella, con un beso algo más largo y atento que el anterior, finalizó el beso tirando ligeramente del labio de la chica y entonces, la mano que no estaba en su nuca se removió espalda abajo hasta quedar muy cerca del trasero de ella, buscando la sábana para taparla y así poder actuar mejor - tres – susurró cortando el beso un poco y esta vez, intentando colar la lengua dentro de la boca de ella. La tontería de ir contándolos le hacía gracia y por eso lo hacía, sin más, en realidad sabía que la besaría unas mil veces más que las prometías.

La mano que intentaba taparla en ese momento había ido a parar al trasero de ella, y notándolo casi descubierto (sobando un poco de paso) se puso un poco nervioso y abrió los ojos.

-Me perdí en la cuenta, Rang… empiezo de nuevo, pero antes deja que te cubra, no quiero que cojas frío.

Le dio otro beso suave e incorporó muy poco, lo justo para llegar a la sábana, tapar a la chica y mirarla a los ojos fijamente antes de volver a hablar.

-¿Por donde íbamos…? Supongo que por el primero - sonrió ladeado y volvió a unir sus labios a los de su novia.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 10:13 am

Se rió un poquito tras escuchar lo que dijo de aquél primer beso, asintiendo un poco con la cabeza de paso. Le parecía bien, por supuesto, ¿cómo iba a quejarse de que fuesen a estar besándose mucho? ¡Nunca lo haría! Le gustaban los besos de su novio, para algo era su novio, jolín, y no se iba a quejar.

Suspiró un poquito atontada y le mordió un poquito el labio inferior al egipcio para tirar un poco de él, después riendo un poquito de forma traviesa. - Entonces besémonos durante toda la noche, Adny... por mi está más que bien. - Susurró contra su boca, calcando su aliento sobre los labios de él.

Correspondió al abrazo y no tardó en empezar a escuchar aquella cuenta atrás que iba haciendo que los besos que iban a darse disminuyesen poco a poco en cantidad. Se reía un poquito tras corresponder al gesto, al escuchar como el mismo Adnan iba enumerándolos como si fuese algo realmente necesario a contar.
Notó el suave tironcito que le dio el chico del labio y suspiró contra su boca, casi jadeando, mirándole con los ojos entrecerrados. Cerró los mismos, notando como sus mejillas habían adquirido un tono ligeramente rosadito, sonrojada, notando también la mano del chico que, a pesar de llevar la sudadera, podía sentir la calidez que manaba de él.

Cuando el beso se cortó la chica se quejó un poquito, y sintió como Yesenes lamía sus labios, terminando ella misma por acoger la lengua del contrario en su oquedad para besarle de forma algo más profunda que los anteriores besos.

Demasiado centrada en besarle ni siquiera le dio importancia a donde tenía Yesenes la mano, sin darse cuenta de que la sudadera se le había subido un poco por la posición y que apenas lo que su chico había estado sobando, era su trasero apenas cubierto por la braguita.
Rió al escucharle decir que se había perdido, y ella simplemente se encogió de hombros.

Sintió los movimientos de él, acabando por sentirse cubierta por la sabana, haciéndole suspirar y volver a acomodarse un poquito sobre el cuerpo de él, igual que antes, mas o menos.

Con la nueva pregunta ella sonrió y asintió. - Si, por el primero... - Susurró prácticamente contra su boca antes de corresponder al beso que él había empezado, suspirando en su boca, volviendo a distraerse, a perderse en la boca de su chico.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 10:35 am

Los besos se iban sucediendo de modo que el egipcio disfrutaba de aquello como recompensa por la noche. Había pasado varias semanas pensando que hacer con ella, incluso había reservado con mucho tiempo de antelación el sitio donde cenaron. Él había pensado en ese día como el día que los uniría aún más, porque ahora, por lo menos, sabía que Young tendría una escusa menos para matarlo si se enteraba de que estaba saliendo con ella.

Aún cuando la había dejado totalmente tapada él estaba feliz, sus manos estaban bajo las sábanas y su pareja no se había empezado a quejar aún del sobeteo feliz y constante que sus manos estaban regalándole a su cuerpo. Eso era buena señal, si no le incomodaba él no tendría que parar y eso era otra forma de sentirse pagado por esa celebración especial.
Siguieron besándose por un rato más, él la acariciaba por el rostro, suave y dulcemente, bajaba por su cuello, y acariciaba su espalda y traseros, incluso un poco las piernas, en una de esas veces.

Ya había dejado la tontería de contar los besos, y cuando se sintió medianamente satisfecho cogió a la chica por la cintura y la tumbó en la cama bocarriba, siendo ahora él quien estaba situado encima de ella. La miró divertido y comenzó a besarla de nuevo, pero bueno, a él los besos ya le sabían a poco, llevaba un rato sintiendo malestar en la entrepierna, y decía malestar porque con el peso de ella encima poco podía hacer para sentirse mejor, por no decir nada, y por ello había cambiado de postura.
Pensando en eso e intentando aprovechar la ocasión para hacer un poco más (nunca se sabía cuando iban a estar realmente solos de nuevo) bajó sus labios al cuello de la chica y comenzó a besarla ahí, calando su aliento en el mismo, lamiéndolo un poco, incluso mordiendo suavemente, jadeó contra su oído antes de hablar en susurros.

- ¿Quieres que siga besándote así? – le dijo aquello por si le era agradable o no, si decía que sí, no se conformaría con el cuello, la besaría por todas las partes de su cuerpo que ella permitiera, tan solo esperaba algún tipo de permiso.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 10:56 am

Se removía un poquito con según que caricia, con según que gesto hacía el egipcio. Suspiró un poco y se mordió la boquita en el momento en que el chico le giró y cambaron posiciones. Park se quedó mirándole fijamente a los ojos con los propios entrecerrados, y acabó por desviar un momentito la mirada, nerviosa.

No tenía ninguna razón de por que estar nerviosa, o no al menos hasta que sintió como los besos de Yesenes se habían desplazado hasta el punto de estar jugueteando los mismos en su cuello. Dando alguna que otra lamida, besos suaves, y sintiendo incluso algún bocado. Se mordió al boca y negó un poquito con la cabeza, notando como el vello del cuerpo se le erizaba. Jadeó y con las mejillas sonrojadas sintió las palabras de su novio en el oído, volviendo a conseguir que se estremeciera.

Abrió un poquito los ojos, ahora algo más sonrojada que antes, y miró de soslayo a Yesenes, notándose ella misma como su respiración se había acelerado un poquito, se había alterado por aquél juego nuevo que hizo el chico.

- N-no sé... - Susurró, tartamudeando incluso, mirándole de reojo, sonrojada. Aquello había conseguido incluso que el calor de su cuerpo ascendiese, que se pusiese más nerviosa que incluso con lo que habían sido solo los besos de antes... - Es... es raro... - Musitó poniendo morritos y girando el rostro, dejando la vista desviada de paso también hacia el frente de donde había quedado mirando.
Cerró los ojos con fuerza y se mordió la boca antes de abrazar al egipcio con fuerza, habiéndolo pensado apenas un poquito.
- Está bien... - Decidiendo que aquello no le había desagradado.

Suspiró un poquito tratando de dejar de estar nerviosa y buscó los labios de él tras girar el rostro para buscar a ciegas la cara de él, besándole un momentito intensamente, después separándose con un suave suspirito.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 11:34 am

La duda tan solo indicaba que aquello iba bien, lo primero que dijo era solamente que no sabía qué hacer, si seguir o no. Quizás había logrado tentarla un poco, hacerla estremecer de cierta forma, era agradable saber que ella reaccionaba así ante él, ante sus caricias y demás, estaba claro que si hacía aquello era porque le gustaba, no había muchos más motivos por los cuales reaccionar así ante otra persona.
Además su cara, en casi toda su extensión, estaba coloreada de un rojo vivo, parecía que además de la inquietud le había dado calor… en otras palabras, había logrado calentarla con tan solo un gesto como aquel, un gesto básico como era juguetear con su cuello.
La observaba mientras parecía deliberar.

- Espero que no sea raro-malo.

Aquello se lo dijo bajito antes de que ella continuara y le diera permiso, por decirlo de alguna forma, y de pronto notó su abrazo y el “está bien” escueto de la chica, una forma de asegurarle que no le había molestado por más que hubo causado todo aquello en ella. la dejó besarle y además la abrazó fuertemente.

- Pues si está bien… cierra los ojos, preciosa, voy a darte otro regalo de cumpleaños más.

Esperó a que ella, totalmente avergonzara lo hiciera, cerrase los ojos y se tapara incluso un poquito la cara, entonces el chico aprovechó y sonrió, era tan tierna… bueno, ahora a lo suyo.
Con cuidado hizo que no se estuviera cubriendo los labios y le dio un suave beso en los mismos, recorriendo desde ahí un camino hasta su cuello, pasando por la barbilla. Una vez estuvo ahí repitió lo mismo que antes pero ahora bajo un poco más, hasta que sus labios rozaron la clavícula, la cual besó con mimo y cariño, e intentó bajar un poco más el cuello de la sudadera, sin mucho éxito por lo que volvió a sus labios y con las manos –ambas- subió la prenda hasta que tan solo le cubría los pechos, notando alguna quejita, pero muy rápido bajó los labios y comenzó a besarle, la tripa, la pelvis, el borde de la braguita y ahí estaba en ese momento, sin intención de parar, quería besarle hasta el último centímetro de ella y en ese momento había saltado por su prenda interior hasta besar la parte interior de su muslo.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 1:27 pm

Tragó un poquito de saliva y se mordió la boquita al escuchar sus palabras, su pregunta, por llamarlo de alguna forma, y terminó por negar un poco con la cabeza, cerrando los ojos de nuevo con fuerza, tímida. - N-no... no es malo... - Aseguró y suspiró un poco de nuevo, mirándole con los ojos entreabiertos, queriendo ver lo que haría o diría tras su aceptación a aquello.

Según escuchó aquello después de deshacer el beso frunció un poquito el ceño, abriendo los ojos de forma automática por la curiosidad. - ¿Otro... regalo de cumpleaños? - No entendió por que dijo aquello, pero hizo lo que Adnan le había pedido, precisamente por eso, por que él se lo había pedido, y cerró los ojitos, mordiéndose el labio inferior y terminando por cubrirse un poquito con ambos brazos la cara, más específicamente los ojos, pero tratando de cubrirse lo máximo el rostro completo.

Se removía un poco, con según que beso de Adnan un poco mas o menos, removiendo un poco las piernas. Apenas pudo corresponder al beso que le dio en los labios, mientras el chico después se puso a jugar con su cuello, clavícula... ella se mordía el labio inferior y suspiraba de cuando en cuando.

Notó como le subió la prenda superior y bajó apenas una mano tirando de la misma hacia abajo - aun teniendo la cara escondida bajo el otro - tratando de impedir aquello, pero escuchó como él le pedía permiso y ella simplemente terminó por ceder, poniendo la mano que había dejado de ayudar a cubrir su rostro sobre sus pechos, como queriendo indicar que ahí estaba el tope y que más no se iba a subir la sudadera.

Encogió un poco el estómago con los besos en el mismo, encorvó incluso un poquito la espalda, sin dejar de removerse, apenas haciendo que de sus labios escapase algún suspirito e incluso algún jadeo que trató de disimular mordiéndose la boquita.

Las sabanas bajo el cuerpo de ambos hacían un leve sonido con cada movimiento de ambos, en especial los movimientos del cuerpo de la coreana, que parecía no poder estarse quieta.

Cuando dejó de sentir los besos se descubrió apenas muy ligeramente el rostro para mirar a Adnan, parpadeando de forma pausada, y entonces viendo como bajaba a sus muslos, haciendo que la chica apretase un poco las piernas. - A-adnan... - Susurró con un hilito de voz, mirándole con la cara completamente colorada. - Hace... hace calor. - Hizo una especie de pucherito y se llevó ahora si, ambas manos al rostro para cubrir todo lo que sus pequeñas manos daban alcance su propio rostro.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 1:55 pm

Notaba sus movimientos y esperaba que todos fueran para bien, que sus besos le estuvieran haciendo reaccionar así, en buen grado, que no fuera a morir de vergüenza y mucho menos de incomodidad… pero como realmente no se quejaba no pensaría en ningún momento que no le estaba gustando. No podía ser negativo, no cuando todo lo que quería que pasara dependía de una manera sumamente directa de sus actos de ese momento. Si lo hacía bien quizás probara un poco más de ella de lo esperado. Si lo hacía mal… podría quedarse sin eso que tanto ansiaba tener.

El único problema que había encontrado hasta el momento fue cuando intentó llegar hasta sus pechos, llegar a besarlos por sí mismo, pero ella no se dejó, lo hizo con sutileza, sin querer incomodarla así que en cuanto notó la negativa paró y se alejó de allí dirigiéndose a otra zonas del cuerpo. A veces agarraba a la chica por la cintura, o le acariciaba los costados, las piernas. Moría de ganas de mimar a la chica y aquella era otra forma, menos convencional, pero igual de válida y que quizás les dirigiera a un punto mejor para ambos.

Ya estaba feliz, pensando que no pasaría nada porque besara sus piernas, se acercara a su sexo, pero entonces oyó la voz de ella, le llamó, le dijo que tenía calor, e hizo aquel gesto, no estaba seguro de si era una forma de decirle que se detuviera y no siguiera pero no iba a hacerlo, no ahora que estaba jodidamente caliente, tenía que ponerla aún más así ella sería la que quisiera aquello.

- Si quieres yo te quito el calor, solo déjame… – se quitó la sábana de encima y dejó el cuerpo de ella al descubierto, deleitándose de su posición, su jodida sensualidad (que ni ella sabía que tenía) su delgadez, su ropa interior… y sobre todo su rostro sonrojado (el trocito que se veía). Sonrió y llevó una mano a su entrepierna, sin su permiso ni hostias y de manera más o menos intensa comenzó a sobarla sobre la ropa interior.

Había vuelto a ponerse sobre ella, tenía una pierna entre las dos de la chica así impedía todo lo que estaba en su poder que se cerrase y su rostro muy cerca del contrario para besarla y acallarla si decía algo, por el momento tan solo la tocaría, habría ido directo a seguir besándola, pero quizás habría sido demasiado “obvio”.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 2:24 pm

Tragó saliva, esperando tras hablar, que Adnan alzase el rostro para quedarse mirándole un momentito a los ojos. Pero aquello no duró demasiado, Yesenes habló y sin poder tener ni un minuto, ni un misero segundo para responder, de golpe el egipcio había apartado la sabana dejándola expuesta, y dejándose él mismo también expuesto ante los ojos de ella.

Se tuvo que cubrir como buenamente pudo con las manos, bajándose la sudadera para cubrirse lo máximo posible, en cuanto su cuerpo respondió a las ordenes que le había mandado su cerebro.

Se tensionó, quedándose algo temblorosa en el momento en que sintió la mano de él bajar a aquella zona suya, sentirle tocar. Rang apretó los puños con la prenda entre las manos y sonrojada en demasía, alzó la vista para mirar a Yesenes, entreabriendo los labios para decir algo pero sin conseguir que en un principio, escapase ninguna palabra de entre sus labios mas que un pequeño jadeito.

Intentó cerrar las piernas pero entonces notó como entre las propias se encontraba una de las de Yesenes, impidiéndole hacer aquello, impidiendo cerrar las piernas para que dejase de hacer aquello...

Entreabrió los labios, y apenas consiguiendo decir el nombre de él, sintió como el egipcio le besaba. Subió una de las manos al pecho del chico y trató de hacer fuerza para separarle. Se había puesto completamente nerviosa de golpe, sentía como el corazón le latía de forma muy alterada y como sus pulsaciones también se habían alterado. ¿Por qué Adnan estaba haciendo aquello?
Como buenamente pudo consiguió echar la cabeza hacia atrás, queriendo así librarse del beso para hablar. - A-adnan... - Dijo con la voz un poquito rota, jadeando sin quererlo por lo que estaba haciendo su mano.

Ella seguía tratando de cerrar las piernas, estaba nerviosa y confusa, incluso se sentía temblar un poco por los mismos nervios.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 2:37 pm

La sentía avergonzada pero ya ni eso le importaba. No se había convertido en una bestia ni nada así, no haría nada que ella no quisiera hacer primero, pero para saber qué era lo que ella quería y que no quería hacer al parecer tocaría “forzarla” un poquito, lo justo para que descubriera que aquello podía ser placentero también para ella y no solo vergonzoso o malo como podrían haberle dicho desde niña. Realmente no sabía nada de su cultura, pero conociéndola ya podía anticipar que era alguien extremadamente recatada.
No sabía interpretar su mirada. No estaba seguro de si hacía realmente bien, pero no se había quejado en ningún momento, tan solo estaba… cohibida. Sabía que había intentado separarse, librarse de él, cerrar las piernas, pero estaba diciendo que no demasiado pronto, llevaban juntos ya mucho tiempo, no tenía sentido que no intentasen intimar un poco más, al menos él no le veía el sentido.

Y seguía igual, lo único que salía de la boca de ella era su nombre, no quejas, nada que le indicara que le hacía mal, o daño, y por eso se permitió el lujo de apartar un poquito la braga y tocar directamente su piel. Aquello era zona más bien desconocida, había tocado a alguna mujer antes pero no “su terreno” y se sentía torpe, lento, tenía que ponerle toda su atención y aún así, sabía que no lo estaba haciendo realmente mal pues notaba la leve humedad de la chica, signo de que le agradaba al menos físicamente hablando.

- ¿Por qué me llamas? Estoy aquí… ¿no quieres que siga? ¿Te hago daño? – paró de besarla pero no de tocarla, con cuidado, rozando lo que suponían eran los puntos más sensibles de su sexo, ansiando el momento en el que pudiera seguir… y por lo tanto adelantándolo un poco, antes de que ella pudiera hacer nada hizo presión sobre su entrada con uno de los dedos, intentado que el siguiente paso estuviera aún más cercano.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 3:03 pm

Ahogó un sonidito en el hombro del egipcio en el momento en el que sintió como aquellos roces se volvieron algo diferentes, como ya no había ninguna tela de por medio, apenas notando los dedos del chico acariciándole ahora directamente sin nada que le fuese a entorpecer. Ella por su parte, a parte de haber tratado de esconder aquél ruidito, lo único que atinaba a hacer era a removerse un poco, como tratando de librarse, y tratar de separarlo a él.

Tragó en un momentito saliva y tras suspirar consiguió finalmente volver a llamar al chico por su nombre y que este le prestase atención, o más bien, que Yesenes le diese una respuesta verbal y no solo estar siguiendo con aquellos actos que ya llevaba un ratito haciendo.

En cierto momento una de las caricias que hizo consiguió que la coreana volviese a estremecerse y apretase un poco una de las manos, la que había dejado apoyada sobre uno de los hombros de Adnan. Ya lo siguiente no consiguió hacer mas que el cuerpo de ella se tensionase al haber sentido aquella ligera intromisión, o mas bien, aquella advertencia que había dado aquél gesto realizado por Yesenes. El cuerpo de la chica impidió que él hiciese aquello que había tratado, y ella simplemente se quedó, con el rostro completamente rojo y los ojos incluso ligeramente llorosos, aún con un ligero temblor recorriéndole el cuerpo, mirándole de reojillo con los ojos entreabiertos.

- No sé... - Contestó finalmente, empezando a lloriquear un poco, removiendo las piernas y suspirando de forma entrecortada.

Aquello le resultaba extremadamente extraño, y sentir la mano de Adnan en aquella zona... no conseguía mas que hacerle sentir vergüenza, estar nerviosa... - Te amo... - Susurró alzando la mano que había dejado sobre su hombro a su cuello, pasándola a su nuca y dejándola ahí un momentito antes de enterrar los dedos en su cabello, mordiéndose el labio inferior, sin saber que hacer ni qué decir. Estaba nerviosa y asustada, era lo único que tenía realmente claro, a parte del “calor” que sentía.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 3:31 pm

Verla así le hizo no intentar forzar aquello, desde luego había notado su reacción, negativa. No quería o al menos su cuerpo no permitió en absoluto que él entrara, había notado como se cerraba del todo en el momento en el que lo intentó, primero apretó un poco más, sabía que la primera sería difícil que a ella podría dolerle, pero en el momento en el que la miró, con los ojos llorosos y esa expresión de miedo casi (si no era eso, nervios, o vete a saber) no pudo. Apartó un poco la mano, apartó también la pierna y mientras se removía dejó que se pusiera como ella había querido. Estaba nerviosa y parecía llorar ahora.

- Ya está… ya paro…

Se dejó abrazar por aquella mano tímida y dejó caer su cuerpo sobre el de ella, sintiendo su temperatura, además sudaba… la muchacha realmente parecía querer aquello y a la vez no quererlo, pero claro, nunca habían hablado de sexo, él no se atrevía a sacarle el tema, sobre todo porque no le veía del todo con pinta de que ella quisiera hablar de ello, pero ahora estaba ahí, intentando guiarla hasta el punto en el que harían eso, eso

- No importa Rang… tranquila, no ha pasado nada.

Se dejó caer a su lado, y la abrazó contra su cuerpo, por si prefería ella descansar sobre él, o por si, quizás, estuviera enfadada y quisiera tirarlo de la cama o algo, a ella le permitiría cualquier cosa, pero solo a ella, por supuesto.

- ¿Quieres dormir ya? Es tarde… y si mañana aún quieres ir a montar en hipogrifo tendremos que despertarnos temprano… o si lo prefieres podemos hablar sobre eso…

Miró a otra parte, en parte avergonzado por haber estado a punto de forzar a su chica a tener sexo con él.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 4:32 pm

En el momento en el que sintió como Yesenes apartaba la mano y la pierna, cerró en el momento las piernas, soltando el abrazo que ella misma había iniciado momentos antes y terminando girándose un poquito para quedar tumbada ligeramente ladeada, mirando al chico de reojo de paso, abrazándose incluso a si misma mientras se bajaba un poco la sudadera, desviando la mirada para no tener que mirarle a los ojos, terriblemente avergonzada, sonrojada.

Tragó un momentito saliva y suspiró, cerrando los ojos con fuerza y mordiéndose el labio inferior. Tenía que tranquilizarse, que calmarse... no podía estar así de tonta, ya no era una niña, ¿no? O al menos eso era lo que ella quería creer. Suspiró un momento de forma pesada, y tras coger una bocanada de aire, suspiró de forma entrecortada una vez mas, abriendo un poquito los ojos para encontrarse de frente con Adnan que se había tumbado a un lado, justo en ese momento lo que podría decirse, frente a ella.

Sintió como cuando intentó hablar le tembló un poco el labio inferior, y escuchó sus últimas palabras. Desvió la mirada y aún de forma tímida, con gestos tímidos, asintió un poquito con la cabeza.

Ella no era tonta, había leído muchas cosas, y aquello... no era tonta, jolín, ni era una niña, al menos cuando era necesario... no se comportaba como una niña... al menos... o aquello creía.

- No tengo sueño... - Susurró un poquito y después de dudar un momentito, dejó de abrazarse para abrazar al egipcio. - Adny... - Tragó un momento saliva y suspiró, cerrando los ojos con fuerza mientras le abrazaba y se pegaba a él por completo.

- ¿Quieres... quieres hablar? - Ella también hacía referencia a aquello, y si el egipcio decía que él si quería tratar ese tema, lo harían.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 5:06 pm

- Si no duermes más bien pronto mañana no habrá quien te despierte… ni yo tendré ganas de despertarme Rang. No podemos atrasar mucho el irnos a dormir…

No después de lo que había pasado. Aún se sentía un poco mal, pero ahora lo que tenía era el rollo cortado, ya ni modo que le apeteciera hacer nada, verla mirándole con esa cara, aquella expresión, los temblores de todo su cuerpo, no había modo de que él ahora quisiera hacer nada, ni siquiera estar despierto, se sentía como una mierda y ni podía irse de ahí para meterse un par de rayas.

- Si tu quieres hablar, deberíamos hacerlo - dijo él entrecerrando los ojos, pasándole una mano por la espalda a la chica, mimoso - supongo que… debería disculparme por haber ido tan lejos sin avisarte.

Aquel era el primer paso, no había duda de ello, él se disculpaba, ella aceptaba sus disculpas y ahí no habría pasado nada… o al menos así esperaba que fuera en realidad.

- Estuvo mal que intentara hacer ese tipo de cosas sin haberlas hablado antes contigo, pero hoy ibas tan guapa, y lo sigues estando aún con el pijama… estás siempre tan bonitas que no puedo evitar tener ganas de ciertas cosas, soy… supongo que soy como todos y tengo necesidades que rozan lo animal, por poco que me guste.

Dicho todo aquello de golpe y sin esperar bajó la mirada, bien avergonzado, tímido incluso podría decirse, no sabía si ella aceptaría ese tipo de escusas, ni tan siquiera eran escusas reales.

- Y creo que algún deberíamos de hablar sobre hacerlo, hacer ese tipo de cosas… si no te gustan no tienes más que decírmelo y yo no haré nada, nunca más. Pero necesito saberlo, quiero saber que piensas tu.

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 5:30 pm

Escuchando aquello que le dicho el egipcio en respuesta que no tenía sueño, que no quería dormir, agachó la cabeza y se mordió el labio inferior, asintiendo un poquito aunque realmente no tenía ganas, en absoluto, de dormir tal y como el le había dicho que debía de hacer, más bien, como ambos debían de hacer.

Asintió un poco después a lo que dijo, sintiendo la caricia en la espalda que le daba Yesenes y ella misma terminó por suspirar de forma pesada, mordiéndose la boquita, cerrando los ojos finalmente una vez más.

Negó un poquito con la cabeza y abrió los ojos apenas para mirarle de soslayo, aún sonrojada. - No tienes que disculparte. - Dijo segura y suspiró, removiéndose aún un poquito antes de pegarse algo más a él, escondiendo el rostro contra su pecho.
- Supongo que no son cosas de las que se hablan, menos aún premeditadamente y... bueno... no son cosas que se planean que vayan a pasar. - Se mordió un momentito la mejilla y suspiró de forma entrecortada, abrazándole con fuerza.

Alzó una de las manos para acariciar el rostro de su novio, obligarlo a que alzase el rostro de paso y le sonrió de forma tierna, acariciando su mejilla un poco con mimo, suspirando e inclinándose un poquito hacia el para besarle tiernamente en los labios. - Ya te dije lo que siento por ti Adny... y eso no va a cambiar... por mucho que... bueno. - Suspiró. Parecía que llevaba un buen rato que no hacía mas que suspirar. - Por mucho que haya pasado esto, nunca voy a dejar de sentir lo que siento por ti.

Le miró a los ojos y apoyó la frente sobre la de él, cerrando un poquito los ojos.

- Yo no sé si... este tipo de cosas “me gustan o no” como tu dices... siempre he estado centrada en los estudios, es lo único que me ha importado, sacar buenas notas, poder labrarme un buen futuro en el que tener todas las cosas necesarias... pero por suerte apareciste tú. - Sonrió. - Me sentía muchas veces sola, vacía, y trataba de refugiarme en los libros, en los estudios... por suerte Young te invitó este verano a pasarlo con nosotros...y te conocí. - Abrió los ojos para quedarse mirándole fijamente. - Tú me has dado la cosa que más valor puede tener mi vida. Y... ya te he dicho que por lo que ha pasado no voy a dejar de quererte... tendremos que experimentar juntos, probar cosas nuevas, al menos para mi. - Rió un poquito, nerviosa, con las mejillas ligeramente sonrojadas.

- Pero entiende... que estoy algo nerviosa, esto es muy nuevo para mi, y… raro también. - Y sus nervios quizás se notaban en sus palabras, haciendo que se repitiese un poco al menos.

- Así que serás tú quien tenga que enseñarme, Adnan.

por **Adnan K. Yesenes** Mar Nov 20, 2012 5:46 pm

Asintió seguro, si tenía que disculparse, pero no iba a interrumpirla, la dejó hablar sin decir nada. Realmente se sentía como que había hecho algo horrible con su novia. Algo que él no pensaba que le fuera a hacer nunca a nadie. La chica era demasiado inocente, demasiado dulce. Si, esas cosas se hablaban, se decía “estoy preparada”, “quiero hacerlo”, “quiero probar”… había mil forma sutiles de hablar de esas cosas y no ir a la tremenda. Además, ella aún era virgen (daba por hecho) y ni modo había de que ella supiera que iba a hacer desde antes, ni como, ni nada…

Para cuando levantó la mirada porque ella casi le obligó a mirarle a los ojos sintió el beso, estaba mal, jodido. Cualquier cosa estaba antes en su lista de prioridades que forzar a su pareja y casi lo había hecho, sin mucha brusquedad, cierto, pero al fin y al cabo había actuado aún sabiendo que sus movimientos y todo daban a entender que no quería follar. Joder.

- Gracias Rang, por no enfadarte mucho conmigo… tienes derecho ahora mismo a pegarme y tirarme de la cama si quieres. Incluso puedes mandarme a dormir al sofá si eso te hace sentir mejor… yo te quiero, pero no pude controlarme.

Con ella no le costaba ser sincero, decirle todas esas cosas tan claras no era tarea fácil, pero prefería ir con la verdad por delante, así todo era mucho más fácil.
Oyó sus palabras, todas, prestándole el máximo de atención posible. Sabía que ella había estado así, sola, por muchos años. Es por eso que ahora él intentaba brindarle la mayor cantidad de amor posible, darle cariño, besarla a todas horas, achucharla. Aquella chica era como todo lo que él necesitaba en el mundo, o así se sentía, porque él también había estado solo por muchos años, maltratado y herido muy profundamente… y Rang le hacía olvidarse de todo aquello.

-Haremos mil cosas nuevas… como todo lo de hoy ¿verdad? – le respondió medio sonriendo, le gustaba saber que tan solo estaba nerviosa, no se había enfadado, no había hecho nada tan malo como para que ella no quisiera volver a intentarlo -pero hoy es tu cumpleaños, creo que ya experimentamos bastantes cosas nuevas… el restaurante, la tienda de libros, la tetería. Y esto, que también fue algo más aunque no tan bueno – suspiró, no tan bueno como él pensaba hacer que fuera para ella, desde luego que no - yo te ayudaré y enseñaré todo lo que tengas que saber sobre este tema, para que podamos intimar juntos, es parte importante de ser una pareja al fin y al cabo.

Le sonrió cariñoso, dándole un beso en la frente, y bostezó, medio cansado. Había madrugado un poco y todo aquello lo estaba cansando aún más de lo que debería.

-Otro día iré mucho más despacio, y te ayudaré con los nervios… y ya verás como eso también te gusta tanto como besarme… pero por hoy ya está bien. Deberíamos dormir, a no ser que tengas alguna duda o algo de esto…

por **Park Hye Rang** Mar Nov 20, 2012 6:00 pm

Suspiró un poquito a sus palabras y negó con la cabeza, achuchándole con fuerza. - Tonto... dejalo ya, no voy a hacer que te vayas, vamos a dormir juntos... así que ni te pienses que te librarás de dormir sin que te suelte. - Se rió un poquito, tratando de que se animase. Se pasó el dorso de la mano por los ojos para limpiar las pocas lagrimas que se habían acumulado un poco en sus ojos y suspiró.

Cuando terminó de decirle las cosas asintió un poco a sus palabras, brindándole una nueva sonrisa. - Si.... - Contestó con las mejillas ligeramente sonrojadas por las palabras de él y por haber dado tan segura una respuesta como aquella.... pero era cierto, aunque le diese vergüenza decirlo, incluso solo pensarlo... si eran una pareja... tarde o temprano... Suspiró un poquito y le besó de nuevo suavemente en los labios.

Asintió tras escuchar las nuevas palabras de él. Pensaban igual al fin y al cabo sobre aquello... si eran una pareja... había cosas que tendrían que compartir tarde o temprano, y era podría decirse que era la única que no tenían desarrollada... o algo así, confianza, por parte de Rang, ella creía tenerla plenamente, y no se mentían, se querían y... esas cosas. - Si. - Acarició un poco el pecho del chico, y al estar tumbada de lado y flexionar una de las piernas, la pasó por encima de las del egipcio.

Le vio bostezar y tras escuchar de nuevo como hablaba, negño con la cabeza. - No... está bien, duerme. - Estaba diciéndole que durmiera él. Parecía cansado, lo estaba, había bostezado... y al menos mientras él dormía, ella se quedaría mirándole dormir... Tampoco era una opción tan mala, ¿no? - Pero mañana me darás los besos que aún no me diste.
Susurró contra su boca, dándole un besito. - Venga, duerme que tienes sueño... yo me quedaré mirándote. - Le dijo y se rió un poquito, aprovechando para tras coger con la pierna como pudo la sabana, cogerla con la mano para dejar a ambos cubiertos por la misma.

por **Adnan K. Yesenes** Miér Nov 21, 2012 8:38 am

Cuando ella le dio el “permiso” para dormir que él buscaba sonrió un poquito, y le dio un besito rápido, y después recibió el que ella también le daba. Apenas si oyó lo de que se iba a quedar mirándole mientras él dormía, frunció un poquito el ceño pero no tardó en caer rendido, completamente dormido, atontado.
Hacía un rato no había ni asomo de sueño en él, pero solo pensar que no iban a hacer nada (literalmente hablando) había hecho que él se cansara de pronto, dejándose llevar por el sueño profundo después de un día más bien ajetreado.

De pronto se despertó, la ventana estaba completamente cerrada y apenas si entraba una rajita de luz por el marco de la misma, indicando que ya era de día. Miró a su novia, pegada a él por completo. Al parecer sí que había pasado la noche abrazándole, pero el chico ni lo había notado siquiera. Había dormido demasiadas veces ya con Ayyûb y él tenía tendencia a pegarse mucho al mayor, ya no le molestaba.

-Rang… Rang ¿estás despierta? – sabía que no, pero se lo dijo en un susurrito, intentando que con ello se fuera espabilando un poco al menos. Si querían ir a volar con Eph tendrían que ir prontito, era sábado, hasta las seis de la tarde no haría veinticuatro horas de que habían salido del colegio. Pero quizás el vuelo se volvía largo y no era cuestión de jugarse el curso entero por una tontería como esa - Rang, vamos a volar un rato con Ephráïm, despiértate.

Se inclinó sobre ella, le dio un suave beso en la frente y la achuchó un poquito, esperando a que ella se despertara para coger su ropa y vestirse rápidamente, él no tardaría más de un minuto en ello.

por **Park Hye Rang** Miér Nov 21, 2012 8:49 am

Se quedó mirando a Adnan durante cerca de una hora. Ella no tenía sueño, y era realmente una tontería estar con los ojos cerrados sin hacer nada más que intentar dormir, así que Rang por su parte, se quedó con los ojos abiertos, mirando al egipcio dormir, hasta que ella misma terminó por quedarse totalmente dormida, sin soltar el cuerpo de su novio en en toda la noche, sino que al contrario, incluso se llegó a pegar algo más a él, pasando una pierna sobre las dos de él, quedando incluso algo montada sobre el cuerpo de Yesenes.

La voz del egipcio apenas le llegó como un susurro muy muy lejano. Por lo que ni caso hizo a su primera llamada, mas que removerse un poquito, suspirar mientras se pegaba algo a su cuerpo. Volvió a hablar, pero las palabras no tenían ningún sentido en la cabeza de la chica, simplemente era la voz de él, haciendo que ella sonriese un poquito.
Sintió el abrazo y entreabrió un poquito los ojos, también había notado el abrazo pero el gesto que más consiguió despertar a la coreana fue el achuchón que su chico le había dado.

- ¿Mh...? Que... ¿Qué pasa...? - Ladeó un poquito la cabeza mientras se frotaba con una de las manos los ojos, con estos ligeramente entreabiertos para mirarle a él.
Se movió un poco hasta quedar tumbada bocarriba, con una de las piernas ligeramente flexionadas, dejando al descubierto por completo sus piernas, y también su abdomen puesto que la sudadera se había levantado más de la cuenta por si sola.

Dio un bostecito y escuchó como el egipcio repetía aquello de que tenían que ir a volar con Ephráïm. Ella asintió un poquito y suspiró, mirando al chico a los ojos pero terminando por incorporarse, quedándose sentada en la cama un momento, con las piernas flexionadas, y acabando por abrazarlas con uno de los brazos, con el otro ocupado, frotándose los ojitos con el dorso de aquella mano correspondiente.

- ¿Me... me puedo duchar? Y luego ya si podemos ir a estar con Eph... a volar. - Ladeó de nuevo un poquito la cabeza y le sonrió de forma suave.

por **Adnan K. Yesenes** Miér Nov 21, 2012 9:08 am

Estaba preciosa mientras dormía. La sonrisa del chico era clara, más aún cuando sintió como se había montado un poquito sobre él, en esa pose adorable, con el ceñito ligeramente fruncido en sueños por ser molestada por los susurros. Aquel gesto se volvió sonrisa y él la achuchó fuerte, la quería demasiado.

La mirada del chico se deslizó por todo el cuerpo de la muchacha en cuanto se removió y quedó tan expuesta frente a él. Sentía el bulto de su entrepierna palpitar. Entre lo ocurrido a la noche, los sueños, su cuerpo tan cerca del de él, las mañanas (que son muy malas) y ahora encima aquella visión… se sentó con las piernas cruzadas y se puso la sábana por encima, intentando disimular como buenamente podía. Ni de coña iba a dejar que su novia viera aquel espectáculo, no cuando ni él mismo tenía intención de arreglarlo por el momento.

Por supuesto le dijo lo que pasaba una vez se acomodó y la miró como ella también se sentaba, asintió a sus palabras.

- Claro que te puedes duchar, no hay demasiada prisa … Solo te desperté para no tener que ir después corriendo y estar muy poquito rato con él, ni nada parecido – la sonrisa de él era amplia y dedicada a ella por entero. Le venía muy bien que se fuera a la ducha, así él se relajaría, se olvidaría por un rato del sexo y podría bajar al patio a fumarse algo, cualquier cosa le valía, incluso solamente tabaco - mientras tú te duchas yo iré al patio, si no te importa – se conocía mucho mejor la casa de corea que esa, pero también había estado ahí ya varias veces, y esperaba que en ese momento estuviera vacía para poder andar por ahí cómodamente - creo que necesito fumar un poco y mejor fuera… Además, antes de irnos también deberíamos desayunar tu tartita ¿no crees?

Se había puesto en pie, dándola la espalda a la chica y se puso los pantalones, ya con estos puestos se volvió a girar y le tendió la mano por si quería que la ayudase a levantarse.

por **Park Hye Rang** Miér Nov 21, 2012 9:19 am

Asintió un poquito con la cabeza, mirando como el chico aceptaba aquello de dejarle un ratito para ducharse, y tras bostezar cubriéndose la boquita con las manos , se miró a si misma, de forma algo distraída, aún un poquito atontada por el sueño.

Se pasó las manos por el pelo en un gesto en el que trataba al menos un poco en peinarse y le sonrió de forma tierna. - Entonces... me daré una ducha rápida y me vestiré... e iremos después a volar con Eph. - Sonrió de manera amplia, ahora ya si, un poquito mas despierta de lo que lo estuvo hacía un rato.
Vio como su novio se ponía en pie dándole la espalda y vio, de nuevo, aquellas marcas, aquellos surcos y cicatrices que cruzaban la espalda del egipcio. Ella, por mucho que él no lo pensase, ya las había visto. No le desagradaba, osea, no le repugnaba como quizás a cualquier chica le pudiese repugnar, repeler o cualquier tontería... aquellas solo eran marcas de una mala infancia, una mala vida mas concretamente, ya que aunque algunas de las marcas se viesen realmente viejas, también se veían otras más recientes,.

Desvió la mirada en el momento que el chico se fue a girar y cuando sintió como le tendía la mano, alzo la mirada y le sonrió, cogiéndole la mano y con su ayuda poniéndose en pie, mirándole a los ojos.
Escuchó lo del dulce y al instante asintió con la cabeza. Por todo lo sucedido y el estar dormida casi aún ¡se le había incluso olvidado!

- ¿Tú no te quieres duchar? - Le preguntó ladeando un poquito la cabeza. - Sabes que hay muchas habitaciones y que tienen baño... y hay algunos baños también... o incluso te podrías dar una ducha aquí. - Dijo señalando el cuarto de baño que estaba en su propia habitación, en otras palabras, su baño.

- Puedes ir a fumar y luego volver y darte una ducha. - Le sonrió. - Una ducha calentita es muy agradable. E incluso un baño con mucha espuma. - Se rió un poquito pero terminó por morderse el labio inferior y callándose. - Bueno, me callo, yo ya te he dicho que si quieres puedes darte una ducha, yo iré a hacerlo, aunque igual si hay tiempo un bañito... en la universidad no se puede...

por **Adnan K. Yesenes** Miér Nov 21, 2012 9:54 am

Vio como se levantó grácilmente, el cuerpo tan pequeño de la chica le facilitaba muchas cosas y además, a su modo, estaba en forma. Ella no se daba a vicios y lo único “poco sano” que comía eran los dulces, que en realidad si eran hechos como aquel que él le había comprado seguía siendo sano, al menos de ingredientes más bien naturales.
Al oír lo del baño se encogió de hombros. No lo tenía entre sus planes, el chico no era muy dado a repetir baños a diario si no era necesario, vamos, que si pasaba calor, se duchaba, si hacía mucho ejercicio también, pero en ese momento no sentía necesidad.

Pero claro, siendo ella quien se lo proponía se lo estaba pensado, sobre todo porque no quería que pensara que era un guarro o igual es que olía un poco mal y por eso se lo había propuesto. Frunció el ceño un poquito.

- ¿Podría darme un baño aquí contigo? - su pregunta era un poquito atrevida, si, pero la dijo sin pensar, porque realmente si hacía aquello el bulto entre sus piernas jamás se bajaría y no era lo que necesitaba antes de ensillar al hipogrifo - bueno, no… no creo que sea apropiado… no ahora, no en tu casa. Si llega tu padre y nos ve bañándonos juntos lo mismo me deja sin futura descendencia.

Sabía que el padre de la chica era majo y lo había tratado muy bien ese verano, incluso había confiado en él. Pero de ahí a que le permitiera bañarse con su joven hija había un mundo y lo sabía, más aún en una cultura tan pudorosa como era aquella.
Abrazó a la chica y le dio un beso en la frente.

- Te espero en el comedor, preciosa, mejor me ducho en la escuela al volver, ir a los establos y tratar con el hipogrifo ya me dejará preparado para ello.

Lo dijo seguro, y en cuanto terminó fue para la puerta, ya se sentía demasiado tentado, mejor huir, fumar y ya se vería que más. Por supuesto había cogido la camiseta y ahora se la pondría también.

por **Park Hye Rang** Miér Nov 21, 2012 10:21 am

Vio como Adnan dudaba y se rió un poquito, lo que si que nunca se habría esperado fue aquello que le preguntó. ¿Que si se podían duchar juntos? Cerró los ojitos un momento y los abrió de nuevo para ir a responderle, sonrojada, pero antes de poder dar ninguna respuesta ya se había auto-respondido el egipcio. - S-si... mejor. - Le sonrió de forma tierna y suspiró un poquito, disimuladamente, calmándose al no haber tenido que darle aquella respuesta. Pero es que... ¡que vergüenza! - Aunque mi papá es muy bueno, no te haría nada malo. - O al menos eso era lo que ella creía.... a fin de cuentas era su papá el que tanto quería a su niña pequeña.

Sintió el achuchón y el beso, y tras que el egipcio hablase y ella asintiese con la cabeza, le dio un besito tierno sobre los labios antes de verle marcharse de la habitación con la ropa entre los brazos que, ella supuso, que se pondría mientras salía de allí, del cuarto.

Cuando la puerta de la habitación se cerró, se sacó la sudadera y fue enseguida al baño, donde no tardó en abrir el grifo de la ducha, dejar la ropa interior para lavar y se dio enseguida una ducha bastante rápida, tomándose lo que más de tiempo para lavarse el pelo, y tras salir y secarse por completo, ponerse un albornoz y salir a su habitación de nuevo para elegir que ropa se pondría para ir a montar al hipogrifo.

Le costó un poquito decidirse, pero finalmente se hubo decidido. Tras ponerse toda la ropa que escogió, colgante incluido, un gorrito por si tenía demasiado frío volando y una capa, cogió las deportivas y bajando con ellas en la mano, bajó hasta el comedor, donde estaba Adnan sentado tranquilamente en la mesa, ya con la tartita justo en frente, con dos platos en asientos contiguos, donde él estaba sentado y donde ella se sentaría – su lugar de siempre-.

- ¿Así voy bien vestida para ir a montar en hipogrifo? - Le preguntó con una amplia sonrisa, acercándose un poco más a él y sacándole la lengua. Las deportivas desparecieron de su mano, por arte de magia, probablemente alguno de los elfos y ahora estarían en la entrada. Agradeció al aire, al elfo que lo hubiera hecho, y en la misma mesita apareció una gama de bebidas que acompañarían al desayuno.

Ocupó su asiento y miró a Adnan. - Son muy buenos los chicos que tenemos aquí trabajando. - No le gustaba llamarlos elfos domésticos, le parecía que era una forma fea de llamarlos, de tratarles como inferiores como solía hacer la gente.

por **Adnan K. Yesenes** Miér Nov 21, 2012 10:40 am

Dudaba mucho que de verdad su padre fuera tan bueno como para no hacerle nada al hombre que se estuviera bañando con hijita querida, desnudos por completos y a solas. Cualquier hombre, cualquier padre, sentiría toda la furia del mundo contra el hijo de puta que intentara hacerle guarradas a su hija del alma y en su propia casa, a él le sonaba a burla, suponía que al padre de ella también, aunque claro, él era muy celoso con sus cosas, podía imaginarse a su futura hija (demasiado parecida a Rang) y él, incapaz de verla con ningún chico. Estaba seguro de que sería de esa clase de padre, si es que algún día llegaba realmente a ser padre.

Por supuesto de todo eso no le diría nada a ella, ya se sintió bastante estúpido por poner cara de idiota al imaginarse a una mini Rang, no tenía la necesidad de encima exteriorizarlo y decírselo a ella y espantarla aún más, que lo que le faltaba para tener la vida sexual más pausada aún era que la chica se pensara que él quería empezar a tener hijos ya.

Él, por su parte, se fue al patio exterior de la casa. La familia de ella vivía en un acomodado barrio con la seguridad anti muggles activada – podían pasar, pero lo más que verían serían casas abandonadas y calles con el peor aspecto posible – y por lo tanto era un barrio muy tranquilo. Miró al cielo, allí parecía despejado, en Egipto siempre lo estaba, así que por el hecho de ir a volar no tendrían que preocuparse. Se encendió un pitillo, normal, la decisión de dejar la droga estaba en marcha, la dejaría muy poco a poco, lo sabía, pero ahí estaba la intención. Viva.

Terminó de fumar tranquilamente, dándole tiempo a ella para hacer todo lo que quisiera y en cuanto estuvo listo hizo desaparecer la colilla y entrar a la cocina para mandar a que preparasen todo y simplemente esperarla. Y sonrió al verla, estaba tan bonita como siempre, y se había puesto el collar. Sonrió abiertamente y le hizo un gesto para que se acercara y pudieran comenzar a comer juntos.

- Siempre vas bien vestida para todo - dijo bromeando un poquito y después asintió más serio - si, estás muy bien, mira como iré yo, así que nada de preocuparte. Supongo que eso es una capa ¿no? Supongo que allí no hará falta, aunque también es otoño está muy al sur así que hará muchísimo menos frío que aquí, incluso puede que un poquito de calor.

Él se quedó por un momento mirando las bebidas que habían aparecido en la mesa y escogió de nuevo un café, parecía más bien suave pero igualmente le vendría bien, cogió también la cucharilla para empezar a comer

-Supongo que sí, trabajan bien… es lo que deben hacer - lo dijo sin darle demasiada importancia, era obvio que ellos solo vivían para eso, no había que halagarlos en absoluto, no tenía sentido - pruébala tu primera… quiero saber si te gusta…

por **Park Hye Rang** Miér Nov 21, 2012 11:41 am

Sonrió satisfecha la haber elegido bien la ropa, pero cuando escuchó lo de la capa la miró y terminó por dejarla en el respaldo de la silla y la mochila a un lado en el suelo. - Bueno, no pasa nada, puedo guardar la capa en al mochila y así no molestará, y cuando volvamos a la universidad puedo sacarla para no tener frío. - Le sonrió de forma tierna y le sacó la lengua, después suspirando un poquitín mientras miraba las cosas que había encima de la mesa.

Se decidió por coger un vasito de leche para acompañar al pastel y tras alcanzar una cucharita, escuchó como Adnan le decía aquello. Se rió un poco y le sacó la lengua. - Bobo... ya la probé ayer. Y tu un poquito también. - Se rió y cogió un pedacito, llevándoselo a la boca,haciendo un ruidito que indicaba que estaba realmente rica. - Me gusta. - Dijo aún con algo de comida en la boca pero cubriéndose con la mano.

Miró fijamente a su novio y sonrió de manera amplia, no tardando en acercarse el vaso de leche para dar un traguito antes de, tras ver como Adnan también cogía un poco, partir la tarta en dos mitades, y sirviéndose ella un pedazo sobre el plato que tenía delante.

Se puso a comer de forma tranquila, disfrutando realmente de aquél dulce que había escogido Adnan para ella, como un regalito más, y suspiró un poco, alzando la vista a mirarle atontada, con algo de nata habiéndole manchado el labio inferior. - Mm... - Emitió aquél sonidito, estaba pensando, pero no querría haberlo soltado, pero como ni cuenta se dio, siguió ella misma inmersa en sus propios pensamientos.

Estaba pensando en que quería regalarle alguna cosita a Adnan. Sabía que no era su cumpleaños y que aún quedaba bastante para que lo fuera, pero a ella le apetecía regalarle alguna cosa, para no sentirse tan mal por haber hecho que Adnan se gastase tanto dinero en ella... era un bobo, no tenía que haberse gastado tantísimo dinero. - ¿Hay algo que quieras mucho? ¿Algo que quieras tener? - Aquella preguntas fueron muy directas, pero no quería equivocarse...

Si no le respondía a aquello, le diría a las claras si había algo que quisiera que ella podría darle, así ya se iría esperando recibir algún regalito de ella y no se podría quejar, ¿no?

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